Epílogo

31 7 7
                                    

Elena

Se preguntarán que ha pasado. Pues bueno. Ha pasado casi un año desde aquel día tan intenso y lleno de emociones para mi. Les cuento que me va bien trabajando con Luis, quien se ha convertido en mi mejor amigo, ahora es más que solo un compañero de departamento. Y no, aquellos encuentros tan íntimos no han vuelto a suceder, pues entendimos y acordamos que era mejor estar solo como amigos y nos ha funcionado de maravilla. Para ser sincera Luis solo fue para mi alguien por quien me dejé llevar del momento y ¿Qué chica en su sano juicio no se dejaría llevar de tremendo pedestal de hombre?. Pero bueno, ese no es el caso. terminé la secundaría, aunque me atrasé muchas clases logré ponerme al día estudiando hasta en mi tiempo de trabajo, días sin dormir. Todo para no tener que repetir el año. Y pues bueno. Iré a la universidad dentro de unos meses, me tomaré un descanso de los estudios. Les confieso que en mi amor por la lectura leí un libro para enteder las personas y de esa manera ser más feliz. Me encantó y bueno, lo pongo en practica día a día. Mi amor por la música no ha caducado, aún soy esa chica que hasta para estudiar necesita alguna melodía musical. ¿Cómo lo hago? Pues no se, solo me ayuda a relajarme y tener mejor concentración.

Mi familia, pues con mi padre no nos hemos dirigido palabra alguna y a decir verdad extraño cada cosa que haciamos cuando era más pequeña. Extraño sus abrazos. Pero me conformo con saber que está bien. No me he descuidado de él. Cuando envió dinero a casa, una parte es para él. Para combustible o algún gusto que se quiera dar. Lo mismo para mamá y mis hermanos, ya que la paga del bar es buena sin incluir la propina que dejan la mayoría de los clientes. No me puedo quejar. Continuando con el tema de mis padres. Con mi madre, la visito cada que tengo oportunidad y la pasamos de lo mejor. En ocasiones mi padre está en casa y siento su mirada sobre mi pero me hago la desentendida. Creo que es lo mejor ya que cuando hablamos, lo hacemos por obligación y acabamos discutiendo.

¡Pero ni al caso!

Mariana, pues hace pocos días fue a visitarnos a Luis y a mi y fue muy grata su visita. Su familia ha ido mejorando cada día más y ya no están asistiendo a terapia familia. Han aprendido a llevarse mejor sin la necesidad de que alguien les diga que hacer y como hacerlo. Cuando estoy en el pueblo, Mariana y yo visitamos aquel parque donde tenemos tanta historia. Aquel parque que creíamos único para cada una, pero que nos unió aún más, que sé convirtio en nuestro lugar. Aquel lugar que nos vio reír, luchar por no dejarnos caer, pelear llorar, pero sobre todo nos vio crecer juntas como persona. Y eso es lo que importa porque en el día de mañana recordaremos lo vivido, nuestras creencias y actituded y caeremos en cuenta que ése, siempre será nuestro lugar especial.

Diego, a fin de cuentas tomo una decisión entre ambas chicas. Y no, no fui la elegida, por desgracia. Pero mi amiga lo ha rechazado cientos de veces alegando que no quiere estar con alguien que no la valore. Y tiene razón. El amor es algo hermoso cuando es correspondido y no debemos ensimismarnos tanto en alguien que dice queremos pero que sus hechos dicen lo contrario. Por lo que he sabido el chico ahora va de chica en chica buscando satisfacer o llenar aquel vacio que le ha dejado mi amiga. El día de nuestra graduación lo vi a lo lejos y estaba muy guapo. Pero bueno, el caso es que ninguno imaginaba que esto llegaría a éstos términos. Que el chico quedará solo, que me iba a valer por mi misma o que mi amiga diera el cambio que dio.

¡En fin! Solo somos adolescentes viviendo la vida que nos toco aceptar. Solo somos chicos normales viviendo una vida normal.



Mis queridos lectores, ya llegamos al final.

Ya habrá un apartado para los agradecimientos, pero queria darles las gracias por acompañarme en ésta travesía.

¿Quién lo diría? Ya he terminado mi primera historia.

Mil gracias. 💕😍

Adelantada al tiempo Where stories live. Discover now