Epílogo

15.2K 1K 191
                                    

Narrando Nicole Lina Carson

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Narrando Nicole Lina Carson.

Tres meses después...

Me voy a casar... ¡Me voy a casar!

No lo puedo asimilar aún, ni aunque tenga el vestido de novia más hermoso, el peinado y maquillaje espectacular, ni a mis damas ayudándome a ajustar los últimos detalles antes de ser llevada al altar por mi padre. Donde el amor de mi vida, mi otra mitad, me va a estar esperando con tremendas ganas de convertirme en su esposa de una vez por todas.

Puede que piensen que ha sido muy apresurado la boda, pero teniendo un prometido que, con tan solo tronar dedos, cualquiera hace lo que sea —cosas de billonarios—, no le vimos la necesidad de esperar tanto tiempo, mucho menos cuando tengo a un pequeño creciendo en mi barriga y queremos recibirlo estando ya casados.

Sí, nuestro primer hijo va a ser niño. La familia está que se vuelve loca, por un lado, mi familia muere por introducir el tercer nieto a la familia y, por otro lado, los Dimitirou mueren por recibir a su primer nieto. Cada uno tiene su calendario programado para marzo, poniendo una tacha día por día, ilusionados por darle la bienvenida al pequeño.

A este punto puedo decir que mi pavor se ha controlado; voy a ser mamá primeriza como mi madre lo fue en su momento y, al igual que ella, voy a aprender a ser madre conforme pase el tiempo.

Mi abuela dice que me he sacado la lotería con el hombre que decidí tener un hijo y no puedo estar más de acuerdo con ella. Maximiliano también va a aprender a ser padre y, de lo que lleva hasta ahora, está siendo uno increíble cuidando y consintiéndome, porque este pequeño que tengo en la barriga está siendo muy exigente.

Igualito a su padre va a ser.

—Si me llagara a casar estando embaraza como tú, espero verme así —señala Becca, recorriéndome de pies a cabeza.

—¿Verdad? —interviene Eli.

—No sean exageradas —digo, sonrojada.

—Es que te ves taaaan preciosa —Becca me da un beso en la frente.

La abuela Lisa, mi madre, Sofía, Alicia y Eli empiezan a parlotear que Becca tiene razón. Todas al mismo tiempo, haciéndome reír.

Con los toques que dan en la puerta, las cinco mujeres guardan silencio, mientras Becca va a puerta, diciendo que si es Maximiliano otra vez queriendo echar un vistazo de como me veo, lo va a jalar de la oreja de regreso al altar.

—Soy yo, niña —dice mi padre, torciendo los ojos.

—Oh, pasa —se hace a un lado.

Mi padre entra y, tan solo poner ojos en mí, empieza a llorar.

—Perdón, es que te ves muy bonita, mi niña.

Lo abrazo con fuerza, parpadeando repetidas veces para mantener las lágrimas en su lugar. Aun así, resbalan por mis pómulos, pero estoy agradecida con Kate y Alexa por utilizar maquillaje a prueba de agua. Lo necesario para un día como este.

Mientras Me Busques (1º) ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora