Tenebris

4

XiaoJun

Regresé al primer párrafo de la misma pagina del libro por tercera vez, siempre me había jactado de tener una alta concentración independiente de lo que esté pasando a mí alrededor, pero ahora con KunHang y YangYang casi gritando y con RenJun hablando sin parar sobre el nuevo de cabello azul las palabras no conseguían quedarse en mi mente.

—¡Sacó ochenta y nueve en la teoría y noventa y siete en la práctica! —gritó RenJun— ¿Quién consigue tales notas sin saber absolutamente nada del tema?

—Oh vamos, RenJun. Tú sacaste cien en la teórica y noventa y nueve en la práctica. —replicó Hendery.

—Llevaba años leyendo y practicando. JiSung no tiene conocimiento de este mundo y aun así sacó una mayor nota que la mitad de los nuestros.

—Tiene un punto, Dery. —acotó YangYang.

—¿Podrían hablar sobre el nuevo en otro lugar? —me quejé— Estoy intentando cambiar de página desde hace varios minutos y por su culpa no puedo.

—No seas quejica, DeJun.

Rodé los ojos con fastidio y cerré mi libro. Ya tendría otra oportunidad para terminarlo.

Debo admitir que las altas calificaciones del novato me sorprendieron un poco, más aun considerando el que no sabía lo que era hasta hace unas semanas. De todas formas, me parece que lo están alabando innecesariamente, las preguntas de podían responder con simple intuición y lógica, no era nada extraordinario el que haya acertado casi todas.

—Yo digo que deberíamos invitarlo a que se una. —alcé una ceja en desacuerdo.

—Tampoco te pases, Yang. Azulito será un prodigio y todo, pero apenas han pasado tres días de su llegada y esos exámenes son lo único excepcional que ha conseguido. —Hendery tenía razón en eso.

—¿Tú qué piensas, Kun-ge? —preguntó RenJun.

Miré al mayor con anticipación. Personalmente, creía que la idea del nuevo uniéndose al grupo tan rápido era completamente estúpida y arriesgada. Como Hendery dijo, JiSung apenas tenía tres días en la institución y ni una sola acción remarcable aparte de la prueba. Llamarlo ahora para después echarlo al darnos cuenta de que en realidad no era lo que pensábamos podría resultar contraproducente en el futuro.
Aunque Kun tenía la última palabra.

—No podemos quitarle el mérito de las notas inesperadamente buenas, pero tampoco hay que apresurarnos. No haría mal evaluarlo por unas semanas más.

—¡Se los dije! —Hendery alzó los brazos.

—Shut the fuck up, KunHang. —le respondió YangYang en inglés.

—Cuida el lenguaje, YangYang.

—Lo lamento. —era obvio que no lo lamentaba.

Además de la pequeña discusión que se acababa de llevar, había otra cosa en mi mente que me estaba atormentando. Los Lee, como todos los años, han organizado una fiesta de bienvenida, y nosotros estamos invitados. Mi madre confirmó su asistencia como todos los años, aunque esta vez sería diferente. Ella me quería presente.

A diferencia de Kun o RenJun, yo nunca he interactuando con otras castas. Es más, las únicas personas con las que converso son estos cuatro chicos. El asistir a una gran reunión que no sólo tenía a vampiros como anfitriones, sino que también estaban invitadas las demás castas me ponía inquieto. No sabía qué esperar. Es cierto que no han habido incidentes en este tipo de celebraciones desde hace años, mas nada me aseguraba que esta ocasión no sea la excepción.