Capítulo 7

570 65 56
                                    

Como había dicho, aquí está lo que tanto han esperado. Recuerden dejar hermosos votos y comentarios.

Seguirme en instagram donde subo adelantos: Rocio160315

Cuando me repongo por completo es que puedo volver a la sala a enfrentar que a quien creí ser una vez el chico de mis sueños, es en realidad quien hace que Abi se sintiera todos estos años con el derecho de perturbar mi paz, con el derecho de hace...

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Cuando me repongo por completo es que puedo volver a la sala a enfrentar que a quien creí ser una vez el chico de mis sueños, es en realidad quien hace que Abi se sintiera todos estos años con el derecho de perturbar mi paz, con el derecho de hacerme daño.

Bankotsu.

Su nombre se repite como si fuese un chiste cruel en mi mente, porque todavía puedo recordar cuando lo conocí, lo mucho que me gustó, el tiempo que duramos juntos, las risas y conversaciones, todo eso resumido a un montón de mentiras porque nada fue real.

Me doy cuenta de que la mitad de mi vida la viví en una completa mentira de la que ahora es que estoy escapando. Todos mis recuerdos sobre Bankotsu todo este tiempo, un maldito engaño. Dormí con quien era el amante de mi verdugo en el pasado, estuve abrazando, añorando y besando a ese jodido infeliz.

Mi tío me observa en absoluto silencio cuando vuelvo a la sala acompañada de Inuyasha quien sigue sosteniendo mi mano. Me trago el nudo que siento en la garganta y las ganas de volver a vomitar porque simplemente esta situación me asquea tanto.

Papá parece preocupado y solo suspiro tomando asiento. Trato de ordenar mis ideas, trato de no pensar en que todo esto cada vez que pienso que no puede sorprenderme más, lo hace.

—Quiero saber todo—es lo único que digo. Mi tío se queda en silencio y suspira con pesadez. Los ojos de Bankotsu persigue mis pensamientos ahora mismo, su maldita risa o cada momento que compartí con él.

—Hace treinta años que conocí a su padre, fuimos buenos amigos y éramos aliados, ambos nos respetábamos y teníamos negocios juntos, su padre fue un buen hombre dentro del mundo en el que vivimos. Tenía palabra, tenía carácter y, sobre todo, amaba con locura a su familia—él suspira.

>> Cuando su hijo tenía 5 años fue cuando lo vi por primera vez, era un niño curioso, pero algo volátil, su padre siempre mantuvo un ojo sobre él, nunca lo dejaba actuar a la ligera porque la mente de ese niño era muy curiosa, demasiado, a decir verdad.

>> Cuando Bankotsu cumplió los 19 años fue cuando lo vi por segunda vez, todo un hombre que manejaba muchos de los negocios de su padre quien ya tenía una enfermedad algo avanzada, pero lo manteníamos en secreto porque nadie debía descubrir que él estaba muriendo. Dos años después mi amigo murió y su hijo tomó posesión de todo.

>> Él realmente se llama Bankotsu, aunque ese detalle solo unos pocos lo sabemos ya que su padre y todos sus familiares siempre lo conocieron como Camaleón, aquel que puede estar a tu lado sin darte cuenta de quién es en realidad.

>> Luego de la muerte de su padre, su hijo tomó el negocio, pero a diferencia de su padre, él no tenía palabra, moral o algo de respecto. Me declaró la guerra y la única razón por la que no lo envié directo al infierno fue porque su padre fue un hombre tan maravilloso que de solo pensarlo sufriendo por ese hijo que tanto amó hace que mi pecho se contraiga—mi tío hace silencio y comienza a mover los anillos que tiene en sus dedos. Un suspiro lastimero se escapa de sus labios.

Travieso AmorWhere stories live. Discover now