¿Una cita?

16.8K 655 7
                                    

Lucas.

El coche estaba en silencio, mis manos seguían con el maldito temblor y yo no podía concentrarme en nada. Me costó bastante dejar a Zoe en su casa, entre su testarudez y mis necesidad hacia ella en ese momento nos había llevado como media hora despedirnos.

Frenamos al principio de un callejón y nos bajamos del vehículo. Hacía demasiados días que no pasaba por allí, y Tyler ya era un completo desconocido entre los contenedores de basura. Caminamos hasta llegar al fondo donde tres tíos nos esperaban. Todos plagados de tatuajes y ropa desgastada y ancha. Sí, eran las personas que buscábamos.

- Hey, Jake - le llamé.

El rubio se dio la vuelta y me dio una sonrisa.

- Pero mira quien ha aparecido - dijo con voz ronca. El tabaco y las drogas estaban acabando con su garganta -. Pensé que lo habías dejado.

- Aún no tienes la suerte de librarte de mí - sonreí.

Cuando nos acercamos Jake pidió que sus dos acompañantes se fueran y estos obedecieron sin rechistar. Cuando se cruzaron con nosotros el olor a maría inundó mi nariz.

- ¿Por qué tardaste tanto en venir? - me reprochó al verme.

- Damien - suspiré.

Jake puso mala cara y sacó mi ración del bolsillo.

- Ten cuidado, sabes que siempre va a joderte. - Me tendió la bolsa -. Guarda bien tus espaldas y no dejes ningún frente abierto, intentará atacarte por cualquier parte.

Mi mano tembló aún más al pensar en Zoe. El muy cerdo ya lo había intentado y lo volvería a hacer. Las ganas de regresar a su casa me invadieron, no quería que estuviese sola.

- Anda, fumatelo y vámonos - me alentó Tyler.

Saqué las papelas de mi bolsillo y comencé a liar el porro. Mis ansias iban en aumento y no atinaba casi a mantener las hebras en su sitio. Cuando lo conseguí me lo llevé a la boca, lo encendí y exalé todo lo que pude.

Oh, sí. Esto me gusta, susurró la vocecilla.

El humo ya me rodeaba. Cada calada me hacía sentir un poco mejor, no llegaba a estar colocado debido a mis años de drogadicto pero la verdad es que me sentía bien.

Los recuerdos llegaron a mi memoria mientras el humo se deslizaba por mi garganta. Los recuerdos de como había empezado todo.

*Flashback *

Jake y yo caminábamos por las calles de la villa. El sol de primavera me daba en toda la cara y eso me molestaba, intentaba taparlo con la mano pero el brazo se me cansaba poco después y tenía que volver a bajarlo.

- ¿A dónde vamos? - pregunté molesto.

- Ven y calla.

Agaché la cabeza y seguí a mi amigo. No había dormido bien, mi padre no había dejado de atormentarme desde su muerte. En los sueños, los recuerdos, la tristeza... Me mordí el labio al pensar que tendría que terminar la maqueta del tanque yo solo. Mis ojos se inundaron de lágrimas al saber que nunca lo volvería a ver.

- Esto te va a ayudar.

Miré a Jake y me di cuenta que estábamos en un bosque, a las afueras de la villa.

- ¿El qué? - pregunté curioso secándome las lágrimas con disimulo.

De su bolsillo sacó un papel enrrollado en forma de cilindro. En su interior podía ver cosas marrones y verdes, lo miré extrañado.

¿Quererlo? No lo sé.Where stories live. Discover now