Capítulo 30

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1 año después...

CEPEDA

La vida es un cumulo de decisiones. Algunas son acertadas, otras son erróneas, pero todas y cada una de ellas marcan tu vida, orientan tus pasos y repercuten de forma directa en la vida de otras personas.

365 días dan para muchas decisiones, el problema es que cuando termina ese año natural llega la valoración, y si esa valoración te demuestra que has tenido más erróneas que acertadas entonces es cuando te puedes venir fácilmente abajo, por suerte para mi había una que me mantenía en pie, un acierto que tenia un valor tan incalculable, que decantaba la balanza con claridad. Gala.

En un principio a los 6 meses debía volver con su madre, pero le renovaron la corresponsalía a 2 años más, y lejos de entristecerme fue la mejor noticia con diferencia que podía recibir en un momento en el que todo se tambaleaba. Habíamos ido los 2 a Madrid persiguiendo mi sueño, un sueño de niñez y bastante egoísta. Había dejado en Ourense a gente muy importante en mi vida, demasiado importante, pero era la ultima bala y hay trenes que debes cogerlos aunque no estés seguro si llegaran a su destino, quedarte con la duda muchas veces es peor.

El disco fue un fracaso, no tuvo el impacto esperado y me cancelaron el contrato, la verdad por una parte me jodio mucho, pero por otra ya nada me ligaba a Madrid. Madrid era una ciudad a la que no me acostumbraba, demasiado bullicio, demasiada gente pendiente de tus pasos, añoraba mi piso en Ourense, añoraba a Roi, a Ana, a Miriam...a ella. Asi que lo decidí iba a volver, era lo mejor para mi y estaba convencido que también era lo mejor para mi hija.

AITANA

-Disfrute de la película -sonrió dando la ultima entrada del ultimo pase de la noche.

-Aitana ve a hacer los baños y las basuras, que así cuando termine la sesión solo nos quedara la sala y podremos cerrar.

-Claro jefa.

Otra noche mas en la que me dolía todo, desde que había vuelto a Barcelona esa era mi vida. Trabajar como una condenada un montón de horas. No era lo que tenia en mente, pero la enfermedad de mi padre me obligo a dejar la carrera a medias y trabajar para sacar adelante la familia. Aun recuerdo el dolor que sentí aquella noche que vinieron a contármelo a mi piso en Ourense...el oír de la boca de mi padre la palabra cáncer me dejo completamente en shock y pese a los miedos de volver a esa ciudad espantosa para mí, sabía que la decisión era clara, no podía dar la espalda a mi familia.

No dije la verdad a mis amigos, realmente no se porque lo hice, de la misma forma que tampoco se porque eliminé cualquier contacto con ellos, seguramente fue una decisión injusta pero lo necesitaba, no por ellos, por otro. Otro al que, pese a estar 1 año sin ver no había podido olvidar ni reemplazar, pero del que no quería saber absolutamente nada más. Me había costado mucho olvidar su olor, el sentimiento que producía su tacto, el sabor de sus labios...me había pasado noches enteras sin dormir llorando como una boba, esperando alguna llamada o algún mensaje...en parte algo estúpido por mi parte cabrearme con alguien al que yo había pedido que se alejara de mi, pero a veces decimos una cosa, mientras nuestro interior piensa otra muy distinta.

Olvidar es algo muy difícil en cualquier ser humano, sobre todo las cosas que nos hacen daño, tenemos como un mecanismo para autodestruirnos constantemente con ese pensamiento de angustia. Pero si lo que tienes que olvidar sale durante esos meses iniciales de duelo, a todas horas en revistas, diarios, televisión y redes, el olvidar se convierte en imposible y te tortura de tal manera que entras en un circulo vicioso del que casi es imposible salir sin ayuda, por suerte yo tenia a Marta, fue mi salvadora, mi ángel de la guarda, como siempre.

-No tenias porque venirme a buscar y menos en viernes, ya sabes que siempre cerramos a las 3 cuando termina la última sesión.

-Sesión golfa la llamáis verdad, que quieres que te diga a mi eso siempre me ha sonado a algo porno.

-Marta por Dios...-nos reímos ambas

-Tu madre hablo conmigo hace 2 días, sobre lo mucho que has cambiado y que si pensaba que tenías algún tipo de problema.

-Mi madre suficiente tiene con mi padre...igual que toda la familia supongo...y cambiar toda mi vida ha cambiado, así que supongo que yo cambio con ella.

-Si, supongo que eso lo explica todo...te has planteado cuando termine todo...

-Volver allí ibas a decir verdad...no, ni me lo he planteado y lo único que me importa es que se cure mi padre. Si en algún momento quiero estudiar pues ya lo hare aquí...

-Yo solo quiero que seas feliz Aiti.

Silencio. Felicidad...hacia tiempo que no sabia el significado de aquella palabra.

CEPEDA

Abrazos, besos y alguna lagrima propia de los reencuentros. Y una cara de felicidad de mi hija que no había visto en mucho tiempo, estaba claro que aquella era la decisión correcta.

-¿Asi que enana ya has hecho la carta a los Reyes?

-Si, he pedido una moto, una casita de muñecas y una guitarra.

-¿Una guitarra? – rie Ana

-¿Una moto? – rie Roi

-Si como papa, cantante y motorista.

-Di que si cariño, tu deja estar a esos dos y pide lo que quieras, que la Tita Miriam sabe que serás una gran cantante.

Sonrio al oir a Miriam, esta claro que la Musica para mi había sido un sueño precioso, un sueño que había acabado fatal, pero era una de las pasiones de mi vida, y aunque profesionalmente estaba claro que nunca iba a ser mi oficio, siempre estaría presente en mi vida, asi que no había ninguna necesidad de cortar a Gala sus aficiones.

-¿Y bueno como esta el pequeñito de la casa?

-Pues bien, lo he dejado en casa con su padre que estaba dormidito pobre, ya te lo presentare pronto.

-Estoy deseando verlo en persona.

Habia visto fotos por whatssap pero estaba deseando conocer a mi sobrino en persona.

-¿Has sabido algo de ella?

Sabia a quien se referia Ana, y antes de responder mi silencio solo se debia a calibrar la respuesta, no quería que supieran que seguía pensando en ella, ni siquiera quería que se plantearan que me seguía importando, mas que nada porque sabia que nunca volvería y lo que menos quería era que me la recordaran cada dia.

-No, nada, es mejor así. Cada uno tiene su vida, todo esta olvidado.

Curioso verdad, decir que todo esta olvidado en voz alta, mientras en tu cabeza nada esta olvidado. 

Una lluvia en mi bolsilloWhere stories live. Discover now