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-¡bien! Buen tiro Todoroki.

Shōto asiente agradecido con una pequeña sonrisa y baja su arco y espera a que los demás terminen.

-Bueno, ¡nos vemos mañana sin excusas! Con los brazos cruzados no llegaremos a las nacionales.

Les recuerda Monoma cuando algunos rezongan que las vacaciones empezaban en estos días.

Todoroki suspira cansado y guarda sus cosas dirigiéndose a la salida con demás del equipo.

-¿tu novio vendrá hoy por ti Todoroki san?

Pregunta un beta de primero y Shōto se sonroja y se encoge de hombros.

-no somos novios...

-¡lo son!

-los únicos que piensan eso.

Empiezan los demás y Shōto niega sin verle el caso seguir negándolo.

Lo quería más que nada pero no lo admitiría, Izuku había estado viniendo por él los últimos días que empezaron de nueva cuenta los entrenamientos, Izuku terminaba la práctica de rugby y le esperaba para acompañarle a casa, incluso saliendo iban por chocolate caliente o té y caminaban hasta la playa cerca de la casa del peliverde.

Había creado esa rutina acogedora y estaba empezado a amarla cada día más.

Y pues era claro que las cosas iban bastante bien, sobre todo cuando ni Shinsō ni Inasa se habían aparecido por ningún lado desde hace dos semanas después de la propuesta de los Inasa, ni siquiera había visto a Inasa, que eran vecinos.

Era como si la tierra se los hubiera tragado y eso le daba algo de miedo.

Pero trataba de no pensar demasiado en eso pues estaban bastante bien por ahora.

Izuku y él estaban bien, salían, hablaba de sus sentimientos, incluso Shōto a veces contaba chistes que no daban risa pero Izuku aún así se reía y le daba besitos en la cabeza después de despeinarle el cabello.

Kaminari había regresado a la escuela para terminar sus últimos exámenes que había suspendido por estar en el hospital y Uraraka parecía estar bien de su rodilla y la próxima semana regresaría a sus entrenamientos con las porristas.

Todo parecía calmarse y eso le ponía de buen humor pero al mismo tiempo algo inquieto.

Sobre todo cuando tampoco sabía nada de Touya.

Suspira frustrándose de repente, toma su cabello y lo jala un poco hacia atrás para quitarlo de su frente y entonces algo golpea su frente haciendo que pare de caminar.

Ve la rosa en el suelo y la toma con la nota adjuntada.

"Tu queriéndome esta noche parece imposible, como nieve en la playa"

Shōto sonríe cuando reconoce la caligrafía ladeada y levanta la mirada teniendo que doblar un poco el cuello.

Izuku le sonríe mirándolo desde arriba, sonriendo como un maldito demonio hermoso.

Lleno de tierra y con la ropa deportiva llena de sudor, estaba seguro que Izuku estaba tratando de soporta quitarse la camiseta y andar fresco aunque sabía que no podía porque hacía bastante frío.

-hola-murmura olvidando las frustraciones de hace un momento.

Izuku baja de un brinco de las gradas donde estaba y se acerca a Shōto quitándole la mochila con delicadeza del hombro para llevarla por él.

Algunas chicas y betas murmuran y chillan sintiendo envidia como el musculoso brazo de Izuku pasa por la espalda baja del omega.

-hola Sho, ¿te gusto la rosa que te traje?

Entre Pinos y Rosas -DekutodoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora