294. Rebelde

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Lin Qingye y Qi Cheng fueron llamados de regreso al país de la Flama Roja por Si Chenye, pero no obedecieron la orden de Si Chenye e insistieron en quedarse en la frontera para encontrar a Si Yuhan.

Durante un tiempo, hubo otro rumor en la corte: Lin Qingye y Qi Cheng se habían rebelado.  En primer lugar, fue porque los países unidos se rindieron repentinamente, y el segundo fue porque los dos se negaron a regresar.

Usando la razón de encontrar a Si Yuhan como excusa, secretamente unieron fuerzas con otros países para rebelarse en secreto.

En la sociedad, los rumores eran conocidos y discutidos por más y más personas.  Parecía que alguien estaba manipulando en la oscuridad.  Los rumores incluso llegaron al campamento militar.

La gente del campo militar estaba furiosa.  "Los generales protegen los hogares y defienden el país, ¿cómo podrían ser calumniados así?"

Sin embargo, a Lin Qingye y Qi Cheng no les importaban estos rumores, seguían haciendo lo que deberían hacer todos los días.

Muchos edictos imperiales que los llamaron de regreso llegaron a la frontera.  Esta vez los edictos imperiales ordenaron a los demás soldados y generales de la frontera que regresaran.  Los soldados y generales se centraron originalmente en Lin Qingye y Qi Cheng, pero el significado de los edictos era claramente involucrar a sus familias.

Los edictos involucraron a demasiada gente, y los soldados y generales no tuvieron más remedio que reorganizar el ejército y regresar a la capital.

Los soldados en el campo militar se sintieron culpables, pero por el bien de sus familias, no tenían otra opción.

Todo el país estaba celebrando esta victoria, además Lin Qingye y Qi Cheng se negaron a regresar a la capital, pero el Emperador actual no los culpó, por lo que la gente fue obediente.

Lin Qingye era una existencia diferente para Flama Roja.  Incluso Si Chenye no podía castigarlo fácilmente, por lo que este asunto solo podía planearse lentamente.

Si Chenye se sentó en el trono y miró todo lo que alguna vez perteneció a Si Yuhan.  “Ahora, todos los lugares en Flama Roja son míos.  Incluso si Si Yuhan aún no está muerto, ¿y qué?  Qué podría hacer  incluso si es un dios, no hay forma de que regrese aquí y siga vivo ".

En el camino, Si Chenye ya había preparado una emboscada.  "Esta vez, definitivamente haré que Si Yuhan muera dolorosamente.

'Un hijo nacido de una mujer humilde, ¿qué grandes cosas puede hacer?  Por hoy, he maquinado durante tantos años.  Esconder mi fuerza y ​​actuar como un idiota frente a él, no puedo soportarlo más '.

"¡Guardia!"  La voz de Si Chenye era ronca.

"¡Sí!"

La luz de las velas brilló y los ojos de Si Chenye estaban oscuros y poco claros, y su mirada era venenosa y cruel, "Envía a alguien para resolver en secreto a los prisioneros traídos de vuelta por Lin Qingye y Qi Cheng".

"Si su Majestad."

Si Chenye escribió el nombre de Yu Xin en el papel con el pincel.  Como emperador, no podría importarle demasiado esas cosas nebulosas.  Tenía que admitir que, aunque Yu Xin era algo emocional, era un buen compañero.

"Bien ... Como ahora está preso, no le dará a nadie ninguna prueba".

El nombre de Yu Xin estaba muy tachado.  Si Chenye miró la tinta que se estaba extendiendo gradualmente y se burló en silencio.  "No me culpes.  Solo se te puede culpar por ser demasiado descuidado ".

'' Después de tratar con estas personas, él puede resolver a Lin Qingye y Qi Cheng, y los chivos expiatorios fueron la opción más adecuada para ellos.

La noticia sobre los presos en la celda se informó de inmediato al tribunal.  Si Chenye había sobornado a la mayoría de los funcionarios de la corte poco después de ascender al trono.

Por lo tanto, en la situación actual, podía hacer lo que quisiera.

Casualmente, todos los prisioneros fueron supervisados ​​por sus hombres.  Ahora que esto había sucedido, y no tenía noticias de su amo debido a estos prisioneros.

Venganza por su amo, qué buena razón.

[B2] Transmigré al cuerpo del villano ahora trataré bien al protagonistaWhere stories live. Discover now