Por siempre juntos cachorro (yaoi)

Parte sin título 53

El iluminado por Dios, se confundió, comenzó a dudar de su decisión, "¿si esto no fue una coincidencia quiere decir que Dios me está ayudando?, ¿pero cómo lo haré?, ya no puedo sufrir más, no quiero sufrir más pero lo seguiré haciendo porque soy un puto, mentiroso, asqueroso, inservible, roto un ser despreciable, doy asco...". Se angustió, su pieza comenzó a girar, le dolía el pecho tan fuerte, tan fuerte, que pensaba que se iba a morir, se alegró, por fin desaparecería, pero no fue así, estaba sufriendo un espasmo esofágico, sólo eso, se desmayó del dolor...

Abrió los ojos, "estoy vivo, rayos...", agarró su cuaderno y cual bitácora del capitán registró los acontecimientos vividos...

Se metió en la página de su mejor amigo virtual...

(Hoy es el día, me despido, gracias por leer, estoy tan feliz, me siento libre, por primera vez estoy seguro de lo que es correcto, tengo la certeza de que esto es la solución, gracias a todos los que me escribieron y leyeron... Recuerden que me voy feliz...adiós). "No, no me dejes, tú también me abandonas, por favor no te vayas aún... Tengo que encontrar el plan perfecto, no puedo quedar solo..."

Al otro día faltó a trabajar y a clases, caminaba hacia la estación del metro... Con su cuaderno en mano, se sentó y escribió:

"Tirarme a las vías del tren sería una opción pero retrasaré a toda esta gente que quiere llegar luego a su casa, tal vez si me quedo acá y veo cuál es la hora de menor afluencia... No, igual dejaré cadáver que ver, un asqueroso cadáver... Debo buscar otra opción", caminó sin rumbo, buscando una casa abandonada, algo donde colgarse, pero también dejaría un cadáver hinchado, morado con la lengua afuera... "Repugnante, descartado, nunca pensé que terminar con todo fuera tan difícil", volvió derrotado.

Siguió escribiendo...

"Soy un inservible no logro dar con la respuesta...", sentía tal grado de frustración que comenzó a pegarse, total, mañana era sábado Kageyama sensei no lo vería, combo en el muslo, ya no era suficiente, con el lápiz en la mano hizo círculos en el aire, respiraba entrecortado, una risa eufórica salió de su boca, apretaba los dientes, gritaba con la boca cerrada, apretaba los pies y  su abdomen, se acercó a la pared, primer azote de frente, segundo, tercero, paró cuando un hilo tibio corrió por su ojo derecho, al ver el color carmesí, entró en trance, rabia, tenía mucha rabia, odio a si mismo, este fue tal que en un ataque de honestidad para consigo se enterró repetidas veces el lápiz en los muslos, gritaba entre dientes, los ojos encendidos, "mas, necesito más"... La rabia fue disminuyendo, se cansó... Escribió lo sucedido y se durmió...

El fin de semana durmió, se levantaba sólo a tomar leche de chocolate con azúcar, las heridas no sanaban con la rapidez necesaria, debía faltar al club, hacía frío mucho frío, mejor faltaría a clases, Kageyama sensei podría irlo a ver a la sala, nadie debía enterarse, nadie...

Con la mirada perdida, le llegó la más brillantes de las ideas, según él...

Escribió: "¿y si me ahogo?, eso sería perfecto, me podría atar una piedra y así nunca jamás me encontrarían, dejaría una nota a mi mamá que me enamoré de alguien y me voy a recorrer el mundo, estará triste pero no sufrirá tanto, se librará de esta carga que no le permitió ser feliz, tengo que planearlo bien, Tanaka san si supiera estaría orgulloso, me acariciaría el pelo y me diría: bien hecho. Fui un tonto al dejar que me acariciara, alguien como yo no lo merecía, pero fueron los meses mas felices de mi vida, Tanaka san estarás orgulloso de mí ya lo verás, cuando desaparezca ya no tendrás que llevar dos cajas de obentos, además tu madre ya no deberá sobre esforzarse, ¿cómo no lo pensé antes, si era tan obvio?, jajaja, ¿mierda y si la cuerda se corta?, saldré a flote, debo buscar la solución a eso", por desgracia es inteligente, trastornado pero inteligente, "ya sé, haré como las mulas de drogas, me tragaré las piedras, pero que bien, debo buscar piedras, además tengo que terminar el dibujo de la familia de Tanaka san, sí... eso haré ahora mismo". Dibujó, quedó hermoso, estuvo toda la mañana en eso, lo metió en un porta plano, fue a comprar una cinta y pedaleo hacia la casa de su amado, se demoró mucho, aunque iba con el agua con azúcar, ya no hacía el mismo efecto que antes, parapetado en la esquina vigiló, nadie, dejó el porta planos en la entrada con una nota que decía para mi segunda mamá... Corrió a la bicicleta se alejó, recordó "debo comprar vaselina, mucha". Ya en casa estaba en el patio buscando piedras que fueran lo suficientemente redondas y pequeñas para poder tragar", en una bolsa llevaba un kilo, pero no era suficiente, además aún no elegía el puente, eso es importante, la hora, el lugar, etc... Buscó un lugar por internet...encontró el lugar perfecto, la hora decidida cuatro am, menos gente, menos posibles testigos.