Capitulo 39

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Ivan
Me despierto y tengo a Miray a mi lado, se ve aún más hermosa, hay un brillo en su rostro que no puedo explicar. No puedo creer que esté sosteniendo a mi hijo/a ella tiene una parte de mí dentro de ella. No puedo creer que seré papá. Estoy emocionado, ni siquiera puedo expresar todas las emociones que siento.

Empiezo a acariciar suavemente su barriga aún plana y ella abre los ojos y sonríe.

-Buenos dias hermosa, preparémonos para bajar a desayunar.

-Buenos dias Ivan como amaneciste?

-Muy feliz no me puedo quejar.

Miray me sonrie y se levanta, se pone la bata y se sienta en la cama.

-No tengo hambre, he tenido muchas náuseas. Sólo quiero dormir, este bebé me quita toda la energía. Desde que estoy aquí he dormido la mayor parte del tiempo estoy agotada sin ninguna razón.

Justo después de terminar de decir eso sentí la necesidad de vomitar, rápidamente me levanté de la cama y corrí al baño. Luego sentí que Ivan me quitaba el pelo de la cara y me lo sostenia mientras vomitaba despues me masajeó la espalda de una forma tan tierna.

-Pobresita mi hermosa, ese bebito mio si que te esta dando lata. Sabes que pediré el desayuno para que puedan traerlo aquí. Comeremos en la habitación y luego podremos ir a la playa un rato.

-Esta bien, déjame ducharme.

-Yo también me voy a duchar.

Miray y yo nos duchamos juntos y no puedo evitar notar que su cuerpo a cambiado se mira diferente al de hace unas semanas.
Se ve absolutamente hermosa como siempre, pero sus curvas estan mas marcadas. Por alguna razón tenerla embarazada me exita.
Después de un rato nos arreglamos y llegó el desayuno ella no comió mucho tenía muchas náuseas. Se tomó sus vitaminas y salimos a caminar a la playa.
No nos quedamos ahí afuera mucho tiempo. Si a caso duramos 2 horas y regresamos a la habitacion.
Miray estaba agotada, ella se acostó y comencé a masajearle la barriga. Decir que estaba obsesionado con un pequeño humano que aún no había conocido, era un eufemismo.
Ella me abrazó y escondió su cara en mi cuello y se quedó dormida la mayor parte de la tarde. No me importó pasar mi tarde aqui con ella. Estaba cuidando a ella y a mi bebé y no había ningún lugar más seguro que en mis brazos.

1 Semana Despues

-Chula ¿Estás lista? Te recogeré en unos minutos para ir al médico.

-Sí, estoy lista, te espero abajo.

Unos minutos más tarde llegó Iván, se bajó y me abrió la puerta de la camioneta y me ayudo a subir. Se inclinó hacia la puerta del pasajero y me dio un beso en los labios y luego acarició mi vientre y comenzo a hablar con el bebe.

-Hola mi amor chiquito, Voy a ir a verte hoy miamor.

Fue muy extraño ver a Ivan actuar de tal manera, era un lado tan tierno y dulce que nunca había visto. Un hombre de fuerte caracter, grosero, arrogante se a doblegado a un bebe que todavia no a conocido. Me hizo sonreír porque supe en ese momento que iba a ser un buen padre.

Llegamos a la clínica y estábamos en la sala de espera, llené algunos documentos y esperé hasta que fuera mi turno. Iván tenía a mucha gente vigilando el lugar por nuestra seguridad.

-Miray Yilmaz.

-Ven vamos Ivan es mi turno.

Entramos y comienzan a realizar una ecografía. Ivan está tan concentrado en la pantalla que está tan atento que incluso saca su teléfono y comienza a grabar.

-Mire señor, el bebé está aquí y esto de aquí es su corazoncito, ¿le gustaría escucharlo?

-Claro que si.

Brilla Como La LunaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora