The Daily Task of Preventing My Disciple from Turning to the Dark Side

Capítulo 38 (Parte II): Mirando los delgados labios justo frente a sus ojos...

Capítulo 38 (Parte II): Mirando los delgados labios justo frente a sus ojos, finalmente no pudo contener el impulso...

Cuando regresó Gu Yunjue, un niño Dao, con una botella de jade en la mano, estaba a punto de llevar las píldoras de desintoxicación al Pico Principal. Al enterarse de que Mu Chen había salido de la sala de preparación de píldoras, se dio la vuelta y fue al manantial espiritual detrás de la montaña. Como era de esperar, la figura familiar estaba ahí, rodeada de nieblas.

Al percibir la llegada de Gu Yunjue, Mu Chen se levantó, levantó las manos y se puso la ropa interior nevada antes de salir volando del agua, su cabello mojado se secó con su poder espiritual y colgó suavemente detrás de sus hombros. Dio un paso descalzo sobre un muro de piedra negro, mostrando claramente sus tobillos perfectos, exquisitos dedos de jade y uñas de color rosa claro. Cada uno de sus pasos parecía pisar el corazón de Gu Yunjue, suavemente, lo que lo indujo a un impulso de sujetarlos y acariciarlos.

"Maestro, ¿cómo puede caminar descalzo?" Gu Yunjue reprimió el deseo en sus ojos, se acercó y abrazó la cintura de Mu Chen. Después de bañarse, al cuerpo de Mu Chen no le quedaba más que su olor original. Gu Yunjue olfateó con avidez y pego su pecho a la espalda de Mu Chen. La temperatura familiar acababa de pasar a través de la delgada ropa interior entre ellos. Con sus olores mezclados en el aire, Gu Yunjue no pudo evitar besar secretamente el hombro de su Maestro. Se esforzó por ocultar la prisa en su voz: "Este discípulo pondrá los zapatos por el Maestro".

Mu Chen estaba a punto de rechazar cuando su discípulo crecido simplemente lo inmovilizó en la silla, se agachó y tomo su pie... Mu Chen finalmente aceptó esta devoción, pensando que el pequeño discípulo era tan filial.

Gu Yunjue acarició los dedos de los pies del Maestro, sintiendo las puntas un poco frías. Luego los tomó en sus manos y los frotó íntimamente, mirando a Mu Chen con ojos inocentes: "El Maestro de Fu Haolong dijo que ahora no podrá enseñarle más y quería cambiar un Maestro para él, pero su propuesta fue rechazada por el Hermano Mayor Maestro de Secta".

Mu Chen fue distraído por estas palabras, inclinando la cabeza y mirando a su propio discípulo con dudas, '¿Por qué cambiar de Maestro desde que el discípulo ha sido criado?' Sin embargo, no notó que sus pies en las manos del pequeño discípulo habían sido acariciados por todas partes.

"Si algún día me vuelvo aún más fuerte que el Maestro, ¿el maestro me desechara?" Gu Yunjue recogió los zapatos de Mu Chen. Aunque parecía que preguntó sin intención, en realidad esperaba la respuesta de su Maestro. Su movimiento fue bastante lento, por lo que no ayudó a Mu Chen a ponerse el zapato hasta que sintió que el pie de Mu Chen se calentaba gradualmente en sus manos.

Mu Chen miró el cabello del pequeño discípulo, sonriendo: "¿Desecharte? ¡Ja! El Maestro ha gastado tanto tiempo y tesoros para criarte. ¡Qué gran pérdida sería para mí descartarte! Este Maestro nunca creyó en tonterías como 'la pérdida es una bendición'. Nunca aproveche las pérdidas de otros y no permitiré que otros tomen las mías por turno. ¡Siempre serás mi propio discípulo!"

"Como el Maestro ha dicho eso, este discípulo está muy aliviado". Gu Yunjue sonrió con satisfacción. Luego se detuvo sobre el otro pie de Mu Chen y solo mordió la parte superior antes de que Mu Chen tuviera un segundo para reaccionar, simplemente dejando varias marcas de dientes en él.

"Tú..." Mu Chen quería patearlo.

Gu Yunjue se rio entre dientes: "Las marcas de los dientes dan testimonio. ¡El Maestro no puede retractarse de sus palabras!"

Sintiéndolo tan pueril, Mu Chen se movió ligeramente en el pecho del pequeño discípulo, continuamente por algunas veces.

'¡Un niño tan travieso deberías morder a tu Maestro! ¡Pisare sobre ti!'