Cap. 27

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Aviso desde el principio, yo se que me salte mucho tiempo en estos capítulos, pero es que en realidad no nos perdemos de nada ChocoRaza, así que no me maten, lo amo.

4 años después

/Dimitrius/

11 años, hace un mes cumplí 11 años, la fiesta fue grandiosa y los regalos también, cualquiera que me viera diría que soy un niño mimado y en cierta manera lo soy un poco, pero que más da, así soy feliz.

-Severus tu ve y compra los calderos y esas cosas raras que tu pediste para tu clase, yo voy a por los libros del monstruo- dijo mamá y yo sonreí, era feliz con mi familia, papá parecía ser frío pero no era nada de eso, es cariñoso y mamá, ufff mamá es la mejor mujer del mundo.
- por lo menos doy pociones y no ayudo a el profesor de encantamientos- hablo papá.
- no ayudo, soy profesora y por si no te lo informo Albus también daré clases de DCAO a segundos, cuartos y sextos - papá la miro con sorpresa.
- es injusto, llevo pidiendo el puesto durante años y siempre me lo niega y a ti te deja compartirlo con además otra materia en tu primer año de profesora- dijo papá frunciendo el ceño.
- te amo Severus - dijo mamá y lo beso.
-iugh - dijo con asco y papá me miró con su mirada de "estas muerto"- ¿puedo ir yo por mis túnicas? Draco me dijo que me esperaría fuera de la tienda de Madame Malkin- dije sonriendo.
- nos vemos en 30 minutos fuera de Flourish y Blotts - dijo mamá - te amo Monstruo - me dio un beso en la mejilla y se fue dejándonos a papá y a mi solos.
- toma- papá me entregó un pequeño saco de terciopelo negro en la mano- para que pagues y por si se te atraviesa algo que te guste, pero no le digas a tu madre que te di de más- dijo serio y yo asentí.
- gracias papá - le sonreí.
- anda, vete ya monstruo- hablo y sonrió de medio lado y yo corrí por el callejón hasta llegar a la tienda de túnicas donde ya se encontraba draco.
-pero que elegancia Dimitrius - dijo mirándome de arriba a abajo, y es que mi madre me había hecho ponerme un pantalón de vestir negro, una camisa de mismo color, un suéter gris y una túnica de salir junto con unos zapatos de piso también negros.
- es lo de menos, soy Snape, la elegancia va conmigo - dije en tono gracioso y el rió.
- si tu lo dices- dijo sonriendo- vamos adentro- asentí y entramos en la tienda.
- buenos días guapos ¿paquete de hogwarts?- pregunto mándame Malkin.
- por favor Madame Malkin- dije con una sonrisa y ella asintió.
- pasen y suban en un banco.

Nos tomó medidas y después nos dio las túnicas, pagamos y salimos de ahí, pasamos a comprar un par de ranas de chocolate mientras caminábamos por el callejón, nos detuvimos al mirar una escoba.

-me parece estúpido que no nos dejen llevar nuestra propia escoba al colegio - dijo Draco frunciendo el ceño.
- no eres el único que opina eso, te aseguro que si se pudiera este mismo año entraba al equipo de Quidditch de mi casa--dije seguro.
- ¿sabes que casa quieres? - pregunto intrigado alzando una ceja.
- hasta la pregunta ofende - lo mire- iré a Slytherin como mis padres, ambos sabemos que es la mejor casa.
- me comenzaba a preocupar que pensaras distinto - dijo con una sonrisa soberbia - escuche un rumor- dijo mirándome.
- te he dicho mil veces que no seas chismoso Draco, no es bueno escuchar a tus padres hablar a escondidas- volví la vista a la escoba.
- los Potter entraran a Hogwarts éste año - dijo sin más y lo miré sin expresión en mi rostro.
- ¿y eso por qué necesita importarme? - dije sin entender.
- olvídalo, no estás listo para esta conversación - suspiró.
- yo solo digo que no es algo relevante para mi - dije mirándolo con incredulidad.
- vamos a Florish y Blotts nos deben estar esperando.

****
/Kasandra/

Como pasaba el tiempo, hace nada tuve a mi bebé y ahora está a un día de entrar a Hogwarts.

-¿qué compraste? - pregunto Severus llegando a mi lado.
- sus cuadernos, plumas y otras cosas que necesitará- dije sonriendo- solo faltan los libros.
-eso fue rápido para 30 minutos ¿acaso eres bruja? - pregunto sonriendo y agarrándome de la cintura.
- si lo soy - sonreí siguiendo su juego.
- comienza a darme miedo entonces señora Snape - dijo besando mi mejilla.
- tendría que tenerlo señor Snape, tal vez lo tenga hechizado y sea mi esclavo sexual- susurre.
- esa idea no me es desagradable del tod...- hubiera terminado si no es que cierto rubio, con cierta rubia con cierto rubiecito y cierto pelinegro llegaron.
- hola hola par de tortolos, casi 19 años de relación y aun la llama del amor sigue intacta - dijo Lucius.
- ¿a caso la tuya no? - pregunte con burla.
- a veces me harta de tanta tontería que dice, pero ya me case y tengo un hijo con el, no lo puedo devolver- dijo bromeando Cissy.
- siempre supe que eras un idiota Lucius - dijo burlándose Severus.
- y tu un amargado grasiento - se defendió Lucius y todos soltamos una risa.
- ¿vamos a entrar? - pregunto Dimitrius.
- vamos - hablo Severus.

Compramos los libros y otros extra que pidieron Severus chiquito y Severus grande, después fuimos por la varita de Dimitrius y Draco, salieron encantados con ellas, Dimitrius ya había usado antes la mía y la de su padre ya que queríamos que entrará con cierto nivel de aprendizaje además el niño mostraba mucho interés por lo mismo, por lo tanto tener la propia lo ponía muy feliz, era de roble con núcleo de fibra de corazón de dragón y pluma de fénix, flexibilidad media de 30 centímetros. Después pasamos a comprarle una lechuza, era negra en su totalidad con ojos color azul, a la cual puso por nombre Ares, después de terminar las compras Draco casi se puso de rodillas para poder quedarse en la mansión con nosotros, sus padres accedieron diciendole que el se llevara sus cosas recién compradas y que ellos llevarían mañana a la estación el otro baúl con ropa y demás, el no se preocupaba por pijama o ropa para ponerse el día siguiente ya que tenía su propio cuarto en la mansión así como Dimitrius tenía un cuarto en la mansión Malfoy, aunque en realidad siempre terminaban durmiendo en la mayoría de los casos en el mismo cuarto. Nos despedimos y volvimos a la mansión, los niños subieron corriendo a la habitación y Severus y yo nos fuimos a nuestro cuarto.

-¿sabes que necesito? - le dije a Severus tumbandome en la cama boca abajo.
-¿qué? - pregunto el quitándose los zapatos y cambiandose a su ropa de casa, que era un short negro y una playera blanca.
- un masaje y mucho cariño - dije mirándolo, el sonrió y se subió en mi.
- ¿eso necesitas? - pregunto poniendo sus manos en mis hombros.
- casi como el oxígeno - dije disfrutando del tacto.
- entonces eso tendrá mi bella esposa - siguió masajeando y yo sonreí.
- no me canso ni me cansaré de decírtelo, eres el hombre perfecto y el amor de mi vida- dije feliz y el se acercó a mi mejilla y me dio un beso.
- no lo soy, soy un hombre como otros pero te trato como lo mereces tu y Dimitrius - dijo y se acostó a mi lado, me voltee a el y pase mi mano por su cabello.
- Te amo- dije mirándolo a los ojos.
- yo te amo mucho más- hablo con medio sonrisa y me beso.
- espero sea diferente con sus alumnos Profesor Snape- dije acariciando su mejilla.
- lo sabrá éste año Señorita Robinson- dijo y me puso debajo suyo- te necesito- susurro y yo me sonroje.
- hoy no, Draco está en casa y sabes que ese par no se saben quedar un rato quietos- dije sonriendo y le di un beso en la nariz.
- hoy te salvas, pero pronto no será así - hablo y se puso de nuevo a mi lado.
- ¿vamos a la biblioteca por un libro y después a la sala a leer? Tengo ganas de leer a Julio Verne- dije y me pare de la cama.
- vamos - dijo y se levantó.
- solo deja me cambio y listo- camine al closet y abrí la puerta para entrar al cuarto.
- ¿y si me dejas desvestirte? - iba detrás de mi.
- SEVERUS - me puse super roja.






****

/Dimitrius /


Desperté como a las 9 de la mañana y aún me faltaba hechar una cosa que otra a uno de mis baúles Draco se había levantado unos minutos antes de mi he iba entrando al cuarto con un licuado de fresa y un sandwich de Nutella.

- dice mi tío Severus que te apures y que nos bañemos, nos cambiemos, y después le hablemos para que venga por los baúles - dijo mordiendo el sandwich.
- ya voy - dije metiendo un par de libros a mi baúl y cerrandolo- sal de aquí y vete a tu cuarto que no planeo prestarte mi bañera - dije caminando al cuarto.
- si tengo la mía no necesito pedir la tuya- se encogió de hombros- nos vemos en 20 minutos en el pasillo.


Draco salio de mi cuarto y yo entre a mi closet, escogí un pantalón gris a cuadros, una playera negra y un suéter negro junto con unos tenis negros con blanco, entre al baño y solté mi cabello, deje la liga en el lavabo y trate de bañarme lo más rápido que pude, me sequé el cuerpo y el cabello y me cambie, me puse una colonia que mi mamá me compra desde que tengo memoria y a mi parecer huele muy rico, es como maderoso pero dulce a la vez, me desenrede el cabello y la liga la volví a poner en mi muñeca, me miré al espejo y sonreí, salí del baño y guarde mis cosas personales en el baúl, miré a mi lechuza.

- hoy conocemos Hogwarts Ares - le dije a mi lechuza.

La Copa De La Vida  [Severus Snape]Where stories live. Discover now