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Pequeño Maestro Dandy: Capítulo 34

Arco III: Pequeño Maestro Dandy

Shi Qing agitó una mano frente a su nariz para disipar las fragancias empalagosas que flotaban en la habitación lujosamente decorada, pero fue en vano. El olor abrumador aún asaltaba sus sentidos. Solo podía toser dos veces y cubrirse la nariz con la manga mientras examinaba los recuerdos que el Sistema le había enviado.

Este era un mundo de fantasía ambientado en la China imperial.

El protagonista masculino era el Noveno Príncipe Yu Chennian. Comenzó como el miembro más lamentable de la familia imperial y se levantó para convertirse en el ganador final de la batalla por el trono.

El Emperador tuvo nueve hijos, de los cuales el más impopular fue Yu Chennian. La razón es, según la novela, porque su madre biológica era solo una fea mucama de palacio. El Emperador una vez se obligó a ella cuando estaba borracho y Yu Chennian nació unos meses después.

Pedirle al Emperador, con un harén lleno de tres mil bellezas, que acepte el hecho de que fue tras esta fea mucama del palacio fue equivalente a pedirle que aceptara su deseo de un cerdo. Se puso furioso tan pronto como se despertó. Quería que la criada fuera ejecutada, pero la bondadosa Emperatriz persuadió a Su Majestad para que perdonara la vida de la criada.

Como resultado, la criada del palacio dio a luz al noveno príncipe. Se dijo que todas las flores de loto en los estanques del palacio se marchitaron la noche en que nació, por lo que el Emperador decidió que Yu Chennian era un símbolo de desgracia, un mal presagio.

Según la tradición, la madre ganó honor en función de las circunstancias de su hijo. Como la doncella del palacio dio a luz a un príncipe, era costumbre otorgarle un título. Sin embargo, el Emperador se negó rotundamente a hacerlo.

No quería tomar un cerdo como su concubina.

Ejecutó a la criada que acababa de dar a luz, por lo que el recién nacido Yu Chennian rápidamente se quedó sin madre. Además, el Emperador dejó en claro que no quería ver a este hijo suyo. Como tal, nadie en el palacio se ofreció a criar al noveno príncipe.

Al final, fue la Emperatriz que no tenía hijo propio quien se adelantó para tomar esta papa caliente llamada Yu Chennian.

Para empezar, no era favorecida, y como se creía que Yu Chennian no tenía suerte, los dos se distanciaron cada vez más del Emperador.

Entonces, la Emperatriz perdió su respaldo debido a la muerte de su padre y hermanos en la batalla. Fue atacada y desterrada al palacio frío. Yu Chennian también lo siguió. La pareja de madre e hijo recibió el hombro frío de todos los demás. Si bien Yu Chennian pudo estudiar en el Estudio Imperial, no fue de ninguna manera una bendición porque sus cinco hermanos lo humillarían ante cualquier posibilidad. Aunque era el hijo del Emperador, incluso los sirvientes más humildes del palacio estaban mejor que él.

Cuando era un adolescente, los príncipes entraron al palacio. Incluso aquí, la gente estaba feliz de intimidar a Yu Chennian. El que más lo atacó fue el hijo del primer ministro.

En esta dinastía, el Primer Ministro era el líder de todos los funcionarios. Además, este primer ministro también provenía de una familia tradicionalmente aristocrática. El emperador lo trató con más respeto que sus propios hijos. Se podría decir que, mientras el Primer Ministro ofreciera su apoyo a un príncipe, estaría a medio camino del trono.

Por lo tanto, el hijo legítimo del primer ministro, naturalmente, se convirtió en alguien con el que los príncipes trataron de obtener el favor.

El arrogante hijo del primer ministro era aún más adicto a maltratar a Yu Chennian que los cinco príncipes. La humillación verbal era lo menos que haría. También planeó varios tipos de bromas aparentemente inofensivas que podrían convertirse rápidamente en letales. Por ejemplo, una vez puso una serpiente en la mesa de Yu Chennian.