LA GUERRA DE LOS ELEMENTOS (TERMINADA)

Rumbo al reino de agua

 
 Isla de las sirenas

Un nuevo día había llegado a la isla de las sirenas, Hiccup y sus amigos se habían levantado desde que el sol alumbró la isla. Estaban apurados, el plan era partir rumbo al reino de agua lo más pronto posible para llegar antes del anochecer, así tendrían oportunidad de buscar un refugio y también de pensar en otro plan para hablar con el gobernante de esa tierra.

Para prevenir cualquier tipo de percance durante el trayecto, Hiccup le hizo a Toothless una prótesis mucho más resistente a la anterior y que resistiría las impetuosidades de cualquier tormenta que pudiera llegar a sorprenderlos.

En cuanto a Astrid, desde que había hablado con la anciana Gothi estaba muy inquieta y silenciosa, y constantemente se debatía consigo misma sobre lo que era lo más apropiado para ella y sus acompañantes.

"Debes decir la verdad."

Las palabras que había dicho el cuervo por la anciana aun retumbaban en su mente, miró de reojo a su antes enemigo, ahora aliado, posible amigo y algo más; que lucía tan tranquilo y ajustaba la silla de montar de Toothless quien ya estaba en su forma de dragón. ¿Y si le decía la verdad? Los dedos de las manos le hormigueaban de sólo pensarlo.

— ¿Astrid? —Escuchó una voz conocida a su lado.

Era Stormfly, quien la miraba con cierta picardía, la había atrapado viendo a su aliado, con cara de idiota de seguro, pensó.

—Ya está todo listo. —Avisó entre risitas. —Y también ya me despedí de todos.

Detrás de la dragona se venía acercando la anciana Gothi a pasos lentos junto con su cuervo, el tímido gigante, los duendes chismosos con los que habían hablado Hiccup y Toothless, así como unas curiosas hadas, unicornios y otros animales.

—Entre todos protegeremos la isla, Stormfly. —Dijo el cuervo con animosidad en lugar de la anciana Gothi.

—Sí, nosotros proteger isla. —Prometió el gigante con una mano en el pecho.

— ¡Muchas gracias amigos! Se los encargó mucho. Nos vemos —Se despidió Stormfly con una sonrisa antes de empezarse a transformarse en dragón.

Estando ya lista, Astrid la montó, al igual que Hiccup montó a Toothless y estando los cuatro listos se volvieron hacía el montón de criaturas y anciana, para despedirse nuevamente.

—Que los dioses protejan su camino, estaré rezando para que todo lo que se propongan salga con bien.

—Muchas gracias señora Gothi. —agradecieron Hiccup y Astrid con una leve reverencia.

—Y muchacha recuerda también de lo que hablamos. —pidió discretamente Gothi a la neutral, quien se encogió desde su asiento por no saber qué responder y hacer.

— ¿Algún último consejo más que nos pudiera dar? — preguntó Hiccup sin notar la incomodad de su aliada.

—¡Claro! Manténganse siempre juntos y cuida mucho a la princesa...

El sabio consejo de la anciana hizo que tanto Hiccup como Astrid se sonrojaran como un par de tomates, que ocasionó unas risitas internas en Stormfly y en la misma anciana al ver al par de tímidos y orgullosos muchachos.

—También le di instrucciones a Stormfly para que les enseñe una que otra cosa que estoy seguro les servirá de mucho, eso es con todo lo que les puedo ayudar. —continuó el cuervo por la anciana, una vez que esta dejó sus risitas discretas.