Capítulo 1

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Recordad que esta es la versión antigua, la nueva esta disponible completa en mi perfil.

Cerré los ojos recostándome en la silla, me encontraba realmente agotada, estaba siendo un día ajetreado, toda la mañana había tenido que asistir a varias reuniones, algunas fuera de la oficina, todas acompañando a mi jefe, Fabrizio Benedetti, a sus 28 años era el actual dueño del mayor banco de inversiones del mundo, el cual generaba muchísimo dinero, también se hacía cargo de una cadena hotelera bastante famosa.

Él era un hombre bastante alto, de ojos grises penetrantes, cabello negro, siempre solía llevar una barba de pocos días la cual siempre se veía cuidada, labios carnosos, nariz perfilada, un cuerpo muy bien trabajado. Sin lugar a duda era un hombre muy atractivo, las revistas del corazón lo catalogaban como el "soltero de oro", era muy codiciado por muchas mujeres, pero él casi siempre las ignoraba, eso daba hincapié a que circularan muchos rumores acerca de su sexualidad o vida amorosa, también solía salir en la revista Forbes, en la lista de los empresarios más ricos.

Pero todo lo atractivo que tenía se iba por el retrete con su carácter tan podrido, prácticamente siempre estaba de mal humor, era un hombre frío, cruel, arrogante, si tenía la oportunidad de aplastarte como a una cucaracha con tal de conseguir su objetivo, lo haría sin que le temblara el pulso, tenía grandes influencias, era el tipo de hombre con el que no quisieras tener problemas jamás.

Todos sus empleados le temíamos, trabajar para él era someterse a mucha presión, tenía que salir todo absolutamente perfecto, de lo contrario te ganarías tu primer Strike, él solo te permitía tener 3 errores, al siguiente estabas despedido y no había disculpas que valieran, por desgracia para mí, llevaba dos, todos los días temía el tercer y último.

El primero me lo gané a las dos semanas de trabajar para él, tropecé con la alfombra de su despacho haciendo que la taza de café que llevaba en mano, se derramara sobre él y unos documentos.

Ese día me gritó tantas cosas y ni una bonita, en silencio lo soporté todo hasta que decidió echarme de su despacho, lloré en el servicio llena de rabia e impotencia, jamás me habían tratado como él lo había hecho.

Pasó un año en el que me esforcé para no cometer ningún error, lo logré, pero muy a mi pesar me gané el segundo strike, por culpa de una novia que tenía en aquel entonces.

Flash-Back

Esperaba a Dianora Fusco, la novia de turno de mi tan adorado jefe, el resonar de unos zapatos de tacón me hizo mirar hacia el pasillo, la vi aparecer por este, era alta, piel clara, cabello rubio teñido hasta la mitad de la espalda, de ojos marrones, sin lugar a duda era bonita, pero tenía tatuada en su rostro una expresión de arrogancia, de desdén.

– Buenos días, señorita Fusco–saludé con una sonrisa cuando llegó a mi altura– El señor ahora está reunido, tome asiento por favor–señalé los sillones individuales color crema, ella me miró de arriba abajo como si no valiera nada, sonrió con arrogancia pasando a mi lado, rápidamente la agarré de la muñeca– Por favor no pu–

– Suéltame estúpida–se soltó de mi agarré de forma brusca– ¿Quién te crees que eres para tocarme?–preguntó mirándome con cierto asco, respiré hondo mordiéndome la lengua para no soltar alguna cosa indebida

– Lo siento, pero de verdad no puede pasar–dije mirándola con súplica, ella sonrió de lado se acercó a mí de forma amenazante

– Tú no eres nadie, para decirme dónde puedo o no pasar–quise decir algo, pero me silencio haciendo un gesto con la mano, giró sobre sus tacones retomando su camino, antes de que pudiera volver a detenerla, entró– Oh, lo siento mucho, no sabía que estabas reunido, tu secretaria no me dijo nada–dijo con falsa inocencia, miré a mi jefe el cual me miraba furioso, con aquellos ojos grises que parecían una tormenta, quise decir algo, pero simplemente no salió ningún sonido de mi garganta

Entre tus Manos [Versión antigua]Where stories live. Discover now