-Algo que decir?
-Sí, le conocimos a la salida del concierto, estaba en el mismo hotel que nosotros, no sabía volver y le tuvimos que acompañar. Hicimos migas y pues ya estaría.
-Ya, y la sonrisa tonto que me llevas?-Sam le dió un breve golpe en el brazo, cosa que agradecí porque cambiaron a un tema de conversación en el que no participé.
Desde que recordé otra vez a Jaime no sale de mi cabeza, fue un cabrón conmigo pero me colé por él como nunca antes por nadie.
Cambié de pensamientos para centrarlos en él. En su pelo, su voz, su personalidad, en su tono de piel, su sonrisa. En Agoney.
Realmente me molestaba a mí mismo pasar tanto rato pensando en él porque le conocía de 2 días.
-Eh, que te suena el móvil, empanao.
-Pensando en, Agoney era, no?—Álvaro continúa en la línea de picarme
-Sí, Agoney—y Sam parece que se pasa de bando, que par de cabrones.
Cogí el móvil haciendo que cerrasen la boca, porque mi hermano me conocía mucho, tanto que él sabía en qué pensaba y yo la que me esperaba a llegar a casa.
-Raoulíiin!! ¿Qué tal el concierto? ¿Has conocido a alguien? ¿Lo pasaste bien?—la voz de Aitana retumba al otro lado de la línea.
-Bien, sí y fue lo mejor.
-Me alegro y, ¿a quién has conocido? ¿Es guapao?-dijo mezclando la a con la o-¿Dónde vive?
-Por favor, Aiti-me río por la reacción de Aitana, mi mejor amiga desde pequeños-se llama Agoney-la sonrisa en mi cara empezaba a ensancharse-es guapo, la verdad, y es de Tenerife pero vive en Badalona.
-Te conozco lo suficiente como para saber que estás sonriendo como un tonto y que ese chico está volviendo a sacar sentimientos a flote-me conocía.
-Ay, Aiti, me quedan 5 minutos para llegar a casa, vienes?
-Nos vemos, rubio.
-Te quiero, nos vemos-colgué y negué con resignación, acabaría contándoselo, pero lo necesitaba.
-¿Aitana?
-Venga campeón, luego me dices con el tintao, que se te ve la pluma con Aiti-mierda, recordé lo que me dijo en la habitación del hotel-vale no, es cierto. Lo del hotel-Álvaro nos miraba raro pues no entendía nada-ya me contarás.
-No, ya me contaréis-rectificó.
Sam y yo sabemos que acabaremos contándolo todo en una noche de las que tanto nos ayudan a los tres. Noche de serie, peli y contarnos todo.
Llegamos a casa y justo al entrar Aitana me salta encima en un abrazo, llevamos unas semanas sin vernos porque estuvo de viaje en Los Ángeles.
-A la próxima vez que vaya te vienes.
-Si si, ahora vamos a la habitación y me cuentas qué tal por allí.
Una vez en la habitación se tumbó en mi cama y yo en el puff al lado.
-Creo que vamos a hablar de lo mismo, así que empiezo yo, que lo tengo más asumido dado que tú muestras lo contrario-asentí-como sabes soy muy torpe, pues bien, me choqué con una chica, muy mona-la miré sorprendido porque creo que sé por dónde va-calla, pensé que no la volvería a ver y fuimos a facturar las maletas pero sí, allí estaba. Me quedé embobada y casi se me pasa mi maleta en la cinta, me avisó mi prima. Acabamos sentadas con ella, con el mismo destino y el mismo hotel. Es alucinante, la situación, digo y ella es de Gavá. Me encanta y sí, nos liamos en Los Ángeles. Osea que sí, soy bisexual y Nerea, la chica, me encanta.
-Vale, no me lo esperaba. Para nada eh.
-No? Pues ahora cuenta lo tuyo.
-Le conocimos cuando acabó el concierto, estaba instalado en el mismo hotel, es guapísimo y esta mañana quedamos con él para tomar algo. Canta de lujo, es que te deja sin peluca-Aitana se rió por mi forma de expresarlo-estoy volviendo a la historia de Ibiza y joder tengo miedo. Y si me hace mierda como Jaime? Y si me enamoro de verdad y luego las paso canutas? Joder, Aitana, es que están volviendo todos y cada uno de los sentimientos y miedos que sentí allí, y no quiero.
-Oye-dijo apenada-lánzate, déjate sentir y no pienses en lo malo. Ibiza, Jaime y aquello es pasado, ahora viene lo mejor-me abrazó fuerte-vas a triunfar con el tinerfeño.
-Te quiero-dicho esto empezamos a ver Stranger Things, aunque yo prefería Sense8.
Nos vimos 3 capítulos y Aitana se marchó a casa para deshacer las maletas al completo.
-Abajo, amigo, Álvaro nos espera para una larga noche—dijo Sam abriendo la puerta de mi habitación.
-Me voy a poner el pijama, esperadme en el salón-y eso hice, me puse el pijama y bajé.
Como todas las noches de siempre, vimos una película, esta vez vimos "Love, Simon" la eligió Álvaro y hacia la mitad de la película entendí porqué esa película.
La acabamos y tomó la palabra Álvaro.
-Empezaré yo, porque los tres tenemos algo que contar y vosotros no tenéis prisa. Estoy con una chica-pegué un grito de sorpresa-tranquilo, llevamos un mes y es genial, modelo, cantante, andaluza, preciosa, graciosa, simpática y la quiero.
-Pero quién es?
-Mireya.
-Rubia?-asintió-altilla?-volvió a asentir-mi amiga?
-Ajá.
-Que cabrones, me alegro tete, cuidamela, eh-le di una pequeña colleja, le abracé y después mi primo.
-Bien, ahora vosotros-Sam y yo nos miramos, me tendió la mano apretándola suavemente.
-Vale, empiezo yo. Fui a Razzmatazz con Rafa, Lorena y los que nos hablamos de baile. Hubo un momento que me perdí y coincidí con Albert. Empezamos a beber y a tontear, acabamos liándonos en un baño. Él también es bailarín y creo que estuvo en fama a bailar. Me hizo ilusión y todo. Llevamos un mes y medio hablando y de lío. Vaya, que soy gay o al menos bisexual, y Albert me está empezando a gustar, no sólo atraer.
-Joba, no me lo esperaba. Me alegro un montón primo-se dieron un apretón de manos y un abrazo, yo hice lo mismo.
-Dale primo-me tendió la mano y la apretó, dándome ánimo y empujándome a lo que estaba punto de contar a mi hermano.
