CAPÍTULO 13

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Los días pasaron y cuando Vic estuvo mejor del pie y el día antes de que Fanny volviera a la academia, ya que, al sentirse culpable por lo sucedido, quiso ayudar a Soledad con los cuidados de Vic, Melissa no quería dejar pasar la oportunidad, así que las cuatro salieron juntas a pasarla bien. Soledad no podía faltar.

Melissa miraba a las niñas arreglarse, las mañanas ya no eran tan caóticas ahora que Vic estaba con Fanny, entre las dos se complementaban y ya no le daba tanto trabajo.

Ella no sabía cómo iban a estar una sin la otra.

― Mami, ¿podemos meternos a la playa ya? ―Preguntó Vic apenas se bajó del carro.

― Cariño, es muy temprano, primero vamos a desayunar, te pondré bloqueador y ya después entras.

Las niñas estaban acomodando las cosas en el rancho a la orilla de la playa que habían elegido, mientras Melissa guindaba una hamaca y Soledad ayudaba con las demás cosas.

― Mamá, mira que tengo días encerrada y me he portado muy bien, ándale, señora hermosa, mamá linda de mi vida entera, déjame entrar ya, porfis.

La niña se le tiró encima y llenándola de besos la convenció. Melissa asintió con la cabeza cuando ya no pudo resistirse a esos ojos del gato de Shrek, que su hija le ponía a veces.

― Está bien Victoria, tú ganas, pero solo un rato y por favor, Fanny irá contigo y solo en la orilla.

― Claro mamá, yo siempre gano, porque soy Victoria la triunfadora ―respondió mientras corría por su traje de baño junto a Fanny.

Esta niña y sus cosas locas ―pensó, negando con la cabeza, y aunque habían pasado varios días, no podía olvidar eso que Vic le dijo en la clínica, aÚn sentía las palabras de su hija marcadas en el alma. —¿Tan mala madre era?

A veces le tocaba fingir que todo estaba bien para no llorar.

Antes de seguir sumergida en sus pensamientos, la niña llegó corriendo con el vestido de baño en la mano y le dijo:

― Mami, que Fanny tiene miedo de meterse al mar, que nunca ha entrado, así que dice que mejor no.

Melissa arregló a la niña y después de aplicarle bloqueador solar, hizo lo mismo con Fanny.

― Tranquila, ya verás como será divertido, pero tú entrarás conmigo, deja que primero Vic se vaya con Soledad.

Ese par no perdían el tiempo y de inmediato se fueron al agua.

Parecía que nunca hubieran ido a la playa―pensaba Melissa al verlas correr.

Después que terminó de arreglar algunas cosas y de encargar los almuerzos, llamó a Max para confirmarle el suyo, ya este llegaría en unos 10 minutos. Luego de eso, tomó a Fanny de la mano y estas entraron juntas al mar. En cuestión de minutos a Fanny se le olvidó lo que era tener miedo, y más cuando se vino una lluvia de agua salada patrocinada por Vic y Max que acababa de llegar con una amiga. La Felicidad era completa, estaban todos felices como un pez en el agua.

Un rato después, esta salió de la playa y acostándose en la hamaca, decidió leer un poco de un libro que le regaló Max, ella no era mucho de lecturas, pero después de todo lo que había pasado en su vida se dio cuenta de que leyendo los libros que Max le había recomendado, podía alejarse de su vida misma, una de la que a veces pedía una escapatoria, una que los libros le daban.

Además de los truquitos sexuales ― pensó con ironía. Solo fue mostrárselos al grupo de las poderosas para que de inmediato se dispusieran a leer todos los libros eróticos que encontraran.

POR PRIMERA Y ULTIMA VEZ [COMPLETO] LIBRO 2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora