"¡Vete al infierno!"
"De ahí vengo, ángel. Y, no hay forma de que me hagas volver"
Ambos estaban perdidos, en un lugar al cual no podían llamar hogar. Mientras que su mente lo único que lograba era confundirlos y no hacer nada fácil su estadía. Los...
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Young And Beautiful – Lana Del Rey
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—Su cabello, ¿por qué su cabello es negro? ¿Por qué tenía recuerdos? ¿Por qué perdió su poder? ¿Por qué-... sufrió? Sabes que no merecía nada de eso —estaba molesto, lleno de furia en su interior. No le importaba lo más mínimo delante de quien se encontrara. Solo quería respuestas.
Un ángel vino en su búsqueda en el instante que sus ojos se cerraron. Estaba demasiado confundido; asustado, pero su mente en lo único que pensaba era el ser que de ojos verdes que no parecía estar en ningún lugar. Todavía estaba preocupado por él y sentía la necesidad de encontrarlo. Pero, acá estaba.
Estaba delante de la culpable de todo su sufrimiento, o quien se encargó de moverlo como una perfecta pieza de ajedrez en ese mundo y este. Fue usado como parte de una retorcida trampa para que dos partes pudieran obtener algo a cambio. La idea lo desesperaba, pero lo único que quería ahora era respuestas. Nada de esto parecía aún tener alguna clase de sentido.
Toda su vida- vidas parecían haberse convertido en una clase de mentira.
—Lucifer creyó que sería la única forma que funcionara, porque yo me negué en echar a Michael. No sabes cómo lo lamento, Luke —su ceño seguía fruncido, mientras Ella parecía completamente arrepentida por todo. Su mirada era cálida, hasta el punto de transmitirle una clase de paz en el interior —. Claro que sé que ninguno de los dos merecía algo así, pero no hice algo que fuera a cambiar sus destinos. De todas formas, hubieran acabado de la misma manera. Quería darles otra oportunidad.
—¿A qué te refieres? —entrecerró los ojos, viendo a la rubia mujer en ese alto trono lleno cubierto en un barniz dorado. Ella le sonrió.
—Ustedes dos hubieran sido dos almas más, sin conocimiento el uno del otro; solo un par de ángeles que no tendrían una clase de recuerdo. No quería que su historia acabara con ese final tan desgarrador. Por eso-
—Hiciste que Michael me recordara, acá —Ella asintió. Eso hacía que todo tuviera algo más de sentido —. Pero-... no tenías control, pudiste haber... perdido. A Calum, a Ashton, a todos. ¿Te arriesgaste a eso?
—No me arriesgué, Luke —la rubia mujer se puso de pie, para luego pararse en su delante. Su suave mano acarició su mejilla —. Siempre tuve fe en ustedes. No necesitaban indicaciones, ninguno de ustedes, para seguir sus corazones. Algo que, supe que harían desde un comienzo. Son mis ángeles, los conozco mejor que nadie.
—Ángeles... —Ella asintió, quitando la mano de su mejilla —. Michael. ¿Dónde está?
Su mente volvió a recordar al ser de ojos verdes. No sabía el paradero de la persona que atravesó todo esto a su lado. Ni siquiera sabía si seguiría existiendo en este plano.
