_ ¿Quién es, Tom? -Le preguntó Camila mirándolo con curiosidad y el chico le sonrió con aire misterioso.
_Es una buena amiga mía. -Le dijo sin querer ofrecerle más detalles.
Estaban en un pequeño bar cercano a la universidad de Camila, a donde habían ido a pasar el rato y ponerse al día ya que llevaban varias semanas sin verse, dados los compromisos académicos de ambos y él le acababa de informar que Ross venía en camino a encontrarse con ellos.
_Pensé que pasaríamos el rato los dos solos. -Se quejó Camila y él se rio con malicia.
_Sé que te mueres por tenerme solo para ti, pero no seas celosa que ella no está interesada en mí. -Le dijo con sorna ganándose un golpe en el hombro.
_Cuando ella llegue, me voy. -Anunció Camila. _Vine a este hueco ruidoso porque pensé que tenías cosas interesantes para contarme.
-Mila, relájate. -Le pidió. _En realidad, invité a Ross porque quiero que la conozcas.
Camila lo miró con los ojos entrecerrados intentando leer en sus palabras y en sus gestos a qué se refería.
_Llevo varias semanas queriendo presentarlas. -Siguió diciendo Tom. _Pero me has rechazado todas las invitaciones a mi universidad.
Camila prefirió guardar silencio, no quería confesarle que su negativa era por miedo. No quería que por mala suerte, se encontrara a Lauren con alguna compañía indeseada para ella, si iba a esa universidad.
_¿Y para qué quieres que conozca a la tal Ross? -Prefirió preguntar. _¿Te gusta y quieres que le dé el visto bueno?
Tom dejó salir una risa nerviosa.
_Sí me gusta. -Le dijo mientras miraba hacia la puerta del bar, esquivando la mirada de Camila. _Pero no me gusta para mí sino para ti.
Camila se quedó helada y lo miró como si a Tom le hubiese nacido otra cabeza.
_Dime que estás bromeando, Tom. -Le pidió sintiendo que le faltaba el aire.
_Mila, tranquila. -Le dijo con suavidad e intentó tomarla por el hombro, pero ella lo esquivó. _Sólo conócela, por favor.
_¿Pero qué mierda, Tom? -Le rebatió con rabia. _No estoy interesada en conocer a nadie.
_¿Hasta cuándo vas a seguir esperando a Lauren? -Le dijo Tom impacientándose. ¿Cómo carajos te la vas a sacar del corazón si no te permites conocer a nadie más?
Camila se pasó la mano por la cara repetidas veces, tratando de calmar la rabia que la había poseído.
_Vamos a ver. -Le habló con ironía. _Supongo que crees que en esta historia yo soy Calisto ¿Y tú eres Celestina o Sempronio?
Tom se rio por lo bajo.
_No sé mucho de literatura, pero creo que no puedo ser Celestina porque no estoy usando mentiras ni engaños.
Camila rodó los ojos, fastidiada.
_Pongámonos serios, Tom. -Le dijo tratando de llenarse de paciencia. _No quiero conocer a nadie, no me interesa salir con nadie.
_Camila...
No pudo continuar hablando porque una rubia sonriente los interrumpió.
_Aquí estás. -Le dijo la recién llegada, antes de abrazarlo y el chico le correspondió, mientras Camila maldecía mentalmente a su amigo.
_Mira Ross, ella es Camila. -La presentó cuando deshicieron el abrazo. _Camila, ella es Ross.
La rubia le sonrió a Camila y sin darle tiempo de reaccionar, se acercó y le dio un beso en la mejilla.
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Seculorum
FanfictionUna niña alejada de su entorno familiar es acogida por una adolescente en su nueva escuela y crearán un lazo que no se romperá, ni con el paso de los años o las circunstancias de vida.