⇁ 40 ↼

245 37 131
                                    



「 ᴀғᴜᴇʀᴀ ᴅᴇ ᴇsᴛᴇ ʟᴜɢᴀʀ 」




Avanzamos por aquel estrecho conducto, mientras siento que el aire de mis pulmones se va acortando con cada paso que doy. Sinceramente, ahora que tengo luz verde por parte de mis amigos y de Newt, no quiero equivocarme.

Sigo por detrás a un Aris que gatea más rápido que nunca y a pesar de que siento por detrás a Vincent. Las manos me sudan pero los tres terminamos por llegar al final del camino, y cuando Aris me deja paso primero, bajo la atenta mirada de Vincent, abro con cuidado la reja y tras revisar que no se cae alertando a quien sea. Agarrándome con fuerza de este, termino por saltar hacia abajo.

Aris me sigue con rapidez y después salta a nuestro lado Vincent, y cuando camino revisando que no haya moros en la costa, señalo al chico de cabellos casi plateados a que cierre la rendija por si acaso. Sin embargo, antes de poder hacerlo y algo que nos alerta a todos, es que una mano se asoma por el otro lado deteniendo la acción del chico de ropa de cuero, y nos echamos hacia atrás cuando vemos caer al mejor amigo de Newt, Minho Khan.

Aquello de inmediato me obliga a ponerme de mal humor, y frunciendo el ceño, extiendo mis manos sin saber qué demonios hace aquí. Pero este cierra la rendija y cruzándose de brazos, solo dice: —¿Qué? Newt me ha obligado, así que no perdamos tiempo, larchos.

Aún sintiendo que un calor molesto se reparte por mi bajo vientre, me acerco en compañía de los otros tres chicos y paso la tarjeta de identificación y claramente, robada, por el acceso a la puerta de metal en donde habíamos visto desaparecer lo que claramente anexionábamos con cuerpos; no había que ser estúpido para saber que eran cuerpos humanos, y muy seguramente de que eran de los chicos desaparecidos.

Todos conservamos el aliento cuando las puertas se abren y con cuidado, nos damos paso al interior. Allí dentro, hay todo lo que se podría esperar de un laboratorio, uno muy parecido al que yo solía visitar en mi distrito. En el que tantas noches me había pasado, y en mi juicio inocente, creyendo que ayudaba a Ava y a la gente del Capitolio.

Damos unos pasos por delante, para distinguir a nuestro alrededor que aparte de batas de científicos y que permiten que todos los posibles químicos utilizados aquí dentro no ingresen en la piel para causar reacciones por estas, nos detenemos cuando Minho silba sorprendido ante la imagen que se nos muestra. Pero yo siento que la bilis me sube por la garganta, por suerte no soy el único. Aris se cubre los labios, asqueado.

—Tal parece que tenias razón, shank. Aquí hay un montón de bichos raros —dice el mejor amigo de Newt, mientras Vincent se acerca para observar mejor.

Veo que Minho se aproxima hacia una mesa cercana, en donde reposa una linterna y no tarda en comprobar si tiene pilar y si funciona. Pronto nos ilumina y me obliga a apartar la vista de un montón de masas de cuerpo uniformes que descansan en tubos gigantes de prueba, es realmente desagradable.

—Tenemos que darnos prisa, no creo que tengamos mucho tiempo antes de que alguien venga —señala, para asentir de acuerdo con Vincent, quien ha antes le he visto coger algo de la misma mesilla de antes, pero no tengo tiempo de curiosear para saber de qué se trataba cuando otras puertas al frente se abren de nuevo.

Minho es el primero en darse a la entrada a la nueva sala, seguido por Aris que parece bastante apegado a este; a lo mejor al verlo más fuerte o capacitado, se siente más seguro; el pensamiento me produce incomodidad, porque sí, comparándonos, él es mucho más capacitado de proteger a Newt. Yo nunca podría superarle.

𝐓𝐇𝐄 𝐒𝐂𝐎𝐑𝐂𝐇 𝐓𝐑𝐈𝐀𝐋𝐒 𝐈𝐍 𝐅𝐈𝐑𝐄 | Newtmas (𝑨𝒖) ²Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt