Capítulo 25- Lo construimos para destruirlo

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Capítulo 25

Lo construimos para destruirlo


"En el amor verdadero la distancia más pequeña, es demasiado grande"

Anónimo

Multimedia: Burn it down— Linkin Park

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Ubicación desconocida.

Casa Petrova

"Stacey Falcon"

Un nombre que da vueltas en la cabeza de Karenina Petrova, mientras se ejercita en la caminadora, amanece en su pueblo de Bulgaria, pero ella no ha dormido en treinta y seis horas, no solo por la persecución de Karaman, sino por la fijación de su único hijo por una militar, apenas se puede creer tal exabrupto por parte de Nikolai, pero bien sabe ella que en asuntos del corazón no hay manera de contenerse, hasta la ha mandado a cazar si los ve juntos, pero Nikolai se ha cargado a quien lo intentó. El olor a café se cuela por sus fosas nasales haciéndole degustar aun sin haberlo puesto en su boca, su empleada seguramente ha iniciado sus actividades y eso la hace cae en cuenta de cuanto tiempo ha pasado, las gotas de sudor le corren libres por las sienes para caer en el suelo oscuro de la sala de entrenamiento.

Fuera nieva, lo ve por la pared de cristal del lugar, una capa blanca cubre todos los objetos acumulada de toda la noche por la tormenta de nieve.

Apaga la máquina para bajarse y secar su frente con una toalla de manos colgada en los apoyabrazos, entonces camina hacia el pasillo de la gran casa, estaba en una sala redonda al final del caminillo del pasillo principal por donde las paredes tienen fotos familiares, con algunas incluido Thomás Deveraux con Nikolai de bebé entre los brazos, fue un acuerdo, como un donador de esperma básicamente, pero él se mostró cariñoso con su hijo hasta que decidió irse para escapar de la vida en La Triada, aun así mantuvo contacto y aunque no fuera necesario, pagaba su manutención, así como la universidad.

Nikolai preguntó por papá, pero fue una etapa, Karenina le dio todo, por ello otra figura no le hacía falta durante los años, porque lo era todo para ella y lo puso en un altar sagrado como quien más amaba, por quien daría la vida y ahora, involucrado en el negocio lo hará más grande que Kaan Karaman, él en un principio lo rechazó de tajo, pero algo desconocido para ella le hizo cambiar de opinión, no sabe qué o en cual momento lo decidió, pero ahora las cosas son así, aunque se ha unido más a Dmitry durante esto y ella, contrario de lo que pasa con Viktor, no le molesta, su hermano menor engaña, parece un niño bueno, pero la sangre perversa de los Petrova le hierve en la sangre, es cruel, duro, frío, así fue criado por Ivalyo como a todos sus hijos, con rudeza y sangre derramada.

Sus pasos hacen eco en la casa pues solo están ella y la empleada doméstica, en realidad, una de sus filas asignada ahí, el resto es silencio absoluto, solo el ruido inaudible para otros de sus pensamientos más profundos, la atormenta, esa niña, esa, jodida niña con el apellido que ya le hirió una vez con el golpe de Sergey ha llegado a la vida de su hijo para trastocarlo «¿Cómo fue posible?» se pregunta mientras atraviesa el pasillo, a un lado la sala decorada en blanco como una capa de nieve impoluta con detalles dorados, incluidos en las velas, ribetes de este color las adornan apoyadas en las mesas de centro en puro cristal tallado, bajo lámparas de araña con cristalería colgante como pequeñas lágrimas en un llanto fijado.

Cenizas Quedan: RP#2©Where stories live. Discover now