Encubierta

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Salté

Bastaron tan solo unos segundos  para lanzarme por ese oscuro canal de agua sucia. Todo mi cuerpo quedó cubierto por este oscuro espacio, la corriente me arrastraba sin piedad y aunque deseaba mantenerme consciente, no podía. Mi mente solo desea que esta pesadilla acabe ya. Mi única esperanza es llegar al mar y escapar muy lejos.

Cuando por fin siento la brisa salada del mar , llego al final del canal desembocado en el mar, rápidamente empiezo a nadar hacia la superficie por la falta de aire. Con la respiración agitada busco llegar a tierra, pero grande fue mi terror al ver un gran número de soldados rodeando el puerto marlyeno. Estoy perdida, la baja temperatura del agua me matará sino logro llegar al puerto y toda esta locura habría sido por nada.

- Sabía que lo lograrias...

Esa voz, yo conozco esa voz.

Me dirijo hacia los botes pesqueros que flotaban cerca de donde me ocultaba, ahí una antorcha iluminó mi rostro. Sus ojos azules me sorprendieron. No pensaba encontrarlo ahí, no cuando estaba apunto de ser capturada por los mismo soldados a quienes siempre felicitaba por su lealtad hacia Marley. Este no puede ser mi final , no cuando en una sola noche deje de ser "La luz de Marley" y me convertí en uno de esos demonios. 

Zeke me tendió la mano y la tomé sin dudar. Al subir al bote pude visualizar que no se encontraba solo, junto a él se encontraba sentado un soldado y una mujer de cabello rubio muy corto, era ella quien sostenía la antorcha. 

- ¿Cómo supiste que estaría aquí?- tartamudee por el frío. La mujer me dio una manta de color rojo en silencio. Él aún no respondía mi pregunta, su mirada viajó por todo mi cuerpo, pues de seguro vio la heridas que me había provocado la corriente. En este punto ya no sabía que podía hacerme más daño. Su silencio me angustiaba, ¿acaso va entregarme a esos soldados?, ¿podría él traicionarme después de todo lo que dijo sobre de ser libre y poner fin a la guerra ?

- Era una apuesta- dijo finalmente - Sabía que tu padre te encerraría si lo amenazabas con revelar la verdad, haría todo lo necesario para callarte, pero no te mataría pues eres la "última eldiana de sangre real", al menos eso es lo que él cree. Antes de que empezara el baile, me asegure de ver las posible salidas de la mansión y todo apuntaba al viejo canal de agua, ya que llegarias al mar como última opción. Sinceramente, no creí que fueras a ser tan valiente de lanzarte a la deriva de un camino desconocido sin medir las consecuencias. Sin duda eres esa pieza que necesitaba para llevar a cabo mi plan, Cassandra.

Ahora si no entendía nada, sus palabras me tenía confundida. 

- ¿Acaso fue esta una prueba?- solté enojada.

- Si y no, tener como aliada era parte de mi plan, pues no soportaba verte ser su marioneta,su esclava. Lo demás lo decidiste tú, aunque el que te hayas lanzado de esa manera ...

- ¿Qué es lo que quieres , Zeke?- le corté. Esta intriga sobre sus verdaderas intenciones me volvía loca. Él suspiró por mi falta de paciencia aunque eso no me importaba, solo quería terminar con todo este misterio.

- Quiero que vayas a la Isla Paradis como una soldado que traiciona a Marley.

Lo mire incrédula. No podía salir de mi asombro ante tal pedido. Todo menos esto. Aunque haya descubierto la verdad sobre mi verdadero origen, me negaba a creer que podría ir a la Isla Paraíso como una soldado que traicionaba a la nación que tanto amo, por la que dedique mi vida protegerla. No es justo.

- No lo haré, aún si es el único lugar donde pueda estar a salvo- él empezó a reírse sin explicación alguna.

- ¿Qué es tan gracioso? ¡No iré a ese lugar de demonios!- explote. Lancé la manta hacia su cara pero fue olímpicamente atrapada por él sin esfuerzo alguno.

-Tengo un plan , Cassandra. La Isla Paradis es el único lugar donde tu padre no se atrevería poner un pie, el único lugar donde podremos empezar el plan que pondrá fin a esta guerra, ¿no  es esto lo que quieres?

-Sí, pero yo...

- Irás a la Isla Paradis junto a Yelena- señaló a la mujer rubia, ella solo asintió como si fuera su sirviente- ella, al igual que tú, son parte del plan, se declararán como soldados que desean el fin de Marley, se convertirán en aliados de Paradis. Cuando ya cuenten con la confianza de "ellos", procederemos con la segunda parte del plan.

-Zeke no pue...

-Te estoy dando una segunda oportunidad, Cassandra. Acéptalo. Vive en Paradis, sigue mis instrucciones y juntos lograremos poner fin a esta guerra.


                                          CASSANDRA TYBUR

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                                          CASSANDRA TYBUR

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Azar - Levi AckermanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora