Capítulo 52. En la madrugada

102 11 17
                                    

Austin no dijo nada, frunció el ceño y siguió pintando. Pero Lester sabía por lo que estaba pasando el joven rubio, él también había tenido sus dudas cuando empezó a salir con Penny.

•••

Andrew había llegado al puerto media hora antes de lo previsto, se sentó en un banco bajo una palmera a esperar a Ally. El verano había llegado antes de tiempo ese año y hacía tanto calor que podrías freír un huevo sobre el asfalto.

El británico estaba sudando más de lo que creía posible, en Birmingham nunca había hecho esa temperatura. Un vendedor ambulante de refrescos se acercó a él y aunque la tentación de una bebida helada era enorme tenía el dinero justo para invitar a su amiga a un helado así que tuvo que decir que no.

Sacó el móvil para intentar no pensar en el sol que caía implacable sobre él y empezó a mirar las redes sociales.

Suspiró exasperado, las publicaciones que estaba leyendo le daban igual y cuando estaba apunto de guardar el teléfono un mensaje de un número desconocido apareció en medio de la pantalla.

«¿Quieres ganar más dinero? H.B.»

Tras leerlo un par de veces Andrew miró el mensaje extrañado, no había ninguna posibilidad de que eso fuera dirigido a él.

«Lo siento, debe haberse equivocado de número»

La respuesta llegó en unos instantes e hizo que al chico se le parase el corazón durante unos segundos.

«Seguro que puedes darme información jugosa sobre Austin y Ally. H.B.»

Era él, no había duda, el paparazzi que se la había jugado en las vegas. ¿Cómo se llamaba? Era algo como Herbert Branson... Herbert Brendan... Tras una rápida búsqueda en Internet lo encontró, Herbert Bernson, un famoso fotógrafo que trabajaba por cuenta propia y vendía sus fotos al mejor postor.

«Pensaba que no trabajabas con traidores»

«Lo siento chico, tenía que ver cómo funcionaba tu información.
Esta vez si te pagaré»

«No, paso de esta mierda, piérdete»

Andrew se guardó el móvil en el bolsillo pero este no dejaba de vibrar. Por mucho que lo intentase era imposible ignorarlo. Echó un vistazo a las últimas notificaciones y menos mal que estaba sentado porque si no se hubiese caído de culo.

«Venga no te pongas así.
Estoy seco macho, necesito algo bueno.
Seguro que tú sabes algo.
¿Acaso quieres un adelanto?
Esto es para que veas que voy en serio»

Tenía otra notificación, esta vez del banco «Ingreso de 500$ por H. Bernson».

Vaya, eso era mucho más de lo que le había prometido la última vez. Pulsó el icono de la aplicación para intentar devolver el dinero pero cuando vió el balance de su cuenta tuvo que tragar saliva. Tenía exactamente 518 dólares, eso incluyendo el dinero del paparazzi.

No recordaba que ese mismo día le pasaban la factura del alquiler del piso y aún tenía que pagar el internet, que iba aparte. Mientras pensaba que iba a hacer llegó otro mensaje de Herbert.

«Ahora no te puedes negar»

Andrew suspiró intentando calmarse, pero sus dedos temblaban tanto que no podía escribir una respuesta.

—¿Estás bien?

La voz de su amiga le sobresaltó tanto que casi se le cae el teléfono de las manos.

—Sí, solo estaba leyendo una historia de miedo— dijo rápidamente.

—¿Vamos?— preguntó Ally con una sonrisa a la que no se podía negar.

When Future Becomes Past.On viuen les histories. Descobreix ara