Demasiados descubrimientos.

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Las fotos estaban esparcidas por la mesa. Por una extraña razón no podía apartar la vista de esas imágenes, era una prueba bastante fiable de lo que había ocurrido aquella noche. En algunas se veía gente sangrando y aterrada tras nosotros, en otras se veía como corrían para salir de ahí.  Pensé en cuando tomaron las fotos, fue minutos antes de que escucharamos la sirena. Llevaban tiempo observandonos, dedujo mi subconsciente, ¿nuestra madre nos espiaba?

En ese momento el salón estaba en silencio. Seguramente fuera posible escuchar como una mota de polvo se posaba en el suelo. Mi madre nos observaba esperando una respuesta, ¿como explicarle a tu madre que has ido a una fabrica en ruinas para ver como tu hermano y tus amigos se pelean contra otros chicos, o entre sí? ¿como decirle que todo eso terminó en una pelea todos contra todos y que podríamos haber salido bastante mal parados de aquel tiroteo con botellas? Ella se alteraría muchisimo. Y lo peor era que siquiera sabía por qué había ido allí, hubiera preferido cien veces quedarme en casa que haber acudido a esas peleas.

- Mamá - susurró Tyler observando las fotos detenidamente - creo que ya sabes porque estabamos allí.

- Puede que sí, pero prefiero que me lo digais vosotros - el tono de Alison era brusco y amenazador, pero su forma de retorcer el pañuelo que tenía en las manos dejaba ver que estaba insegura.

- Mamá... - me quedé a media frase, no sabía que decir.

- Mira, Zoe no tiene nada que ver - dijo mi hermano levantandose y dirigiéndose hacia Alison - ella estaba allí de público. Chris, Lucas y yo fuimos a pelear pero algo salió mal y...

- ¿A pelear? - preguntó mi madre alterada cuando Tyler estaba a un paso de ella - ¿te aburres tanto Tyler? ¿o tienes problemas en la escuela?

¿Qué se esperaba ella que fuese?, pensé mirandola de arriba a abajo.

Mi madre tiraba del pañuelo preocupada mientras se alejaba de su hijo.

- No mamá, no es eso - Tyler se tensó.

- ¿Entonces? Explicame por qué peleas.

- Yo... - las manos de Tyler comenzaron a temblar -yo peleo para conseguir dinero - esto último lo dijo en un susurro.

- Me podías pedir a mi el dinero - le acusó mi madre - ¿te metiste en algún lio? ¿te chantajean? ¿o querías alguna motos? ¿o aquellas botas que te gustaron tanto?

- No, mamá, yo... - mi hermano vaciló, estaba totalmente pálido y sus ojos buscaban por la habitación alguna salida.

Me echaba miradas y después volvía la atención hacia mi madre o a algún objeto de la habitación. El temblor de sus manos aumentó e incluso se podía ver el brillo del sudor en sus manos y en su frente. ¿Para que quería el dinero? ¿Para comprar alcohol, contratar prostitutas o..?

- No, no puede ser - Alison estaba pálida como la cal mientras comenzaba a andar de un lado para otro - no, otra vez no.

Mis pensamientos seguían buscando alguna utilidad para el dinero que ganaba Tyler en sus apuestas, pero al ver la reacción de mi madre y que Tyler no negaba absolutamente nada comprendí lo que pasaba. Los nudos en la garganta que dehizo el beso con Chris volvían a atarse, esta vez más fuerte. Comencé a temblar y a recordar todo lo ocurrido aquel verano, solo habían pasado dos años pero lo recuerdo todo con exactitud.

Mi madre y yo, que en aquel entonces yo tendría catorce años, caminábamos por uno de los peores barrios de la villa. Todo estaba oscuro y lo único que se veía en las calles era basura, alguna prostituta que otra, los carteles de neón de los antros y vagabundos con sus cartones. Habíamos ido a ver a una amiga de mamá que había perdido su empleo de secretaria en una gran empresa y con ello había perdido su casa en el centro de la ciudad teniendo que trasladarse a una casa que su salario de dependienta en un "todo a cien" pudiera pagar. Mi madre acababa de separarse de papá e iba a visitar a su amiga para intentar no deprimirse tanto. En esos días no me apartaba de su lado, ya habían decidido con que hijo se iba a quedar cada uno, cosa que también afectó mucho a Tyler por que no quería separarse de mi y de papá.

¿Quererlo? No lo sé.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora