The Daily Task of Preventing My Disciple from Turning to the Dark Side

Capítulo 54: ¡Yo lo crie! ¡Él es mío!

Capítulo 54: ¡Yo lo crie! ¡Él es mío!

A lo lejos, los cultivadores que tenían la intención de acercarse fueron arrojados al suelo por la abrumadora onda sonora de las tres palabras.

Gu Yunjue, menos influenciado y bajo el escudo de la Campana del Alma de Protección, solo le frunció el ceño. Mientras que la reacción de Mu Chen fue bastante interesante.

Aunque el cultivo de Mu Chen era dos niveles más bajo que el de Nébula Arhat, parecía no haber sentido presión. En cambio, su atención fue atraída por las palabras, Mu Chen condujo su espada a través de la garganta de Nébula Arhat en ese instante.

El horrorizado Nébula Arhat miró a los ojos de Mu Chen, sin creer que Mu Chen fuera inmune al ataque de Etapa de Inmortalización hasta que se dio cuenta de algo. Abrió la boca y aparentemente pronunció dos palabras sin sonido. Pero antes de terminar su discurso, Mu Chen lo decapitó con un solo golpe de su espada.

"¡Cómo te atreves!", Gritó furiosamente el hombre de cabello blanco, extendiendo su mano hacia Mu Chen en un intento por salvar el alma divina de la víctima.

Al escuchar esta enojada reprimenda, Mu Chen levantó las cejas. Luego lanzo el Fuego Oscuro de los Nueve Yang al cadáver, expulsó el alma divina oculta y la pisoteó sin piedad.

Provocado por la ira, el hombre golpeo con una palma a Mu Chen. En ese momento, Gu Yunjue resopló y sacó su larga espada de la vaina de inmediato. Los dos poderes demoniacos chocaron entre sí, lo que obligó a Gu Yunjue a retirarse una docena de pasos. Aprovechando la oportunidad, Gu Yunjue tiró de Mu Chen detrás de él. Luego, recogió la última pieza del alma divina de Nébula Arhat con su espada y la apuñaló hasta la muerte en un parpadeo.

Gu Yunjue puso sus manos alrededor de la cintura de Mu Chen y la frotó violentamente. Al mismo tiempo, convocó a la Campana del Alma de Protección Universal que arrojó una luz dorada sobre Mu Chen con un zumbido. Con una leve sonrisa, Gu Yunjue aprovechó la oportunidad y empujó a Mu Chen a la campana.

Después de darse cuenta de lo que realmente había sucedido, Mu Chen intentó salir, pero fue arrojado por una matriz mágica dentro de la Campana. La golpeó con su espada furiosamente, pero solo obtuvo el mismo resultado. ¡Inmediatamente se dio cuenta de que estaba encerrado por este discípulo traicionero!

Al darse cuenta de la ira de Mu Chen, Gu Yunjue solo volvió a sonreír levemente y no dijo nada. Era plenamente consciente de la situación de Mu Chen. El alma divina de Mu Chen era demasiado única. Si el enemigo descubriera este secreto, Mu Chen estaría en peligro.

Al ver a su subordinado más capaz asesinado justo delante de él, el Señor Demoniaco se llenó de una ira que había sido olvidada por siglos. Esta irritación, sin embargo, lo estimuló a reír. "Pequeño niño, ¿cómo te atreves... eh?", Dijo el Señor Demoniaco mirando a Gu Yunjue como si fuera un payaso ridículo e ignorante.

Sin embargo, de repente sintió que Gu Yunjue tenía un linaje de sangre similar a él mismo y quedó atónito. "¿El decimoséptimo?", Preguntó con incertidumbre.

Tenía tantos hijos, pero solo recordaba unos pocos. Simplemente nombro a sus hijos de acuerdo con su secuencia de nacimiento. De todos modos, lo que quería era solo un caparazón calificado para ocultarse, no una familia fabulosa.

No había pensado que el pobre chico que envió al Reino Inmortal había crecido para ser un hombre tan fuerte. "La edad ósea está en los dieciséis años; el poder demoniaco está en la Etapa de Síntesis; las venas espirituales son tres veces más anchas que las personas normales; ¡el cuerpo ha sido fortalecido por remedios milagrosos para ser inmune a los venenos!". Sus ojos recorrieron el cuerpo de Gu Yunjue, dijo el Señor Demoniaco con entusiasmo e incluso arrojó la aniquilación del alma divina de Nébula Arhat a los vientos. "Decimoséptimo, vuelve conmigo. Dejaré pasar esto". Dijo el Señor Demoniaco. Sus pupilas negras se pusieron rojas gradualmente y miraron a Gu Yunjue con creciente emoción.