Capítulo 20

10.8K 973 736
                                    

Nuestra vida había vuelto a la normalidad, o al menos por ahora. Mientras yo asistía al colegio, Nick había vuelto a trabajar en el bar y seguía estudiando medicina. Todos los días, él me iba a buscar al colegio y pasábamos al menos un rato juntos, pues no podía descuidar sus estudios y, en cuanto mí, los exámenes de ingreso se acercaban; aún debía escoger una carrera universitaria, pero si bien tenía buenas notas, no me destacaba en ninguna asignatura en particular.

Nick seguía diciendo que yo podría ser un buen enfermero, pero aún no me decidía; tal vez me siento inseguro porque debo atender a muchas personas enfermas, y mis sentimientos son demasiado frágiles para soportarlo.

Hoy sábado había quedado con Elliot para ir a ver una película. Cuando llegué al cine, él ya estaba esperándome en la entrada. Íbamos a ver Avengers: End Game.

—Compremos unas papas fritas y alguna bebida —sugerí. Fuimos al kiosco del cine y compramos unas Lays y dos Coca Cola.

Buscamos un lugar en el medio, donde no estábamos ni muy lejos ni muy cerca de la pantalla. Como la película era en 3D, debíamos usar los lentes; Elliot no veía bien de lejos, por lo que tuvo que usar los lentes 3D sobre los de ver.

—Te ves ridículo —me reí. Elliot sonrió y se encogió de hombros.

Por fin podíamos pasar tiempo juntos después de mucho.

~★~

Salimos de ver la película y nos sentamos en un parque que se encontraba a unas cuadras del cine.

—Es genial, pero el final es tan triste —sollocé como si fuese un niño. Elliot sacó un pañuelo y me lo tendió.

Ya eran las 7 de la tarde y comenzaba a oscurecer. No habíamos hecho planes de cenar ni nada, pero Elliot terminó acompañándome a casa y lo invité a pasar.

Mis padres lo saludaron alegremente, diciendo cosas como "hace tiempo no te vemos" o "cada día estás más guapo". Me avergonzaba que hablaran así con él, así que lo invité a mi habitación. Mi madre comenzó a preparar la cena y me avisó que incluiría a Elliot.

Subimos a mi habitación y nos instalamos en el suelo, junto al televisor, dispuestos a jugar en la play.

Mi celular comenzó a vibrar en mi bolsillo, por lo que pausé el juego y contesté.

Holla, belleza. ¿Qué estás haciendo?

Sonreí al escuchar la voz melosa de Nick, mirando hacia atrás para confirmar que Elliot no estaba escuchando.

—Ah, nada, estoy con Elliot jugando en la play —respondí. Me pareció oír que Nick chasqueaba su lengua.

—¿Quieres cenar conmigo? Ed salió con su novio, por lo que estoy solo hasta tener que ir al trabajo.

—Ah, me encantaría, pero Elliot se quedará a comer. Ya sabes, mi madre lo invito y... —Nick me interrumpió.

—Está bien, adiós.

Después de eso colgó la llamada. El tono frío con el que se había despedido me inquietaba, pero no era mi culpa no poder ir con él. Aún así, ¡pasamos todos los días juntos! No está mal que un día esté con mi amigo.

Dejé el celular de lado y volví a jugar junto a Elliot. Mientras estábamos jugando, comenzó a hacerme preguntas:

—¿Era tu novio? —preguntó, mirándome de reojo.

Polos opuestosWhere stories live. Discover now