Capítulo 6

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—Tu nueva amiga no me agrada mucho. —expresé serio.

—Ni siquiera has hablado con ella unos diez minutos. —indicó Sebastian que andaba en su teléfono muy concentrado— Sé que no te agrada solo porque a Lauren no le cae bien.

Suspiré y le di una pequeña mirada al cielo templado que se contemplaba desde la ventana.

—En parte tienes razón. ¿Sabes?, te quiero hermanito.

Él me miró asombrado y abrió sus ojos analizándome de pies a cabeza con una mirada rara.

—¿A qué viene ese comentario? ¿Te vas a morir?

Negué forzando una sonrisa.

—Solo estuve pensando lo afortunado que soy de que estés conmigo.

—¿Qué bicho te pico? —inquirió dejando su teléfono de lado— ¿Estás enamorado o algo así? Ni siquiera drogado te ponías a decir eso que dijiste.

Me encogí de hombros y me puse un cigarro en la boca pero Sebastian me lo quitó y lo lanzó al piso para luego aplastarlo con su pie.

—Deberías decirme que te inquieta, pero está bien si no es ahora, toma tu tiempo Esteban. No recurras a los vicios, quiero que me dures muchos años más hermano.

Le sonreí con sinceridad como no lo hacía con nadie más y me acosté boca arriba en el sofá-cama.

—Invita a tu amiga a venir, le daré los diez minutos.

Él volvió la vista a su teléfono sonriendo.

—Yo también te quiero hermano.

...

—¿Qué miras tanto?

Sebastian dio un brinco al oír mi voz y apago rápidamente su teléfono con vergüenza.

—¿Quién era esa chica?

—Nadie que conozcas. —respondió apenado.

—Pero te pareció bonita. —aseguré codenadole— Ve a por ella.

Mi hermano soltó una rísita nerviosa.

—Ni siquiera sé si es mi tipo.

—¿Cuál es tu tipo de chica? —indagué curioso.

—Alguien comprensiva. —enunció pensativo.

—¿Comprensiva? —inquirí incrédulo— Que mal gusto tienes.

Él frunció su rostro y pareció que iba a decir algo pero se levantó al sonar el timbre.

Me senté en un mueble y me quedé esperando hasta que lo vi regresar acompañado de su amiguita.

—Dicen por ahí que querías verme. —comentó Amapola.

—Solo por mi hermano. —indiqué serio— Siéntate y hablemos.

Ella se acomodó en una silla cercana a la mía y le hizo un gesto a mi hermano de que se fuera. Sebastian parecía poco convencido pero se metió en su habitación.

Amapola y yo nos miramos fijamente, yo con expresión seria y ella con una divertida.

—¿Qué pasa galán? ¿Aburrido?

—No te interesa. ¿O es que me estás insinuando algo?

Ella fingió reír.

—¿Me crees tan fácil? No soy las demás Esteban.

—Se nota. —aseguré desinteresado— ¿Cómo piensas ganar mi confianza? Seguimos en el mismo punto.

—Nunca dije que quisiera tu confianza. —respondió seria.

Amapola se levantó y luego camino tranquilamente a la habitación de Sebastian.

Al instante aproveché que estaba solo y mi hermano no había llevado su teléfono para cogerlo. Al encenderlo encontré la foto de una chica con un violín, era linda pero se notaba inocente. No quería que mi hermano se enamorará y tuviera un corazón roto tan jóven así que silencie las notificaciones del perfil de aquella chica y volví a poner el teléfono en su lugar.


N/a
¿Se imaginan a Sebastian jovencito? Ya le gustaban las chicas comprensivas y estaba viendo la foto de una chica con violín. ¿No les recuerda a alguien? 😏🥰🥺.

A quienes son nuevos lectores les invitó a leer "Disculpa", en ese libro está la historia de Sebastian. En realidad no sabia cuál aconsejar para leer primero, pero es mejor iniciar con este libro hasta que lleguen al capítulo 20 y luego antes del 21 comenzar el de Sebastian.

Eso es todo, gracias por leer.

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