Brilla Como La Luna

Capitulo 40

Ivan
-Miray tengo que irme ahora pero cualquier cosa que necesites llámame no importa la hora. Hoy no puedo quedarme a pasar la noche chiquita, tengo algunas cosas que hacer cuando llegue a casa pero vendré mañana.

-Está bien.

-Miray no olvides tomar tus vitaminas y el médico dijo que necesitabas tomar más agua. Y será mejor que desayunes, tienes que alimentar al bebé temprano.

-Iván, ya me lo has dicho un millón de veces. Te entendí la primera vez que me dijiste, ya te dije que estaré bien.

-Okay ya nos venos mañana

-Oye ven aqui Ivancito, el doctor dijo que necesitaba hacer ejercicio, ¿por qué no me ayudas con eso?

-Ay mujer no me hagas esto me tengo que ir.

-Seguro?

-Si.

Miray se quita el vestido y lo deja caer al suelo y me sonríe.

-Ooopsss se me cayo. Te preguntaré de nuevo¿estás seguro que tienes que irte?

-Puta madre Miray por qué haces esto sabes que esa es mi debilidad.

Camino hacia ella y la cargo con mucho cuidado, no quiero lastimarla. Me siento en el sofá y ella se sienta en mi regazo, me quita la camisa y comienza a besar mi cuello. Mis manos comienzan a recorrer su cuerpo suave. Beso su cuello y luego voy hacia sus pechos perfectamente redondos y empiezo a chupar sus pezones, sus pechos se hacen más grandes cada día que pasan, son mis favoritos. Me quito los pantalones y saco mi pene de mi boxer y Miray pone su pantie a un lado y lentamente se sienta sobre mi pene. Ella comienza a saltar en mi la agarro por las caderas con cuidado. Mis manos agarran su trasero y lo aprieto y lo acaricio.

-Amor ve más lento, no quiero lastimar al bebé.

-Iván no te preocupes, no le estamos haciendo daño al bebé, lo estamos meciendo para que se duerma, relájate.

-Ahhh puta madreeeee me traes loco miamor que rica estas Mmmmm......

-Ahhh papi que rico!!

Unimos nuestras frentes mientras Miray sigue saltando en mi pene, jadeos y gemidos se nos escapan. Los dos estamos cerca de nuestra liberación y despues de unos cuantos movimientos mas ambos nos corremos al mismo tiempo.

Ayudé a Miray a ponerse la ropa y arreglé la mía y ahora necesitaba irme.

-Tengo que irme ahora Miray.

-Mmm esta bien adios.

-Que no me digas que me vaz a extrañar.

-No ni un poco, ya sabes que me encanta la soledad y el silencio en mi casa, y tu presencia me esta molestando. Orale fuera andale pues ya vete con cuidado.

-Te preocupas por mi?

-Si claro eres el padre de mi bebe.

-Ya sabes si necesitas algo llámame y aquí estaré.

-¿Lo que necesite?

-Si, todo no importa la hora.

-A bueno esta bien, ay nos vemos despues buenas noches.

Ivan me da un beso en la mejilla y acaricia mi vientre y se va. Yo voy a darme una ducha, hago mi rutina nocturna y me voy a dormir tan pronto como mi cabeza toca la almohada me quedo dormida.

Lugar desconocido En La Sierra

Ivan
Después de llegar a casa trabajé unas horas y después tome una ducha y me fui directo a la cama y me quede dormido. Estaba tan cansado por mi día ocupado.