Sadie
— Dejame entender...una fiesta en tu casa — Finn afirmaba emocionado — ¿Por qué? Que yo sepa no es tu cumpleaños...
— Mis papás saldrán de viaje y tengo que aprovechar que tengo la casa para mi solo. — Se justificó
— Eso no tiene nada que ver, los míos también se fueron y no estoy haciendo una fiesta.
Puso los ojos en blanco — Pero es que tú eres... — me miró de pies a cabeza con los ojos abiertos como platos — tú.
Fruncí el ceño
— Además de que están tus hermanos, eres la única mujer a la cual deben cuidar. En cambio yo no tengo problema — sonrió.
— Tienes una hermano también. — trataba de recordarle porque al parecer también se le había olvidado.
— Pero con el nunca hay problema, lo puedo hacer que se una a la fiesta o sobornarlo con algo, Sadie, es lo de menos...por favor dime qué si me vas a ayudar en esto — suplicaba.
Di una gran suspiro — Okay, si.
Finn salto a abrazarme mientras yo no hice ningún movimiento — Si, si, ya suéltame. — De inmediato me soltó.
Al parecer esto de ser mejor amiga de Finn está saliendo muy caro, al punto en el que debo mentirle a mis segundos padres por ayudarlo.
Ambos estábamos saliendo de mi casa para ir a la de el. Llevaba su patineta en la cual obviamente había llegado a mi casa y por alguna extraña razón llevaba otra.
— Vamos — hablo sin ninguna preocupación. No tardó en darse cuenta de que estaba pasando — Oh... ¿Aún no piensan intentarlo?Negué con la cabeza mientras retrocedía por miedo — No...tengo miedo de llegar a morir en el intento — mi tono de voz comenzó a cambiar.
— Tranquila, si no quiere no te voy a obligar, podemos ir caminando y así despejas tu mente y todo eso, a ti te gusta — intento remediar el pequeño comentario hizo.
— Si, está bien... — comencé a caminar con los brazos cruzados mientras Finn se acercaba a mi y me abrazaba una vez más.
— No voy a dejar que nadie te dañe...mucho menos yo, y perdón por lo que intente hacer — sonaba muy sincero, hasta era raro escucharlo así.
— No te preocupes, no tienes la culpa de nada... — ambos nos miramos y solamente sonreímos, puede que algunas actividades no las pueda hacer por prevención a mi enfermedad, pero eso jamás me va a alejar de mi mejor amigo, y menos si se trata de Finn, es difícil deshacerme de él.
Continuamos caminando hasta que llegamos a su casa y de un momento a otro estábamos sentados en el sofá de su casa con sus padres a los cuales teníamos de frente con una mirada intimidante, pero no hacía mi, sino a su hijo, hasta ellos saben a dónde va todo esto.(...)
— Entonces...lo que quieres es que te autoricemos hacer una reunión aquí en la casa mientras nos vamos el fin de semana — trataba de comprender todo el papá de Finn a lo que dijo su hijo.
Esté asentía con la cabeza mientras sus nervios se notaban. — Si, así es.
— Y tu estarás presente en esta reunión, ¿cierto, Sadie? — ahora su mamá se dirigía hacía mi.
— Si, así es — le lanzaba una mirada de odio a Finn.
Maldita sea, se siente tan mal mentirle a estás buenas personas.
— Solamente serán dos o tres amigos, nada grande — explicó Finn.
Sus padres solamente se miraron uno al otro, al parecer los habíamos convencido, sus miradas decían mucho, era evidente que si lo harían.
— Está bien, tienes el permiso — respondió su padre. — Pero no quiero desastres ni nada de eso, ¿entendiste?
— Si, por supuesto.
— Okay, confiamos en ti — estrecharon sus manos.
— y ¿tus padres ya te dieron permiso, Sadie? — preguntaba su mamá.
— Aún no sé los había comentado porque como sabrán ellos están de viaje, pero en un momento les haré llamada para que estén enterados de todo — Expliqué.
— Bueno, ojalá y cumplas tu palabra, hijo — comento por última vez su papá.
El solamente decía que si y ya.Después de ese momento tan incómodo quedamos solamente el y yo, nuevamente salto a abrazarme.
— ¡Gracias!, ¡gracias!, ¡gracias! — me cargo en ese supuesto abrazo — Sabía que contigo a mi lado los podía convencer.
— Me siento utilizada — bromeé — pero me debes una.
— Si — decís en tono de aburrido — ahora la siguiente misión.
Eche mi cabeza hacia atrás — Ahora ¿cuál?
— Ir por las cosas y avisarle a Noah...a Louis obviamente — interrumpí
— ¿De cuando acá tu y mi compañero de trabajo se llevan bien?
— Es normal...tenemos que hablarnos de los por menores contigo — se encogió de hombros. — También debemos limpiar la piscina y la casa — continuaba con su lista de actividades.
— Bien, suerte con eso — caminaba hacia la salida, pero el me detuvo.
— ¿A dónde vas?
— Usted jovencito, solamente me pidió pedirle o más bien...mentirle a sus padres, más no ayudarle a hacer su fiesta — abrí la puerta de su casa para salir — Así que... ojalá te vaya bien en eso.
— ¿En verdad me vas a hacer esto?
— Si, tengo cosas más importantes que hacer. — empecé a caminar hacia la calle.
Finn solamente recargo en la puerta de su casa — Como seguir babeando por el chico de Instagram...de la cafetería...¿o de la biblioteca? Da igual, es el mismo.
Entrecerré los ojos mientras le hacía gestos a el — Sabes que...mejor ya cállate.
— Cómo diga, señorita Sink — se dió la vuelta y cerró su puerta, yo continue caminando, el en verdad es un sonso.
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And I Met You
RomanceUn chico que se muda a Seattle junto con su padre para pasar tiempo juntos, ya que no tenían antes la oportunidad de hacerlo. Henry solamente quiere pasar el verano por allá, pero pueden cambiar sus planes al conocer a una chica pelirroja.