KINKY ❁્᭄͜͡ draco Malfoy

FOURTEEN

Puedo arreglarlo.

—Tendré que irme por hoy—explicó el Sr. Zabini a la clase—El Sr. Malfoy se hará cargo.

Rose se sentó en la recepción, sólo que estaba directamente frente a la mesa de profesores, y este era su asiento permanente a partir de ahora en la clase de astronomía. Habían pasado dos semanas desde que ella y Draco tuvieron sexo en la ducha, y ella lo ansiaba. Pero él se hacía el difícil, diciendo 'no debiste drogarte', y castigándola.

Y ella detestaba no saber que hacer para  recuperarlo.

Llevaba puesto su uniforme escolar con sus túnicas sobre los hombros, y tenía el pelo suelto, sus rizos naturales fluyendo hacia sus hombros. Cuando el Sr. Malfoy entró en la habitación, ella lo miró directamente a él

y él la miró directamente.

Allí continuó el contacto visual, hasta que se sentó en el escritorio de los maestros, y el Sr. Zabini se separó y salió del aula. Draco cogió unos papeles, y golpeó su varita con la otra mano, haciendo que los papeles volaran hacia el escritorio de cada estudiante sin siquiera levantarse.

Pero cuando el Sr. Malfoy miró a Rose, sonrió y levantó disimuladamente su falda para revelar que no llevaba ropa interior. Y cuando vio esto debajo del escritorio, su respiración se enganchó, y quedó atrapado en su garganta mientras sus ojos permanecían fijos allí.

Así que le dio un pequeño espectáculo.

Ella estaba extendiendo sus pliegues, desplomándose en el asiento aún más y extendiendo las piernas. Rose sumergió un dedo dentro de su corazón, y saboreó el placer que le dio. No se parecía en nada a los largos dedos de Dracos, y ciertamente no desprendía tanto placer, pero funcionaría por ahora.

Se abrió la boca al mismo tiempo Draco se movió en su asiento, mirando nerviosamente a su alrededor para ver si alguien había visto lo que estaba haciendo, pero todo el mundo estaba centrado en la hoja de trabajo allí, y también estaban detrás de Rose de todos modos.

"Deja de hacer eso"

Ella se sonrió a sí misma, y luego añadió otro dedo dejando salir un pequeño suspiro que sólo Draco podía oír y estaba tragando muy duramente.

"No me has tocado en dos semanas."

"Te drogaste. Ese es tu castigo."

"Bueno, esto es el tuyo."

Sus ojos se volvieron un profundo tono de plata, lujuria arremolinándose en ellos por todas partes. Ahora se estaba frotando el clítoris, y cuando estaba a punto de soltar un gemido, ella solo sonrió y apartó sus dedos, llevándolos a sus labios regordetes y girando su lengua alrededor de ellos.

" ¿Estás satisfecha, maldita sea? No puedo levantarme, Rose."

Ella sabía a lo que se refería, y sonrió de nuevo sacando sus dedos y limpiándolos en su falda antes de recoger su pluma.

"Yo puedo arreglar eso."

Él simplemente la miró, y ella terminó su trabajo pensando en estar con él después de clase.

***

Cuando sonó la campana, Rose se sonrió a sí misma.