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Capítulo 50 - Tú y yo

Después de releer toda la carta intentando escoger algo para cenar, por fin logro decidirme por algo.

-Disculpen, ¿qué van a querer para beber? -Interviene el camarero.

-¿Os apetece un vino blanco? -Sugiere Jackson mirándonos a los tres.

-Por mi bien -responde mi amiga a posteriormente Caleb y yo asentimos.

Poco después el mismo camarero vuelve esta vez a pedirnos nota sobre los entrantes y el plato de cada uno.

-¿Alguna vez has venido aquí Jackson? Porque yo nunca -dice mi amiga.

-Yo menos -río.

-Yo he venido algunas veces con mis padres a celebrar actos del trabajo de mi padre o cumpleaños. Se come muy bien, no os arrepentiréis -nos sonríe con complicidad.

-Oye cariño, no tenías que contarles algo... -dice Madison mirando a su novio con complicidad, Jackson la mira sonriendo de lado y a continuación su vista se fija en nosotros.

-Así es, tengo algo que deciros.

-¿A qué esperas? -dice esta vez Caleb.

-Me han aceptado una beca para estudiar en una universidad en Roma, la beca es de baloncesto, obviamente.

-¡Enhorabuena! -decimos mi novio y yo al unísono e inmediatamente sus manos chocan, Madison y yo nos miramos con complicidad porque eso me lo ha dicho justo esta tarde.

-Muchas gracias chicos, la verdad es que estoy contento. Y bueno, ¿tú qué vas a hacer Caleb?

De repente el camarero interviene y abre el vino dejándolo encima de la mesa.

-Creo que voy a hacer humanidades pero no lo tengo claro todavía.

-¿Y por qué no hace la carrera artística? -interviene Madison.

-¿Por qué dices eso? -Caleb sonríe sin entender nada.

-Annie me ha enseñado el dibujo que le regalaste en navidad. Caleb, tienes un talento increíble, deberías dedicarte a esto.

-¿Cómo? ¿Desde cuándo dibujas tío? -Dice Jackson con incredulidad.

De repente siento un ligero apretón en mi muslo y sé lo que quiere decir y sé que me voy a llevar un poco de bronca cuando lleguemos a casa esta noche.

-No es para tanto Jackson, tranquilo -Caleb sacude la mano restándole importancia.

-Por dios Caleb, no seas modesto. Annie, enséñale a Jackson la foto.

Suspiro profundamente, cojo el móvil ya que Caleb no ha pronunciado ni una sola palabra. Busco la foto y le presto el móvil a Jackson para que lo vea, Madison no puede evitar volver a echar una ojeada.

-¡Wow! Esto es un jodida pasada Caleb.

Caleb ríe negando con la cabeza.

-¿Ves como no pasa nada? -Susurro en su oído poniendo mi mano en su pierna.

-El dibujo es precioso. Un día de estos podrías pintarnos a Mad y a mí -sugiere Jackson.

-Pues la verdad es que me encantaría. Un día quedamos los tres y podamos para ti mi chico y yo, ¿verdad? -Dice Madison mirando a su novio, Jackson asiente mirándola y acerca su rostro al de ella dándole un pequeño beso.

La ceja no tarda en llegar y cuando llega el postre Jackson pide una botella de champán y brindamos los cuatro juntos por nosotros, por nuestro futuro y por ser el día de San Valentín.