26. Cena familiar

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Quince minutos.

Quince minutos para que Wonnie llegara junto con su familia a casa de Hyejoo. Era sorprendente como había logrado organizar una cena formal en tres horas, ir a comprarse ropa decente y comprarle a Gowon un vestido que pudiera usar esa misma noche. Aunque claro, le debía un favor muy grande a Jinsoul y a Jungeun por ayudarle a encontrarlo.
Se miró al espejo como por quinta vez, se acomodó el cabello y arregló su saco. No había desperfecto alguno, pero algo no terminaba de convencerla, los nervios tal vez.

Suspiró y nuevamente inspeccionó su apariencia.

—Estás preciosa. — la voz de su padre la sacó de su trance.

Estaba recargado en el marco de la puerta mientras se acomodaba la corbata. Hyejoo sonrió, su padre le había transmitido seguridad.

—Gracias. Pero todavía estoy algo nerviosa, bueno, muy nerviosa.

—Es normal. La amas y quieres que todo salga bien, y así será.

—Su padre y su hermano no me toleran.

—¿Qué hay de su madre?

—Me adora.

—Ya tienes puntos ganados. Tranquila, todo saldrá bien. Vamos, ya casi es la hora y tienes que recibir a tu novia.

La menor asintió. Al bajar las escaleras encontró a su madre poniendo la mesa, rápidamente la ayudó. Ya estaba todo listo. El timbre sonó, sus piernas flaquearon, pero aún así se dirigió a la puerta. Nada más abrirla perdió el aliento, Chaewon se veía hermosa con ese vestido. Chaewon se veía hermosa todo el tiempo.

Reaccionó unos segundos después, cuando escuchó como Seonghwa y el padre de Gowon carraspeaban. Saludó cortesmente y se hizo a un lado para dejar entrar a la familia de su novia.

Creyó que en cualquier momento podría desmayarse, pero al sentir los dedos de Chaewon entrelazándose con los suyos, su confianza volvió. Levantó el mentón y encaró a la familia de la rubia, era ahora o nunca.

—Bienvenidos señor y señora Park, Seonghwa. Adelante.

Seonghwa sonrió de lado. Y a decir verdad no sabía por qué, ¿era bueno o malo? El chico se acercó a ellas y mirando a Hyejoo directamente dijo:

—Pensar que no valías la pena fue un error, eres la mejor persona que mi hermana puede tener a su lado.

Eso era bueno, muy bueno. Seonghwa había sonado muy sincero, llevarse bien con el hermano de su novia era algo que en un princio le daba igual, pero con el tiempo se había vuelto importante quedar bien frente a la familia de Gowon. Porque todo iba en serio.

A decir verdad, sus familias habían congeniado tan bien que para Hyejoo era imposible de creer. Park Minyoung y Son Naeun hablaron como si se conocieran de años, Son Dongwoon y Park Jaewook parecían viejos amigos, y por último; Seonghwa había hablado con ella todo el tiempo. Le contó cómo Gowon solía llegar a casa demasiado enfadada gracias a Son Hyejoo y luego como comenzó a llegar a casa demasiado feliz por la misma razón: Son Hyejoo.

La cena iba perfectamente bien hasta que todo se tornó oscuro. Pudo sentir como Chaewon se aferraba su brazo, escondiendo su cara entre su cuello.

Genial, un apagón.

—Tranquila Wonnie, solo se fue la luz. — acarició el cabello de su novia intentando tranquilizarla.

—Los vecinos tampoco tienen luz. — el padre de Hyejoo junto con el de Gowon, ya habían salido a investigar.

El teléfono de la pelinegra comenzó a sonar, era Yves. Iba a ponerse de pie para contestar, pero Chaewon lo impidió al aferrarse más a ella. Tomó la mano de su novia y caminó con ella hasta la sala para poder contestar.

We'll see [Loona]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora