We'll see [Loona]

22. Detención

La mala suerte sin duda las acechaba, estando juntas había altas probabilidades de que todo saliera mal.

Heejin y Hyunjin tenían un conejo; Choerry y Yeojin una caja llena de sapos; Yves y Chuu tenían manchas de pintura en la ropa; y hablando de ropa, la de Jungeun y Jinsoul era un desastre, la blusa de la rubia estaba rasgada y en el caso de Kim lip sólo estaba algo arrugada. Chaewon y Hyejoo parecían haber corrido un maratón y ésta última tenía una herida en el labio; Haseul tenía la cara llena del labial de otras chicas, el cabello de Vivi no estaba bien peinado cómo siempre lo era y sus manos desprendían un olor a mantequilla.

Y apenas había transcurrido la primera hora de la jornada escolar.

—No lo puedo creer. — el hombre suspiro. —Mis doce alumnas ejemplares están aquí. ¿Tienen alguna idea de cuánto las presumo a otras escuelas? ¿No? Pues si los maestros de esas otras escuelas se enteraran de esto, creerían que estoy intentando jactarme de algo que no es cierto.

»Para empezar, se suponía que todas ustedes tenían que estar en clase, no dando inicio a una tercera guerra mundial. Cuatro de ustedes convirtieron la escuela en un zoológico. Dos cometiendo faltas a la moral. La señorita Ha y la señorita Kim, siendo unas completas antisistemas decidieron "adornar" el pasillo principal de la escuela. Y las otras cuatro de ustedes, peleándose a golpes con otros estudiantes.

»Todo esto es el colmo, y si no mal recuerdo ya tenían antecedentes de mal comportamiento. Ustedes seis de su antigua escuela y ustedes seis de inicio de curso por hacerle una novatada a sus compañeras aquí presentes. Estoy realmente decepcionado, me duelen chicas, me duelen.

Dijo el director con una mano en el pecho mientras negaba con la cabeza, un gesto sin duda exagerado. Lo que hicieron no era para tanto, ¿o sí lo era?
Antes de que el director saliera de la sala de detención, las doce chicas hicieron una reverencia a modo de disculpa y expresando su "arrepentimiento", el hombre salió por fin, dejándolas solas.

Se sabe perfectamente bien que cuando las doce están juntas los problemas se vuelven sus mejores amigos, extrañamente les daba igual estar ahí y ahora que lo pensaban, admitían que había sido algo divertido lo que causaron.

¿Que, qué paso? Un caos, eso pasó. Pero para entenderlo mejor deberíamos retroceder un poco.

[🕛]

—Hola Heekki. — Hyunjin saludó a la mayor con un entusiasmo algo inusual en ella y tomó asiento a su lado.

—Hola, ¿por qué estás tan feliz?

—La primera razón es porque el simple hecho de verte me hace muy feliz y la otra es porque te traje un regalo realmente lindo. Igual que tú. — dijo y unió levemente sus labios con los de la mayor. —Ábrelo. — puso la caja de regalo con sumo cuidado sobre la mesa.

—¡Un conejo! — exclamó al abrir la caja. —Es hermoso. Pero, ¿no nos meteremos en problemas por tener un conejo en la escuela?

—Que va, nadie se va a dar cuenta. — dijo y cerró la caja para luego ponerla en el suelo. —En fin, escuché que Ryujin aclarará que ustedes no son pareja. Ya sabes, es por Yuna.

—¿En serio? Porque yo escuché que cierta persona le pidió a Ryujin que terminara con el rumor a causa de sus celos.

—Vaya que los estudiantes inventan y se creen cada cosa. — dijo desviando la mirada para no encontrarse con la de la mayor.

—Sé que fuiste tú. Hyunjin, te he dicho antes que te pones celosa por nada y sabes perfectamente que entre Ryujin y yo no hay nada.