Soonie, Doongie, Dori

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Los niños llevaban cinco días que habían llegado a la casa Bang, tanto Roseanne como Chan se estaban adaptando bastante bien hasta los momentos aunque lo difícil vendría después, en un par de días cuando todos empezarán a asistir al colegio.

Bueno excepto el pequeño Jeongin que aún no tenía edad pero, ¿qué tan difícil sería entretener a un pequeño de dos años que sólo era tiernas risitas?.

—¿Por qué están todos así?.–Susurro Chan a Roseanne que estaba apoyada en el marcó de la puerta que daba hacia el patio. Rosie estaba viendo a los niños que desanimadamente jugaba con ls pelota.

–Creo que están aburridos.

–Pues que vean una película.

–Ya vimos Grandes héroes.

–Ah... ¿Qué tan caro es comprar juguete para siete?.–Roseanne miró con incredulidad a Chan.

–Cariño, no podemos comprar media jugueteria, además cuando retire sus expedientes escolares me darán los juguetes y sus útiles .–Chan chaqueo la lengua, la piscina le habían hecho mantenimiento el día anterior así que debían esperar cuarenta y ocho horas para poder utilizarla por lo que estaba descartada y en casa no habían juguetes más que esa pelota.

¿Qué rayos les gusta hacer a los niños de cinco años?.

–¿Y si vamos al parque?, hay un lugar que tiene juegos para niños, ¿no?, columpios y cosas así.

–¿la hay?.

–Si, pero nunca pasamos por esa zona porque no tenemos niños.

–¿O por qué nos quedamos comiendo helados en el trayecto?.

–Un poco de ambas.–Admitió Chan y Roseanne rió –.Voy a ducharme y los llevamos.–Cris le dio un besito a Rosie en la mejilla y subió a su habitación, pues el venía del gimnasio.

–Niños.–El llamado de Roseanne llamó la atención de todos–. Vengan, vamos a prepararlos para ir al parque.

–¡Sii!.–Gritaron todos al unísono y entraron corriendo.

El orfanato le había proporcionado a Roseanne una van para que pudiera trasladar a los niños al colegio en un par de semanas cuando sus clases empezaran, así que no sería problema llevarlos.

La verdad no había mucho que preparar en ellos, solo era cosa de colocarles los zapatos y Roseanne agradecía haber tomado un grupo de niños y no de niñas, pues creía que seria más complicado el trabajo.

–Vamos abajo, veamos que podemos llevar de merienda.–Le hablo al pequeño Jeongin luego de atarle los cordones, el nene asintió y ella lo cargo en brazos.

–¡¿Jisung tienes mi gorra?!.–Se escuchó el grito de Changbin desde su habitación al final del pasillo.

–¡Esta abajo en el sofá!.–Respondio el mencionado desde el baño, Rosie negó y el pequeño en sus brazos imitó su acción.

–Por lo menos tu no haces tanto ruido.–Innie sonrió y era verdad, Jeongin no decía más que un par de palabras y soltaba risitas.

Los niños afirmaban que Jeongin sabía hablar, contrario a lo que ella creía, pero la verdad era que ella solo lo había escuchado decir "agua, baño, sueño, hambre" y ya. Cualquier pregunta solo agitaba para negar o asentir.

Cómo ahora.

–¿Galletas de mantequilla?.–Mostró el empaque al niño que enseguida asintió con ánimo.–Estas mismas serán, uhm...–Abrió la nevera y busco los empaques de jugo (exagerados) que Chan había comprado– ¿jugo o leche chocolatada?.–Obviamente al no recibir más respuesta que una risa tuvo que voltear a ver, Chan le estaba haciendo cosquillas al pequeño sobre la mesada y este no paraba de reírse y retorcerse.

Dad Chan ↣ Stray KidsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora