13. Cancelada

101K 8.9K 30.8K
                                    

ADVERTENCIA: muak

ADVERTENCIA 2: A partir de ahora los comentarios que sean de las redes de Jess van a tener una florcita rosa (como siempre tuvieron) y los que sean en las redes de Alex van a tener un corazón negro. 

JESSICA

Sentí el terror. Había olvidado por completo que el video estaba programado y por más que hubiera querido que se publicara, no esperaba que Alex lo viera delante de mí.

—¿Acabas de subir un video?

—No —mentí nerviosa—. Me hackearon.

Alex me levantó una ceja con diversión y guardó el teléfono en el bolsillo de su pantalón antes de soltarme la cintura.

—Va a ser mejor que vaya a mi casa —dijo separándose—. Si se supone que estamos peleadas, no deberían vernos juntas.

Ay, Alex, cuando veas el video no vas a tener que fingir estar molesta.

Tenía que editar esa parte. Tenía que cortarla.

—Tienes razón. Tenemos que cuidarnos. —Abrí la puerta de mi departamento y le sonreí ampliamente—. No veas el video hasta que llegues a tu casa. No quiero que te quedes sin saldo en el teléfono.

Alex me arrugó la frente, extrañada, pero no le di tiempo a responder nada. Cerré la puerta con fuerza y corrí.

Corrí por mi vida, escaleras arriba. Y ustedes no tienen idea de lo difícil que es subir tantos pisos con tacones.

Cuando llegué al departamento casi caí de cara contra el suelo. Choqué por accidente con Adrián y él me sostuvo por los brazos para enderezarme.

—Eh, ¿Estás bie...?

—¡Quítate! ¡Tengo que borrar el video!

—¿¡Estás loca!? —gritó alguien desde la sala.

Adrián y yo miramos a Noah, parada sobre uno de los sofás de la sala. En una de sus manos sostenía el control remoto mientras en la pantalla del televisor se reproducía un video de Dross sobre comerciales perturbadores.

—No tengo tiempo para esto —dije.

Esquivé a Adrián para ir hacia mi cuarto.

—¡No puedes hacer eso!

Noah bajó del sofá y se puso entre la puerta y yo. Mis instintos me dijeron que la jale del pelo para quitarla, pero me contuve.

Mentira, no me contuve.

—¡Muévete!

La empujé como un muñeco de los Sims y ella se aferró a mi brazo.

—¿Crees que nadie va a grabar el video? ¿Crees que porque lo borres o edites no le va a llegar el original a Alex?

Me detuve por un segundo, pero luego retomé el forcejeo.

—Igual tengo que borrarlo.

Abrí la puerta de mi cuarto, pero era difícil avanzar con Noah colgada de mi brazo.

—¿¡Tienes idea de todo el dinero que estarás tirando a la basura!?

Me dolía. Me dolía en el alma desperdiciar una oportunidad así, pero no podía quedarme sin hacer nada.

—Es estúpido, no tiene lógica —continuó Noah—. Si Alex lo verá de todos modos, pierdes más borrándolo que dejándolo ¿Vas a poner una tanga por encima de tu canal?

—Alex no es una tanga. Es mi amiga —Chasqueé la lengua—. Olvídalo, lo voy a borrar desde aquí.

Saqué mi teléfono y lo desbloqué. Me dispuse a entrar a mi canal de youtube, pero una notificación push apareció en mi pantalla.

Ella sabe que la odio | YA A LA VENTADonde viven las historias. Descúbrelo ahora