30. Fiesta

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—¿Sabes que tus padres me matarán si se enteran que te emborrachaste en la fiesta? — preguntó Choerry mientras abrazaba a Yeojin por la cintura.

—No tienen por que saber, además no me emborracharé.

—¿Entonces por qué miras con tanta devoción el alcohol? Vivi y Haseul te prohibirán beber porque eres menor.

—Tú también.

—Pero sigo siendo un año mayor que tú y puedo controlar un poco más el alcohol.

—Las cosas parecen algo injustas.

—No es injusto, Yeojinnie. — Yerim sonrió cuando la menor le rodeó el cuello con los brazos, por instinto reforzó su agarre en la cintura de la más baja.

—¿Sabes que te amo? — preguntó pegando su frente a la de la mayor.

—¿Sabes que yo te amo más?

—¿Saben que voy a vomitar de tanta dulzura que dan? — Yves llegó justo cuando la distancia entre las menores se hacía escasa.

—¿Tú que haces aquí? — Choerry preguntó intentando ocultar la molestia que le causó no haber podido besar a su novia.

—Tranquila cerezas, sólo vine por algo de beber. — dijo mientras sacaba una botella de agua de la nevera y luego se recargaba sobre la pared. —Lamento la interrupción y no es que no confíe en tí, Choerry, pero yo también tengo que vigilar que no te sobrepases con la ranita. — la apuntó con el dedo.

—¡Sólo la iba a besar! Es normal porque es mi novia, además yo no te acuso con Haseul y Vivi unnie cuando estás a nada de comerte a Jiwoo en cualquier lado.

—Eso no es cierto. — se defendió.

—¿No? ¿Segura? Porque yo recuerdo que antes de venir, tú— Sooyoung tapó su boca impidiendo que siguiera hablando y le dio una mirada de advertencia.

—No te atreverías a decirles.

—Ahora que recuerdo, yo también ví cuando—

—¡Bien! — interrumpió a Yeojin también —Ya me voy, ustedes ganan. Pero las seguiré observando después, ustedes son como familia para mí y voy a cuidar que no hagan estupideces.

Dijo y se dio la vuelta para por fin marcharse de la cocina. En cuanto ya no estuvo a la vista, Yerim pudo respirar con normalidad. Sonaba irónico, pero incluso Yves (o cualquiera) lograba ponerla nerviosa cuando se trataba de defender a Yeojin, todos querían y protegían mucho a la ranita que si le pasaba algo malo, no dudarían en saltar contra ella.

—Ahora sí, ¿en qué estábamos? — preguntó la pelimorada mientras acorralaba a Yeojin entre su cuerpo y la pared.

—En que íbamos a saborear los labios contrarios.

Y de nuevo, justo en ese momento, justo cuando estaban a casi nada de que sus labios se tocasen...

—Olvidé mi botella de agua.

—¡Yves! — ambas se quejaron y la mayor sonrió al verlas así.

—Ya, lo siento.

—La olvidaste a propósito. — Yeojin hizo berrinche.

—Sí, la verdad sí. — admitió —Pero ya me voy y esta vez no volveré a interrumpirlas, lo prometo.

Y sin más, salió de la cocina con una sonrisa por el momento que les hizo pasar a sus amigas.

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—Wonnie~ — Hyejoo la llamó. —Hay que dormir un rato.

We'll see [Loona]Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz