[B2] Transmigré al cuerpo del villano ahora trataré bien al protagonista

201. No me siento disgustado en absoluto

A diferencia de Ke Ruan, Si Yuhan estaba obviamente bastante feliz.  Había desarrollado suficiente paciencia con Ke Ruan en el pasado.  Pero ahora se podía encontrar algo de ternura y calidez en su paciencia.

Ke Ruan descansó un rato y sintió que su dolor no era tan doloroso.  Así que dijo con voz ronca: "Suéltame".

"No te sientes bien.  Sé bueno."

Ke Ruan, “…” En el pasado, esto era lo que le decía a Si Yuhan.

Pero ahora, Si Yuhan le estaba diciendo lo mismo de una manera bastante peculiar.

"Estoy bien.  Estoy muy bien."  Ke Ruan dijo mientras apretaba los dientes.

Si Yuhan se rió entre dientes y quiso decir algo cuando alguien comenzó a tocar la puerta.

"Su Majestad, es hora de que vaya a la corte imperial".  Xiaoluzi dijo en voz baja.  El Emperador nunca había llegado tan tarde en el pasado.  Pero hoy, el Emperador todavía se encontraba en el palacio en ese momento.

Por lo general, la mitad de la corte imperial se había terminado en este momento.  Xiaoluzi realmente estaba arriesgando su vida para decidir venir a llamar a la puerta.

"No iré a la corte hoy".

Obviamente, la voz llegó con un tono alegre.  Xiaoluzi estaba un poco sorprendido y se preguntó si estaba alucinando.

Xiaoluzi dijo que sí en voz baja y se fue.

"No aprendas a ser un gobernante fatuo y autoindulgente", murmuró Ke Ruan.

"No es nada.  Me gustaría ser el Rey del Infierno si así lo deseas ".  Si Yuhan le susurró al oído a Ke Ruan.

“Ya eres el Rey del Infierno.  Además, no te acerques demasiado a mí ".  Ke Ruan frunció el ceño y quiso mantenerse un poco alejado de él.  Pero para su sorpresa, Si Yuhan lo abrazó aún más fuerte.

"De ninguna manera.  Somos marido y mujer.  Es bastante natural para nosotros acercarnos, no importa cuán cerca estemos ".

Ke Ruan, "..." 'Realmente quiero que te calles'.

Ke Ruan dejó de hablar y Si Yuhan preguntó: "¿Es doloroso?"

Ke Ruan, "..."

"¿Por qué no me respondes?"

Ke Ruan realmente no sabía cómo responder la pregunta.  ¿Se suponía que debía decir que no era doloroso en absoluto, o que era extremadamente doloroso?

Ke Ruan descubrió que su respuesta debía ser lo suficientemente extraña sin importar lo que dijera.  Ke Ruan estaba lleno de arrepentimiento en ese momento y se preguntó por qué no rechazó la oferta de Si Yuhan y qué le pasaba a él.

"Quiero descansar", dijo Ke Ruan débilmente.

"Bien"  Si Yuhan abrazó a Ke Ruan y se recostó en la cama.  Abrazó a Ke Ruan con fuerza y ​​dijo: "Déjame acompañarte".

"No…"

Si Yuhan dijo: “No puedes negarte.  De lo contrario, creo que no estás realmente cansado y comenzaría a considerar tener otros juegos interesantes entre nosotros ".

Obviamente, eso era una amenaza, pero ese regalo fue muy útil para Ke Ruan porque Ke Ruan realmente se estaba quedando obedientemente dentro de los brazos de Si Yuhan y no se atrevía a moverse más.

Ke Ruan ya no podía aceptar ningún juego.  Pensó que era simplemente una excusa de Si Yuhan y que apenas podía conciliar el sueño.  Pero para su sorpresa, rápidamente se durmió poco después de acostarse en la cama.

Si Yuhan escuchó la respiración constante de Ke Ruan y mostró una sonrisa más grande, pensando 'Por fin hemos estado juntos.'

Además, no importa ahora y anoche, Si Yuhan incluso podía sentir que no era repugnante para Ke Ruan en absoluto.  Podía sentir la aceptación de Ke Ruan e incluso la preocupación por él, sin ninguna resistencia en absoluto.

Este fue el hecho más feliz que jamás encontró.  Así que todas sus preocupaciones habían desaparecido de inmediato.  Lo que Si Yuhan quería hacer era amar y preocuparse por Ke Ruan.

Cuando Si Yuhan pensó en las noticias de los guardias secretos anoche, un destello de oscuridad y crueldad apareció en el fondo de sus ojos oscuros.  Nunca dejaría ir a nadie que quisiera incriminarlo a él y a Ke Ruan.

'¡Si Chenye!'

Pensando en esta persona, la tierna cara de Si Yuhan se volvió fría de nuevo.  Anoche, Ke Ruan le había mostrado una sonrisa muy feliz a su hermano.

Si Yuhan levantó la mano y pellizcó la nariz de Ke Ruan.  Al ver las mejillas de Ke Ruan ponerse rojas lentamente y la respiración de Ke Ruan se aceleró, soltó la nariz de Ke Ruan.  No fue realmente un castigo, sino un pequeño recordatorio.

Un día, Si Yuhan finalmente le pediría a Si Chenye que le devolviera esto.  'Si Chenye, espera y verás', pensó Si Yuhan.