CAPÍTULO 1

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La respiración de Melissa comenzaba a entrecortarse mientras la mirada de Tacher se oscurecía. Así pasaron algunos segundos en donde ninguno de los dos dijo nada, y Tacher sabiendo lo que tenía que hacer, se acercó ese paso que faltaba y al estar casi pegado a ella la miró a los ojos e inmediatamente su cuerpo reaccionó y sus pupilas se dilataron. Dando un suspiro que a Melissa le llegó al alma, pasó por su lado y sin pronunciar palabra se adentró al pasillo y bajó las escaleras.

El corazón de Melissa se quería salir del pecho mientras su respiración se agitaba cada vez más y las lágrimas comenzaban a salir de sus ojos. Siempre había querido estar lejos de su pasado y ahora le estaba cayendo todo como un balde de agua fría. Por eso no quería volver a ese lugar, por eso tenía reglas, pero por culpa de Tacher, no solo había permitido que este entrara en su vida más de la cuenta, sino que lo había traído hasta su casa, lo había juntado con su pasado y había hecho que su vida colapsara.

¿Por qué fue tan estúpida?

Con ganas de salir de ese lugar y alejarse de todo y de todos, Melissa entró a su habitación para buscar sus cosas, pero un escalofrío recorrió su cuerpo, hacía muchos años que había salido de ese lugar y aunque ella cambió, su habitación estaba demasiado igual. Solo podía mirar el lugar y sentir como si el tiempo no hubiera pasado, como si acabara de entrar a ese cuarto después de lo sucedido.

***

< Los nervios se apoderaban de ella mientras miraba el ecógrafo.

― Felicitaciones. Será un barón y todo está perfecto, ya tienes cuatro meses y debes hacerte estos exámenes, no puedes faltar más a los controles.

Melissa volteó la mirada hacia el médico.

― ¿Cuántos meses dijo?

Cuatro.

Esta asintió, pero no dijo nada, apenas le había faltado el periodo hace un mes y ella creía que era por los nervios de la boda, pero si el médico lo decía, seguro eran cuatro. Su periodo no siempre fue el más puntual por el estrés, o porque Simón le hacía tomar la pastilla de emergencia o cualquier otra cosa, lo que hacía que su ciclo menstrual se le volvía un caos total. Eso sí, cuando el médico se enteró de que tomaba la pastilla de emergencia con regularidad, le dio tal regaño que casi se pone a llorar ahí mismo.

― Tranquilo doctor, no volveré a tomarlas de esa manera.

Luego de salir de la consulta, se dirigió a la casa de sus padres mientras limpiaba sus lágrimas; la felicidad no le cabía en el cuerpo. Iba a casarse e iba a tener un hijo del hombre que más amaba, con el hombre que estaba cambiando por ella.

Después de tres años de relación, Simón le había pedido matrimonio una tarde de junio, luego de celebrar su cumpleaños con los padres de este. A Melissa le sorprendió la propuesta, ya que su relación no estaba pasando por un buen momento, y bueno, no era que no pensara en casarse, solo que jamás pensó que Simón se lo propondría, veía lejos esa posibilidad, pero ahora estaba a pocos días.

Luego de llegar a la casa de sus padres y contarles lo sucedido, todos gritaron de felicidad por su embarazo. Hace un año que Melissa vivía con Simón y sus padres ya querían verla realizada y feliz. Lo único malo, era que ese mismo año, le había tocado a Melissa salirse de la academia de Ballet y dejar las motos a un lado, de pronto a Simón ya no le parecía bien todo eso que ella hacía y fue una de las condiciones para seguir juntos y mejorar la relación, que sin duda comenzó a cambiar notablemente después de que ella hizo lo que este le pedía.

Después de almorzar y llamar a Luna, esta fue corriendo a donde ella estaba y metiéndose al cuarto de Melissa, que aún estaba intacto para cuando quisiera dormir en casa de sus padres, le dio la noticia. Iba a ser tía.

POR PRIMERA Y ULTIMA VEZ [COMPLETO] LIBRO 2Where stories live. Discover now