Como un radar, mi corazón se acelera cuando se aproxima un fenómeno que jamás antes había detectado. Quiero que todo sea un sueño y que en realidad...
Nunca hubieras aparecido en mi vida
-Te voy a querer siempre, JungKook.
-¿Siempre?, ¿Eso no es de...
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- Kim Taehyung -llamó el de menor estatura estando a una distancia considerable de mí, mostrándose serio como habitualmente estaba.
- Señor Min, es bueno verlo-
- ¿JungKook dónde está? Tú deberías saber.
Me cortó el de cabellos cenizos, juntando sus dos grandes manos delante de su torso. Quien se mostraba alerta por la cantidad de miradas que no paraba de recibir.
Ladeé la cabeza cuando caí en cuenta por quién me había preguntado, ahora viniendo todo de golpe a mi cabeza y...
En parte la razón por la que JungKook está sufriendo un ataque de estrés fue por lo sucedido hace unas horas. Porque algo tan repentino no puede soltarse de golpe y-
Yoongi carraspeó ante mi reacio silencio.
- Supongo que tú también ya te has enterado y seguro te han dado la orden de no dejar ver a JungKookie -el mayor mordió sus labios rojizos por algún bálsamo, sus ojos brillando ante la mención de dicha persona- Pero necesito al menos saber que está bien y que no me odiará después de lo que hice.
Tragué hondo, midiendo la forma en la que me refería a un mayor que yo, y por lo tanto, reteniendo preguntas que desde un principio se mantenían formuladas.
¿Por qué lo hiciste si sabías las consecuencias que traería?
- Señor Min, ¿me permite opinar sobre algo?
Sus hombros se tensaron al igual que su mandíbula, conteniendo la respiración en lo que asentía con la cabeza.
- No quiero parecer que me estoy metiendo en problemas que no me pertenecen, pero soy el guardaespaldas de Jun- señor Jeon y- ¿Por qué has declarado su amor hacia él de una manera tan...perjudicial?
El mayor pero aun así de menor estatura llevó sus manos a la barbilla, quedándose callado por los siguientes minutos sin saber cuál sería la respuesta correcta para aquella interrogante. Mas me inquietaba de cierta manera, no iba a descartar esa parte, porque joder, era algo que ni yo mismo podría evitar.
Era mío, aunque fuera de la utopía, me costaba encontrarme con la realidad de que... en algún momento todo tiene su punto final.
Min Yoongi abrió la boca después de formar algunas oraciones por dentro de sí.
- Nada es mentira de lo que dije, quiero que lo sea, ¿sabes? No es fácil lidiar todo el tiempo con unos sentimientos retenidos que sabes que no son los correctos -comenzó diciendo, su vista ya no estaba en mis ojos, sino que miraba fijo la punta de sus zapatos lujosos. Y sonaba tan irónico aquello que de tan sólo pensarlo, entendía cada una de sus emociones- Sé que JungKookie no me corresponderá, pero al menos me iré sabiendo que hice todo lo posible para cuidarlo y amarlo como a nadie.
