29. OMM!

5.4K 355 750
                                    

El capítulo de hoy va dedicado a JulietteWeasley que estuvo comentando muchísimo durante toda la historia.

EL RETO SIGUE EN PIE. Quería volver a decirles que no desesperen si aún no llega la dedicación. Si pudiera dedicarles a todas de una sería genial, pero creo que más lindo es tener cada uno su propio capítulo.

Por otro lado, quiero también pedirles que si cambian su foto de perfil o usuario me avisen, porque me guío o identifico por ello. Si no me avisan terminaré creyendo que son lectores nuevos.

Y... ¡Espero que disfruten el capítulo! Tienen que saber que es very very important this chapter because... va a dar vuelta absolutamente toda la historia. Es como marcar un antes y un después.

(Ignoren mi inglés primitivo. Muchas gracias.)

*************

Oups ! Cette image n'est pas conforme à nos directives de contenu. Afin de continuer la publication, veuillez la retirer ou télécharger une autre image.

*************

-Es gigante.

La voz de mi hermana me despertó. Hablaba demasiado fuerte para el volumen de voz que podía soportar mi cabeza. Sentía que los sesos me martillaban y que en que cualquier momento quedaría deschavetado, con sangre escurriéndome por los oídos. Por suerte, no tenía ganas de vomitar.

Eso se llama resaca, hermano. Te la presento.

-Sí, idiota, lo sé, me pica y me duele -era la voz de Paris, lo que tal vez explicaba porque no estaba recostada junto a mí-. No me pueden ver con esto, Lily, sabes que la gente empezará a decir cualquier cosa...

¿De qué mierda hablaban? ¿Un moco?

Estaban cerca, tal vez a los pies de la litera, es decir, junto a la puerta de entrada. Permanecí sobre el mismo brazo en el que estaba apoyado, lo que facilitaba a mi oreja derecha el escuchar. Si espiaba un poco, podía ver a Hugo, desparramado sobre la cama con aspecto a moribundo.

-No puedo creer que lo dejaras hacerte un chupón.

¿Chupón? ¡¿Chupón?! ¡¿CHUPÓN?!

Ah, cierto, fui yo.

Bien hecho, campeón.

-En el momento no lo pensé, ¿bien? Tan sólo dime dónde está el quitamoretones y ya.

Sonaba frutrada con Lily y esta vez lamenté no poder observarla. Quería ver si era tan grande como Lily decía o únicamente exageraba (lo que era probable, estabamos hablando de mi hermana).

-En mi habitación, envuelto en un par de medias rosas. Si mi mamá o papá lo encuentran se preguntarán para que lo necesito y obviamente pensaran lo peor: que me pegan o que estoy con Lorcan.

La carcajada de Paris resonó y Hugo se removió en su cama. Como nadie más intervenía en la conversación, supuse que sólo ellas dos estaban despiertas.

Albus Potter y la maldición de los Potter || #PNovelOù les histoires vivent. Découvrez maintenant