𝐸𝒮 | Malena Recalt. Si, la hermana de Matías Recalt, nunca creyó que una visita a su hermano podria convertirse en el detonante de todas esas emociones que no sintió en dieciocho año, o al menos no con tanta intensidad.
Lo que no contaba era tener...
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ᴹᵃˡᵉⁿᵃ'ˢ ᴾᵉʳˢᵖᵉᶜᵗⁱᵛᵉ ²⁰²⁷
La oscuridad se desvanece de mis ojos cuando el timbre del teléfono me martilla la cabeza con crueldad.
Miro a mi alrededor y no reconozco nada en ese momento. No se de donde salió el césped en el que estoy sentada, ni las pinturas esparcidas por el mismo, ni la ropa que traigo puesta, ni el aire que respiro.
Pero hay algo que si reconozco al instante, el cuadro frente a mi, aún incompleto pero con una extraña sensación de que ya lo había terminado, que iba a dárselo a alguien pero que no pude.
Almas Eternas, incompleto.
Ligeras ráfagas con recuerdos borrosos se pasean por mi mente.
España. Pero yo no conozco España.
Un chico, un mejor amigo. Pero yo no tengo uno.
Tres amigos. Pero los pierdo en mi mente.
Un hombre, unos ojos y un amor latente. Pero, ¿Quién es y donde está ahora?
Un hermano. A ese boludo si lo recuerdo y lo tengo bastante presente al otro lado del teléfono.
—¡Volví a casa, te toca! —por un momento mi drama mental desaparece.
Todo fue un sueño, un simple sueño.
—Me van a extrañar acá —bromeo.
¿Quién me va a extrañar si en todo este tiempo no pude conectar con nadie? Llevo cinco años en París y nunca sentí que pertenezco acá, pero siempre sentí que algo, o alguien, me estaba esperando.
—Dale, Male —insiste—. Te graduaste hace casi un año, solo vení unos días y luego te vas.
—Mati...
—Hace cinco años que no te veo —me reprocha—. Ni siquiera aceptaste ir a España antes de empezar la carrera.
Una brisa me golpea la cara y se siente como si volviera a ese día. Yo llegando a casa, mamá diciendo que Matías quería que fuera a España dos meses, un escalofrío haciendo que me negara y el arrepentimiento persiguiéndome por estos cinco largos años.
¿Qué hubiera pasado si decía que sí?
—Voy a ir esta semana, lo prometo —escucho vítores del otro lado del teléfono y tras una corta charla siguiente, la llamada se cuelga.
Observo el panorama que me rodea y siento ganas de huir pero extrañamente de quedarme al mismo tiempo. Como si se avecinara una tormenta por el norte y un día de primavera por el sur. O tal vez solo estaba delirando por el olor a pintura de las ultimas horas.
Recojo mis cosas en silencio mientras los recuerdos de cuando tenía los ojos cerrados me ahogan.
¿Quién es él? ¿Quiénes son ellos? ¿Qué hicieron en mi vida durante esas horas que dormí? ¿Por qué los extraño si ni siquiera los recuerdo? ¿Por qué no pude dormir por siempre?
La campanita de la puerta al entrar a una cafetería se siente como si volvieran a despertarme. La gente hablando me molesta, el olor a café me molesta. Pero el ambiente de nostalgia que este lugar emana siempre será mi favorito.
Las horas pasan sin control mientras me despido en silencio de todo. Se que no podré abandonar mi hogar dos veces.
Se que este nunca será mi hogar.
Pero, ¿Por qué ese sueño se sentía como un hogar?
Un click me pone en alerta y giro a la mesa que tengo en frente. Lo único que distingo es hombre oculto detrás de una cámara, viste completamente de negro, tiene el cabello largo y creo que me fotografía a mi.
Estoy a punto de recoger mis cosas y huir al creer que es otro paparazzi buscando saber más de la vida Matías a través de su hermana.
Si supieran que no lo he visto hace media década.
Tengo todas las cosas en mano cuando lo veo bajar la cámara y el mundo se detiene en ese preciso instante.
Esos ojos me atrapan, otra vez.
Los recuerdos me vuelven a atacar pero ahora más violentos, tanto que incluso siento el deterioro físico de un mareo, una visión borrosa y unas asquerosas ganas de vomitar.
Un anillo, Venecia, un mate, un café, una discusión, muchísimo café, una mujer, un cuadro, poemas, el hilo rojo... Juani.
¿Quién es Juani?
—¿Estás bien? ¿Hablas español? —parpadeo y lo tengo frente a mi, tan claro como el agua.
—¿Quién sos?
Cuando creí que todo había terminado ese día, estaba totalmente equivocada. Ese día fue apenas el inicio.
—Soy Enzo, ¿vos?
—Soy Malena.
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𝓕𝓘𝓝
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🎀 Este iba a ser originalmente el final, pero nunca pude conectar con el por que acá solo eran Enzo y Malena. No hay Juani, Matías, Blas, Fran, Valen, no hay nada. Acá ni siquiera existía un Mati y Male y siento que mi historia va mas allá de un amor romántico, como ya lo dije muchas veces. Así que por eso este no fue el final. 🎀
