CAPÍTULO XXIII

2.3K 119 23
                                    

El tiempo siguió pasando y como Fer sabía que yo seguía con Agustín podía cubrirme de vez en cuando por las tardes diciendo que teníamos tarea y en especial por las noches los fines de semana.

Con Agustín ya llevábamos dos meses desde que volvimos al colegio y nos hemos escondido bastante bien, en realidad tratábamos de casi ni hablarnos dentro, es decir, lo justo y lo necesario, hasta ese día...

*Inicio Flashback*

Estabamos en la oficina de Agustín que aun compartía con el profesor González, él ya se había ido y yo estaba esperando que Agus termine de ordenar sus cosas para que nos vallamos juntos.

Me senté sobre la mesa y movía mi cabello, miraba de reojo a Agustín coqueteando con mis pestañas y mordía levemente mi labios inferior, con las piernas cruzadas.

- Carolina no quieras tentarme.- dijo sin mirarme separando exámenes y yo reí. ¿Cómo podía saber lo que hacia sin verme?

- No estoy haciendo nada Agustín.- dije inclinandome hacia atrás apoyando mis manos en la mesa y cerrando mis ojos.

- ¿No?- preguntó él y rió.

En unos segundos sentí sus manos en mis piernas por lo que abrí mis ojos de golpe.

- ¡Agustín!- susurré quitandolas.

- Carolina no puedes hacer esto.- dijo pasando mi mano cerca de su amigo.- Y luego esperar que no haga nada, estás provocándome.

Yo reí y Agustín se acercó a besarme.

- ¿Estás seguro?- pregunté.

- González ya no va a volver.- susurró y comenzamos a besarnos.

Me aferré a la cintura de Agustín mientras el bajaba sus manos desde mi cintura, pasando por mis caderas, hasta mis piernas, haciendo que abra un tanto de ellas para aproximarse más a mi cuerpo.

El beso comenzó a subir de intensidad, pasé mis manos por al rededor de su cuello y él me abrazó por la cintura, cada vez estábamos más cerca uno del otro.

Era increíblemente exitante estar en este lugar y en la situación, alumna, profesor, en su oficina a escondidas, besándonos, apunto de tener sexo.

Lamentablemente por muchas razones, nuestro momento fue interrumpido cuando alguien abrió la puerta, no separamos lo más rápido que pudimos, pero de todas formas era tarde, nos habían descubierto.

Baje velozmente de la mesa dando algunos pasos hacia Jorge, que tenía sus ojos cristalizados y no era capáz de decir ni una palabra.

- Jorge...- susurré suave acercando mi mano a su brazo y él la corrió.

- ¿Qué estás mierda haciendo Caro?- me preguntó con la voz quebrada.- Siempre tuve la razón.

No sabía que contestar, su mirada de desprecio me lastimaba y sólo bajé mi cabeza.

- Jorge puedo explicar...- decía Agustín, pero fue interrumpido.

- Usted no diga nada ¿Cómo puede estar con una alumna?- decía Jorge con rabia, como si fuera a golpearlo.

- Jorge cálmate por favor.- supliqué.- Él no me obligó a nada.

- Déjanos explicarte con calma, esto es delicado, yo de verdad la quiero.- dijo Agustín y aunque el momento estaba incómodo me hizo sonreír.

- ¡Cállate, mardita sea!- exclamó Jorge y dió un golpe en la pared que me hizo exaltar.

Agustín me tomó de la cintura por la espalda acercándome a él, Jorge estaba perdiendo el control y sinceramente creí que podría golpear a cualquiera de los dos.

- Qué tierno que la quiera y la cuide, veamos si el director piensa igual.- dijo saliendo y cerrando la puerta de un golpe.

Abrí la puerta con la mayor velocidad posible y salí tras él, mientras Agustín se pasaba las manos por el rotro hasta su cabello lamentándose.

- ¡Jorge por favor espera!- grité sin dejar de seguirlo.

- ¿Me engañaste con él?- preguntó furioso volteando hacia mi.

- No Jorge ¿Cómo crees eso?- decía cuando me interrumpió.

- De ti ya espero lo que sea.- dijo apretando su puño para contener la furia.

- Pero no puedes creer que te engañé, todo empezó hace muy poco.- dije acariciando su brazo para que afloje.

- ¡Carolina deja de mentir! Se de todo esto hace mucho, sólo esperaba que me lo dijeras sola.- dijo molesto.

- ¡¿Qué?!- exclamé asombrada.- ¿Cómo? ¿Cuándo?

- Siempre supe que te gustaba y tu también, aunque nunca lo quisiste asumir, pero pensé que nunca te daría chance, ni siquiera te miraba.- comenzó a decir.- Cuando fuí a tu casa por lo de tu cumpleaños, la camiseta me sonó familiar, creía que era de uno de mis amigos y por eso me lo escondias, pero cuando salí ví un poco más lejos el auto de Bernasconi y relacione todo.

- Jorge yo no se que decir, lo siento, tenías razón, pero no creas que te engañé o que no quería luchar por lo nuestro.- dije.- Sólo quiero pedirte que no digas nada.

- No voy a hacerlo Caro.- dijo con ternura, ya más calmado.- Pero no por cubrir al idiota de Bernasconi, sino porque te has esforzado mucho como para que te echen ahora.

- Gracias.- dije abrazandolo.- Te quiero tanto.

- Yo aún te amo.- dijo siguiendo mi abrazo y me alejé para verlo.- Y quiero que seas feliz aunque no sea conmigo, pero él Caro nunca te dará eso, sólo te dará sexo a escondidas.

- Jorge, ese no es tu problema.- dije bajando la mirada.

- Lo sé, sólo quiero que sepas que pudiste tenerlo todo conmigo y lo perdiste por un idiota, igual si necesitas algo o que te cubra puedes contar conmigo.- dijo asintiendo.

- Eres el mejor.- respondí en un susurró y nos abrazamos.

- Hasta luego.- dijo despidiéndose con la mano y caminó hacia la salida.

Agustín salió tras mi espalda y puso una mano en mi cintura.

- ¿Lo oíste?- pregunté sin mirarlo, conocía su mano lo suficiente como para saber que era él.

- Cada palabra.- respondió y no despegué mi vista de la puerta por la que Jorge había salido hasta unos segundos.

*Fin Flashback*

..........

Ahora Jorgito también lo sabe😱😨
Que creen que hará el ahora?🤔

Disculpen chicas por no actualizar antes🙏 vengo llegando de un fin de semana en la playa y no tenía señal😁

Espero les guste❤

Enamorada de mi profesor - AGUSLINAWhere stories live. Discover now