Capitulo 32: Aquí Hay Gato Encerrado.

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ELENA




— Nada — dijo Harry incómodo, Jacob me quitó la vista jugando con Nathaniel — Creo que Diana se hizo — la levantó oliéndola — Uff si huele mal — Diana se puso a reír, se levantó del suelo con ella — Me voy a cambiarla adiós— Jacob lo miró enojado con ganas de asesinarlo.

— ¿Tú me dirás? — Jacob me miró tragando saliva.

— Creo que este bebé también se hizo — lo miré enojada, Jacob se levantó del suelo con Nathaniel.

— Es hora de almorzar, después tenemos fotos — dijo Andrew acercándose. Jacob le asintió tomando ese salvavidas entrando a la casa, levanté mis cejas indignada. Vi a Mia caminando sola, así que me acerqué corriendo tomándola de la mano, se asustó cuando me acerqué.

— No hagas eso, sabes que me asusto por todo — se quejó llevándose una mano al pecho.

— Tú me dirás — le dije apuntándola y me miró confundida.

— ¿Te dire qué?

— Harry acaba de decir que Jacob prácticamente me pediría matrimonio y que luego regresó con rosas y chocolates, pero que no era su culpa — abrió sus ojos enormes — Mia tú lo sabes — me quejé indignada.

— Lo del matrimonio solo era una broma — levanté una ceja y sonrió incómoda — Mira fue para tu cumpleaños, a esa fiesta que fuimos todos, yo te lo conté — asentí — Vale, Jacob tenía planeado al otro día entregarte un regalo muy hermoso, romántico y tierno — dijo demasiado feliz y sonreí — Pero dijo que te fuiste, que ni siquiera abriste el regalo — se me vino a la mente enseguida ese día. Cuando desperté por segunda vez me fui, había un pastel y una caja de regalo sobre la isla de la cocina.

— Pero me fui porque él no hablaba — dije navegando en los recuerdos de ese día.

— Dijo que cuando despertó no estabas y que luego él te tuvo que retener — recordé mi colgante y él enojado ya duchado cuando regresé — Y que ahí ya entendió que por algo tú te ibas, así que solo te dejo marchar por segunda vez y no te entregó el regalo.

— ¿Y qué había dentro de ese regalo? — Mia levantó sus hombros y sus manos.

— Lo único que recuerdo es que molestaban a Jacob por la frase, por eso Harry dice que te quería pedir matrimonio, no era eso, pero creo que era algo romántico no lo sé muy bien — me quedé pensativa — Ese día Harry dijo todo el día que Jacob se casaría — me puse triste — Vamos, entremos a comer, no es bueno recordar el pasado Elena — le asentí caminando en dirección a la entrada de la terraza.

— Un momento y lo otro — Mia se puso nerviosa enseguida.

— ¿Qué otro?

— No sabes mentir.

— Sabes que Harry llega y habla — dijo haciéndose la desentendida, me puse a reír, realmente Mia no puede mentir.

— Harry llega y habla, pero jamás miente — me achinó los ojos porque sabe que tengo razón.

— Lo siento, pero lo otro ... es un tema que de verdad no me corresponde a mi decírtelo — dijo triste, asentí.

— Gracias — asintió feliz y nos pusimos a caminar al salón a comer en esa mesa enorme. Jacob estaba mirándome algo preocupado.

— ¿Te sentaras a mi lado? — preguntó nervioso acercándose a mi.

— ¿Por qué? — pregunté mirándolo fijo.

— Porque estás enojada y cuando te enojas no me quieres cerca — levanté mis cejas, me siento culpable de no abrir ese regalo ese día, me arrepiento, a pesar de que aún me falta saber sobre "Lo otro"

Mi Maldito TormentoWhere stories live. Discover now