XXXIII

173 31 8
                                    


Nuestra primera cita oficial como pareja, Bert, fue en la misma plaza en dónde nos conocimos en persona por primera vez y lo recuerdo muy bien. Nos encontramos en unos asientos de la plaza junto a un local de videojuegos, nos saludamos como si fuéramos amigos y caminamos por ahí. Yo estaba demasiado nervioso, porque no tenía ni idea de cómo comportarme contigo y sabía que podías notarlo, Bert, aunque actuabas como si no lo hicieras realmente o quizá le restabas la importancia debida, pero ¿Cómo no estarlo? Eras mi primera pareja hombre.

Nos acercamos a Starbucks y ordenamos un café americano sin azúcar y un frappé de caramelo, tomamos asiento en una de las tantas mesas y comenzamos a platicar trivialidades. Pero como siempre, un tema llevó a otro, hasta que tocamos uno en particular que se nos tornó bastante interesante.

"Platícame más sobre cómo supiste que eras gay, háblame sobre Quinn" Comenté de la nada con cierto interés y mirando detenidamente el interesante mundo de mi vaso térmico de café, con el logotipo de Starbucks en él. Tenía cierta vergüenza de mirarte a los ojos, Bert, me ponías bastante nervioso en ese entonces.

"Uh bueno, básicamente mi mejor amigo me dijo que me presentaría a un chico del cual me enamoraría de inmediato" Susurró Bert en respuesta con una pequeña sonrisa divertida sobre sus labios delgados, para enfocar su mirada azul sobre mi persona, la cual sentía claramente y solo atinaba a sonrojarme "Me lo presentó y como lo había dicho, me enamoré de él. Pero Quinn no sentía lo mismo que yo, así que sufrí horrores por él, le rogué interminables veces para que me diera una oportunidad, pero no lo hizo. Nos besamos varias veces, pero para él, yo era solo un juego divertido" Contó de forma un tanto rápida, haciendo un pequeño ademán con la mano de forma despectiva, y entonces alcé la mirada para enfocarla en él. Tenía en su rostro una pequeña expresión melancólica, que me hizo sentir mal, además de que, con forme contaba su historia, los recuerdos de Frank llegaban a mi mente "De eso ya pasó un año, aunque aún recuerdo claramente cuando le llamaba muchas veces rogando un poco de su atención y bueno, iba a su casa a buscarlo también. Me humilló bastantes veces, pero como estaba enamorado de él, lo soporté. Ahora pienso que perdí un tiempo muy valioso dejándome pisotear por Quinn" Se encogió un poco de hombros, sonriendo ampliamente y ese acto iluminó su bonito rostro. Observé en silencio como tomaba su propio vaso térmico y se lo llevaba a los labios para tomar un pequeño sorbo de su café "Ahora simplemente no nos hablamos, y bueno, cuéntame acerca de cómo te diste cuenta tú".

"Eh bueno, fue por Frank, como ya te había comentado anteriormente" Murmuré rascándome ligeramente la nuca y desviando la mirada hacia otro lado, porque ese tema siempre me ponía de nervios y más aún porque lo estaba platicando con mi actual novio. No era un tema usual entre parejas, evidentemente "En resumen, nos besamos por un reto, a mí me gustó, comenzamos a actuar como si fuéramos pareja, me enamoré de él pero comenzó a alejarse de mí y cuando se lo confesé me dijo que tenía novia, y ahora ni si quiera nos hablamos" Resumí con una mueca extraña sobre mis labios pero me encogí de hombros para restarle importancia, también para que Bert no pensara que me importaba eso, pero sí, aún dolía y me sentía culpable por ello "Él fue el primer chico que me gustó".

"Vaya, eso es bastante frustrante" Soltó Bert, dejando escapar un pequeño suspiro por entre sus labios a la vez que su mirada azulina se mantenía fija en mi rostro, como si me analizara lentamente, todavía.

"Lo sé" Asentí con la cabeza repetidas veces pero después sonreí un poco para volver mi mirada hacia mi actual novio "Pero da igual ya" Le resté importancia nuevamente con un ademán despectivo de la mano, mintiéndole a Bert y también mintiéndome a mí mismo, porque en verdad quería que me diera igual el asunto.

Cuando nos aburrimos de estar en aquella plaza, nos dirigimos hacia el parque que estaba cerca de ahí. Caminamos, durante unos minutos, por el interior de éste, explorando el lugar como si no lo conociéramos de memoria, hasta que, llegamos a un escondite entre árboles y rocas que nos pareció acogedor. Nos sentamos en silencio, pero un silencio bastante cómodo que se creó, en lo que ambos nos sumíamos en nuestros propios pensamientos. En ese momento, pensé que toda la situación era extraña, primeramente porque ninguna pareja en su primera cita oficial hablaba sobre sus ex's amores y en segundo lugar, bueno, no parecíamos una pareja, solo dos buenos amigos pasando el rato.

"Gerard" De repente, Bert me llamó, con un tono bastante suave, y entonces regresé mi mirada hacia él con interés. Pude notar en ese momento que su mirada segura se había trasformado en una bastante apenada y titubeante, lo cual me extrañó bastante "¿Te puedo besar?" Preguntó mirándome de manera intensa, clavando sus orbes azules en los míos y acercando su rostro un poco al mío.

"Uh yo-o..." Su cuestión me había tomado totalmente por sorpresa, por lo que no supe cómo reaccionar en ese momento, más que solo abrir los ojos a más no poder y tartamudear palabras incoherentes. Muchos pensamientos cruzaron por mi mente en esos segundos "¿No?" Aquellas palabras salieron sin querer mientras la inseguridad me carcomía por dentro. En primer lugar, me sentía bastante cohibido ante Bert, porque él tenía más experiencia en el asunto que yo, y temía mucho que un beso mío no le fuera suficiente.

Su expresión fue completa de decepción, desconcierto y un tanto de sorpresa ante mi respuesta insegura, pero mantuvo la calma "¿Por qué no? Somos novios ¿O no?" Murmuró, tomando mis manos entre las suyas con un ligero tono de confusión en su voz, lo cual me hizo sentir un poco mal.

"Es que bueno... Yo-o no lo sé, nunca he besado a otro chico, no tengo experiencia en ello" Dejé escapar aquellas palabras de manera titubeante y con el nerviosismo creciendo dentro de mi cuerpo. Pero sin que me lo esperara, Bert comenzó a acortar la distancia entre nuestros rostros, por lo que me alarmé "Espera, Bert, no, no" Susurré rápidamente, haciéndome hacia atrás. El me miró durante unos cuantos segundos pero volvió a acercarse a mi rostro, por lo que volví a alejarme un poco, provocando que perdiera el equilibrio y que mi espalda chocara contra el césped. Bert se colocó encima de mí y tomó mi rostro entre sus manos con firmeza, aunque yo seguía forcejeando "Bert, en serio yo no-o" Pero antes de que pudiera protestar aún más, sus labios se unieron a los míos.

Recuerdo que sus labios eran bastante suaves y se movían a un ritmo bastante placentero. Mis parpados pesaron en ese momento y se cerraron automáticamente, permitiéndome disfrutar del dulzor de sus labios y el interior de su boca. Mis propios labios temblaban inexpertos, al no saber cómo seguir el beso, pero aun así me dejé llevar por Bert y de cierta manera, lo disfruté con demasía. En ese beso me di cuenta de que en verdad me gustaba besar a un chico y eso me hacía bisexual, o quizá gay completamente, porque no era cosa de que solo me ocurriera con Frank.

Fue una extraña realización de mi identidad sexual y todo gracias a ti, Bert.

It's better off this way; frerard; gerbert.Opowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz