Entre Pinos y Rosas -Dekutodo

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-¡se va a matar!-grita una mujer cuando ve al omega pelimorado acercarse más a la orilla-llamen a la policía.

Shōto ve el rostro lleno de lagrimas de Shinsō y lo observa temblar y teme por él.

No piensa mucho cuando entra en pánico, así que como siempre simplemente por impulso salta el barandal ignorando a la personas que trataron de detenerle y brinca algunas piedras para llegar hasta donde está Hitoshi.

-Shinsō-llama lo más suave que puede.

Como si el mínimo aliento fuera a tirar al omega por la borda.

-¿qué haces aquí?-Shinso le ve de reojo-véte-musita con voz gangosa.

-pero...-Shōto trata de acomodar sus ideas-Shinsō, por favor baja de ahí, es peligroso. No estás pensando las cosas con claridad, hablemos...

-bien-asiente con rabia y limpia de forma desordenada su rostro-este día, cuando trate de evitar que Izuku fuera a impedir el compromiso que planeaba Inasa...yo le dejé algo muy claro-Shōto traga saliva cuando ve los ojos dolidos del omega, la última frase parece llenarse de coraje.

-Shinsō...

-y-yo le jure...que si me dejaba-solloza-le juré que si se iba, me iba a morir.

Shinsō hace un movimiento peligroso en la orilla alertando a Shōto.

-Shinsō, está no es la forma de solucionar las cosas, no sabes lo que dices, tu...

-¡se perfectamente lo que estoy diciendo! Omega-masculla con coraje mirando con odio reflejado en su iris lila-Izuku será el único culpable-solloza-se lo deje en claro que si me dejaba me iba a matar, me iba a morir y él decidió no creerme y por ende él será el único culpable de eso. Cumpliré mi palabra-voltea a verle y con odio le sonríe y Shōto aprieta los dientes-¡espero vernos en el puto infierno maldita zorra!-escupe Shinsō antes de voltearse y dar un paso el falso.

-¡no Shinsō!

Shōto entra en pánico y corre lo más rápido que puede y le toma del brazo para tratar de detenerlo pero el peso de Shinsō hace palanca y ambos caen y todos los espectadores jadean asustados.

Por suerte Shōto logró desviar la caída y caen una roca un poco más abajo pero no dejaba de ser peligroso.

Una fuerte ola se levanta majestuoso sobre ambos y ahoga el grito de frustración que larga Shinsō.

Mientras Izuku había terminado la larga fila al otro lado de la calle y llevaba los dulces mientras buscaba a Shōto con la mirada.

Se extraña cuando no le ve cerca, sin embargo se empieza a sentir mortificado cuando un cúmulo de gente se amontona en el barandal cerca de donde había visto a Shōto admirar el mar.

-disculpe, ¿sabe que está pasando?-pregunta a una señora que salía del montón de personas.

-Dios, hay dos omegas atrapados allá abajo, uno de ellos trato de saltar desde lo alto de las rocas y el otro trato de salvarlo pero cayeron muy abajo.

Izuku se congela cuando escucha aquello, suelta las bolsas de dulces y corre empujando a la gente que se amontonaba.

Esperaba que no fuera cierto pero la escasez de omegas en el pueblo era suficiente como para pensar que solo los dos omega que conocía estaban en esa situación.

Tal y como teme logra ver a Shinsō y a Shōto en una roca cerca donde las olas pegaban con mayor fuerza.

-¡Shōto!-grita asustado, Shinso y Shōto voltean de inmediato, Shinsō le ve con odio y trata de soltarse de Shōto.