Capítulo 12

677 65 105
                                    

Así que con este capítulo completamos la triple actualización. Espero que lo hayan disfrutado mucho, como siempre, los estaré leyendo en los comentarios. 

¡Voten y comenten mucho! Merezco eso luego de estos 3 caps que les di.

¡Voten y comenten mucho! Merezco eso luego de estos 3 caps que les di

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Inuyasha

Kagome me ha tenido observándola desde hace días con curiosidad, porque sé que algo me está ocultando, pero todavía no me entero de qué se trata. Hoy mamá quiere una cena con todos, sé que quiere que pasemos tiempo juntos y nadie fue lo bastante idiota como para negarle eso. Solo Sango y Miroku faltaran porque Hisui aún está algo pequeño para exponerlo, después todos hemos aceptado.

Cuando sé que Kagome ya debió salir del baño camino a la habitación arreglándome la camisa y me quedo quieto en mi lugar viendo a mi esposa. Tiene una pierna sobre el banquito dándome un espectáculo increíble. Mi miembro se tensa cuando le recorro con hambre. Maldición, ni siquiera soy consciente de cuando llego a ella, cuando la hago caer conmigo. Solo soy capaz de pensar con la polla porque Kagome siempre se ve como una jodida fantasía.

—Me temo encanto—murmuro en su oído, la siento estremecerse y pego mi miembro duro contra su culo restregándome—me temo que, si me pides que te tome, no podré ser dulce ni amable, porque me siento fuera de control—susurro vuelto un adicto con el aroma de su piel, la suavidad, joder.

Mis ojos se encuentran con los de Kagome y la realidad es que antes había ganas, pero creo que ambos estamos en un punto donde ninguno puede soportar más. No entiendo cual es esta necesidad, antes estaba, pero no así. Me afecta al punto que siento que moriré si no me follo a mi esposa, la polla me duele, la piel necesita de su toque.

Necesitar.

Esa es la palabra, necesito con urgencia tomar a mi mujer como a ella le gusta. Mi cabeza está nublosa porque solo necesito que ella me deje hacerlo, solo eso para calmar esta hambre que siento que me consume.

Los pezones se le marcan sobre la poca tela del encaje en sus senos, llevo una mano a ellos acariciándolos sobre la tela, haciendo que tu pezón ruede cuando mi pulgar lo encuentra, Kagome gime bajo y no puedo dejar de observarla a ella.

Es la mujer más hermosa que mis ojos han sido capaces de contemplar jamás. Tengo ganas de admirarla como debo, pero siento que mi boca, manos y pene son los que quieren hacerle un altar.

—No quiero que me hagas el amor—murmura finalmente a todo lo que le he dicho—tómame cómo quieres—con una velocidad que debería asustarme giro a Kagome y la pego al ras de mi cuerpo buscando su boca como un adicto a su droga favorita.

Ella jadea mientras la devoro con ansias, unas que arden mientras mis manos van a su culo tomándolo, magreándolo a mi antojo. No hay espacios entre nosotros, la tengo tan pegada a mí y aun así siento que es demasiado lejano, que su cuerpo aun no ocupa todo el espacio, que necesito más de ella, más de esto que arde en mi piel con el sabor de sus labios en mi boca.

Travieso AmorWhere stories live. Discover now