Enamorada de mi profesor - AGUSLINA

CAPÍTULO XI

Después de ver a Agustín con su novia me volví más distante de él, me dolía mucho mirarlo y recordar que estaba con otra.

Me aseguré enfermarme para faltar a clase unos días, y mientras Fer me llevaba los apuntes me comentaba lo que pasaba en el colegio, en eso me contó que Agustín andaba muy extraño, como deprimido. Yo no le había dicho lo que me ocurría con él, ella sólo habló del tema como si fuera cualquier persona del mundo.

Luego de una semana no podía seguir fingiendo, por lo que al lunes siguiente asistí al colegio, y Fer tenía razón, Agustín seguía decaído, por lo que yo no era la causa de su tristeza como quize creer en un momento, de haberlo sabido no habría dejado de fingir, yo lo extrañaba y tenía la esperanza de que el también a mi.

Aunque tampoco fue una mala decisión, al acabar esa semana entendí lo que le pasaba, y fue lo que le dió a mi ser la primera estúpida chispa de esperanza.

*Inico Flashback*

Como siempre llegué muy temprano al colegio, quizás un poco antes de lo usual, voy camino a mi salón y no ví a nadie, hasta que escuche un llanto, caminé hacia allá. Podría ser uno de mis compañeros o mis amigos y sino de todas formas me gusta ayudar, por lo que me acerqué a ver que ocurría.

- Profesor Bernasconi.- dije asombrada al verlo.- ¿Se encuentra bien?- existen preguntas idiotas y esta, o sea estaba destruido llorando, es obvio que no estaba bien.

- Si señorita Kopelioff, no se preocupe.- dijo secándose sus lágrimas avergonzado y caminando velozmente, no pude evitarlo y lo seguí.

- ¿Necesita algo?- pregunté trás él, pero no era capáz de mirarme.

- No, no, es enserio, estoy bien.- dijo sin detenerse hasta la sala de profesores, sabía que no habría nadie por lo que ni me preocupe en entrar con él.- Disculpe por la situación, no creí que llegara alguien.

- No, está bien, es mejor botar las cosas antes que guardarlas.- dije a su lado.- ¿Quiere que le preparé un té o algo?

- No, ni lo piense, usted es mi alumna y no corresponde.- dijo él, ¿Por qué tenía que ser tan perfectamente responsable e intachable?

- Profesor es solo amabilidad, no me cuesta nada.- dije colocando agua del termo en una taza, luego una bolsa de té y se lo llevé junto con el endulzante.

- Gracias.- dijo cuando puse el té frente a él.- ¿Siempre es tan amable?- me preguntó.

Si es por él, lo sería siempre, me destrozaba el alma verlo así.

- Intento serlo.- respondí.- Usted me ofreció ayuda y confianza cuando Jorge terminó conmigo, si quisiera puedo compensarle.

- No, usted no se debe preocupar por mis problemas.- respondió él agitado sus manos en sentido de negación.

- Enserio se lo estoy ofreciendo, al menos se puede desahogar.- dije tocando su mano, y permítanme decir que fué increíble.

- Emilia canceló el matrimonio.- soltó sin más.

la verdad lamento su pena, pero a mi me hace inmensamente feliz y pensándolo más ¿Cómo se es tan idiota para dejar a alguien tan perfecto y tierno como él?

- Lo lamento.- dije poniendo mi mano en su hombro.- Pero usted mismo me dijo cuando esta situación estaba al revés y yo era la que lloraba por Jorge que estás cosas se superan.- al decir eso me miró y ambos sonreímos.- Se que quizás crea que un matrimio es peor que una ruptura de escolares, pero con Jorge llevábamos más de un año y también fue duro.

- ¿Usted está mejor de lo de su novio?- dijo él y yo asentí.- Puedo suponer que volvieron.

- Supone mal, quizás lo crea por lo de la fiesta, pero luego de eso no volvimos a estar juntos.- dije con una leve sonrisa sin separar mis labios.- Pero ya lo superé.

- Eso está muy bien, espero poder hacerlo velozmente.- dijo él.

En ese momento sonó el timbre.

- Debo irme a clases.- dije con cara de lo siento.

- Si, si, no valla a llegar tarde por mi culpa.- respondió velozmente.- Gracias, y lamento mucho que me haya visto en esta situación.

- No se preocupe, los profesores no son perfectos como el mundo cree, tienen problemas y también tienen derecho a desahogarse, imagino que no creía que alguien llegara tan temprano.- dije y el negó con la cabeza por mi última afirmación yo me limité y sonreí.

- Gracias, ahora valla a clases.- dijo bebiendo del té que le preparé.

- Adiós.- respondí saliendo de su oficina y corrí lo más rápido que pude a mi salón.

Gracias a Dios la profesora no había llegado aún, me senté en mi puesto y en cosa de segundos entró.

No comenté lo que había ocurrido con Agustín, ni que lo ví llorar, ni que su novia lo dejó, ni que estuve con él en su oficina consolandolo.

Yo estaba feliz parecía flotar por la vida en un mundo rosa y me mantuve así todo el tiempo, más ahora en las tutorías.

*Fin Flashback*

Ese día lo recuerdo muy bien, fue uno de los mejores de mi vida, toque su mano y su novia lo dejó, cosa por la que él sufría y me dolía verlo así, pero significaba una oportunidad para mi, me ilusioné, pues nos habíamos acercado un poco y la confianza estaba creciendo.

Hoy con respecto a mi pregunta "¿Cómo se es tan idiota para dejar a alguien tan perfecto como él?" Ya la respondí, y la respuesta es que no es tan perfecto como creía y que finalmente el idota es él.

..........

Les dije que no haría sufrir tanto a Caro... aún. 😱😱😱

Na broma! Pero se viene bueno, tengo la historia casi terminada y me gustó mucho como va😁

De todas maneras espero sus comentarios y acepto sugerencias e ideas💭💗

Feliz día de los inocentes a tod@s y con respecto a eso creo que las fans de Agus querían jugarle una broma y no escribir nada ni publicar nada de él hoy, tampoco comentar sus fotos para que si ven algo apoyen la causa😂😂😂

Eso besitos!💋