harry potter || one shots y fragmentos

𝙩𝙝𝙚𝙤𝙙𝙤𝙧𝙚 𝙣𝙤𝙩𝙩

(editado)

—¿Vas a negarme entonces que eres un mortífago? ¡Por algo el profesor Slughorn no te llamó! —gritó enfadada Lisa mientras apuntaba con su varita directamente al pecho de su amigo.

—No serías capaz de atacarme, Lisa.

—Pruébame. 

Theodore agarró con cuidado la mano de su amiga y fue alejándola lentamente hacia abajo. Lisa se encontraba agitada con sus mejillas sonrosadas. Nunca había sido capaz de enfrentarse a Theo, pero aquella ocasión lo ameritaba. Estaba cansada.

—Antes de ver las cosas malas en los demás, ¿Por qué no te fijas un poco en ti? Das vergüenza, Elizabeth.

Aquellas palabras penetraron en lo más profundo del corazón de la muchacha. Theo jamás la había tratado así y mucho menos le había dicho algo de ese estilo.

—¿De qué hablas? —preguntó en un hilo de voz. Intentó levantar su varita nuevamente, pero la mano de Theo la sujetaba con fuerza.

—¿Y qué si soy un mortífago? Te la pasas con esos de Gryffindor deshornado a las serpientes, a tu casa. ¿Por qué crees que nadie te habla? Porque nadie quiere que le manches la reputación.

Lisa sintió un escalofrío por todo su cuerpo.

—Gracias a mi estás donde estás, Cassel, y no deberías levantar tu varita contra mí nunca más.

Los ojos de Nott atravesaban su alma. Lisa continuaba temblando, pero ya no era por coraje, sino por miedo.

—¡Eres un...

—¿Un qué? —la interrumpió—. Todos saben que tus padres traicionaron a lord Voldemort y acabaron como debían, muertos.

Las lágrimas de Lisa no soportaron más y decidieron escaparse de sus ojos. Theodore notó entonces lo que había hecho, pero era muy tarde. Lisa se soltó de su agarre.

—¡Desmaius!

Theo voló hacia atrás golpeando su cabeza contra la pared. Estaba muy desorientado, pero seguía consciente.

—Antes de tener un amigo como tú, prefiero deshonrar a mi casa, Nott.

Un poco de sangre salía de la cabeza de Theodore, pero Lisa no tenía tiempo para preocuparse por él, aunque deseaba pedirle disculpas y curarlo. El amor que sentía por su amigo era inmenso, tan así que quería protegerlo de todo, pero no iba a ser posible.

—¿Por qué, Lisa? —preguntó intentando reincorporarse—. ¿Qué quieres?

—Venganza.

Harry, Ron, Hermione y Lisa se encontraban en la biblioteca observando el libro de pociones que Harry había conseguido.

—Es raro que estuviera en la repisa y Snape nunca lo hubiera visto, ¿No creen? —preguntó Lisa mientras lo revisaba—. Es como dejarles a los alumnos la posibilidad perfecta de copiarse en las pruebas.

En ese momento en la biblioteca habían entrado Malfoy, Zabini y Nott —este último con una venda que había le habían colocado en enfermería—. Se sentaron unas mesas más allá que ellos y parecían muy sumidos en su conversación porque ni siquiera prestaron atención que Lisa se encontraba con los Gryffindor.

—Aún no entiendo por qué no fuiste castigada —susurró Hermione mirando a Nott.

—Theo no dijo que fui yo. Comentó que había estado practicando un hechizo y le salió mal provocando que lo empujara contra un estante.

—Para mí gusta de Lisa, ¿No creen? —preguntó Ron observando a la mesa contraria. 

Theodore los miraba de soslayo.

—No digas tonterías, Ron —dijo Hermione—. Si gustara de ella no la hubiera tratado de esa manera.

Lisa intentó dejarle de prestar atención a la conversación y miró a Nott. Ahora la miraba sin ningún pudor.

"Tengo que hablar contigo" dijo moviendo los labios. Lisa asintió y siguió observando aquel libro de pociones.

—Ten cuidado —le dijo Harry—. Cualquier cosa aquí estamos.

Habían salido de una clase de pociones donde Harry había sobresalido como lo hacía últimamente.

Lisa hizo su trayecto habitual hasta la sala común de Slytherin, pero un brazo logró atraparla y la metió dentro de un aula vacía.

—¡Nott! —gritó asustada.

—Deja de llamarme así.

Theo seguía con la venda en su cabeza y lo hacía lucir más tierno de la habitual. Lisa se regañaba internamente de querer abrazarlo porque ese chico le podía demasiado. Los ojos de Nott la miraban de cerca y ella sentía que todo su cuerpo temblaba.

—Si querías hablar hazlo ahora. No tengo mucho tiempo —dijo firme.

Theodore la soltó lentamente y se alejó un poco para observarla mejor.

—Quería decirte que lo siento.

—Bien.

Nott esperaba otra reacción, Lisa estaba muy segura de eso.

—¿Sólo dirás bien?

—Sí, porque sé que no lo sientes realmente. Sé que piensas todo aquello que dijiste, Theodore y no voy a culparte por eso.

El muchacho relamió sus labios, nervioso, y Lisa deseaba que no lo hubiera hecho. Esos días distanciada de él habían bastado para darse cuenta que lo quería a Nott y no sólo como amigo.

—No lo pienso realmente. No soy un mortífago, Lisa. Slughorn no me llamó porque sabe que a mi padre lo encerraron en Azkaban y no quiere tener nada que ver con ese tipo de gente —dijo rápidamente mostrando sus brazos para que su amiga viera que no tenía la marca tenebrosa—. No estaba pensando con claridad. Estoy molesto con Potter porque hizo que mi padre fuera encarcelado y lo extraño, Lisa, demasiado.

—¿Y te piensas que yo no extraño a mis padres?

—¡Claro que sé que los extrañas! —exclamó nervioso mientras se acercaba nuevamente a Lisa y la tomaba de las mejilla—. Yo estuve contigo cuando los asesinaron, sé lo que sufriste y fui un idiota por decirte aquellas cosas horribles. Entiendo que no quieras saber más nada de mí. No, no llores...

Empezó a limpiar las lágrimas rebeldes que se escurrían por las mejillas de la muchacha.

—Quiero vengarlo, Theo, es lo único que quiero. No era mi intención ser una deshonra para Slytherin, ni que tú me vieras como una vergüenza...

Los fríos labios de Theodore atraparon a los de Lisa quien cerró los ojos rápidamente disfrutando del momento.

—No te veo como una vergüenza, Lisa —susurró en sus labios—. Haría todo por ti.

—¿Hasta ayudarme a vengarme?

—Cualquier cosa.