Prostituta Por Obligación

Capítulo 6

NARRA AINOHA:

Pasan los minutos y cuando he podido recuperar un poco el oxígeno recojo los tacones y me pongo la falda como puedo, salgo agarrando fuerte la puerta al salir por el pasillo me tambaleo y caigo, pero me vuelvo a levantar diviso a las chicas que bajan de la barra.

- ¿Cuánto tiempo has estado bailándolo? - me dice Fátima, pero al instante nota que algo no va bien.

- ¿Qué te pasa Ainhoa? - levanta mi cara para mirarme seria.

- Me violo - se me humedecen de nuevo los ojos y la aparto un poco brusca.

- ¡El tipo ese te violo! Veras el jefe - la miro cabreada, aunque ella no tiene la culpa.

- Fue el jefe ostias - la grito otra compañera mía intenta ponerse en mi camino, pero la empujo.

- Ainhoa no te vayas - escucho a Fátima, pero paso me dirijo a la barra y le pido una botella entera de vodka al camarero me mira raro, pero me la da.

- Apúntamelo ya te la pagare - paso de los reclamos de las chicas y me dirijo a la azotea.

Subo las escaleras como puedo aun me tiemblan las piernas cuando llego el aire me golpea abro la botella y comienzo a beber siento el ardor en mi garganta aparto la botella poniendo una cara asqueada pero es tanto el dolor que siento que me da igual todo, me apoyo en la barra y miro hacia abajo me echo para tras al sentir el mareo por la altura que hay, suelto un grito fuerte hasta que siento que me pica la garganta por el esfuerzo.

¿POR QUÉ? ¿PORQUE ME HACES ESTO? - grito al cielo, aunque sé que no voy a recibir ninguna respuesta.

NO ME MEREZCO ESTO ODIO MI CUERPO PORQUE POR ELLO ME VIOLAN ME TOCAN - vuelvo a pegar otro grito después de decir eso y continúo bebiendo de la botella.

ME QUIERO MORIR - caigo de rodillas al suelo clavándome algunas piedras en las rodillas y lloro aún más fuerte.

Me apoyo en la pared y continúo bebiendo ya voy por la mitad de la botella hay algunos momentos que rio sin sentido y otros en los que lloro aún más y golpeo la pared por la rabia, pero aun golpeando no dejo de sentir lo que siento, escondo mi cara en mis rodillas.

No sé qué hora es, pero ya me queda el culo de la botella y me da vueltas todo me intento levantar, pero me tambaleo así que me vuelvo a sentar apoyándome en la pared, suspiro siento por unos momentos arcadas, pero se van no sé cómo, pero al cabo del rato me quedo dormida.

La luz me da en toda la cara me tapo rápido siento los efectos del alcohol sale un quejido de mis labios y parece como si mi cabeza fuera a explotar me tumbo en el suelo siento frio pero si me levanto me voy a marear aún más, me tiro un buen rato mirando el cielo azul y los pájaros pasar y pienso algún día podre pisar las calle porque nunca tuve la oportunidad, sin previo aviso me vuelvo a quedar dormida otro rato más, cuando vuelvo a abrir los ojos parece como si levitase miro a la persona que me tiene cogida y es Mario me lleva hasta mi habitación dejándome despacio en la cama.

- Mario... - mi voz sale casi un susurro.

- No hables solo descansa - se alza dejándome un beso en la frente, pero antes de que se valla tiro de él.

- Por favor no me dejes sola - mis ojos se humedecen de nuevo dificultándome la visión cuanto odio llorar me siento débil.

- Tengo que hacer unas cosas - antes de que siga hablando le corto.

- Por favor - suelta el aire y rodea la cama para tumbarse a mi lado.

- No quiero ni preguntarte que paso algo me contaron las chicas - apoyo mi cabeza en su pecho y las lágrimas salen sin más apretó su camiseta y aspiro su colonia.

- Odio mi vida - siento su mano que empieza a acariciar mi pelo.

- Tranquila todo estará bien - me besa de nuevo y rodea mi cintura con su brazo en estos momentos se siente bien porque me siento arropada con sus acaricias en mi cabeza termino cerrando los ojos relajándome.

NARRA LUCIFER:

Que día de mierda, llevo todo el día encerrado en el despacho arreglando los papeles, cojo el vaso que contiene café y me bebo de un tirón lo que queda, suspiro pasándome mi mano por mi pelo frustrado estoy deseando que llegue la hora de mi descanso y poder ir al puticlub para ver a tigresa vi algo en ella que me encanta como se mueve en la barra me cautiva me deja embelesado es preciosa y dulce.

Unos golpes en la puerta se escuchan hago un ruido con la garganta para decir un adelante entra la de limpieza levanto la cabeza mirándola esperando a que hable.

- Señor solo venía a decirle que su habitación y la habitación roja están limpias y ordenadas como usted me lo pidió - asiento guardando unos papeles en una carpeta.

- Gracias Margarita puede retirarse y lo que queda de día disfrútelo con su familia - sonríe.

- Gracias señor que pase un lindo día hasta mañana - cierra la puerta.

Me levanto cogiendo algunas carpetas para dejarlas en el armario que tengo donde están los papeles más importantes, cuando lo coloco muevo mis hombros para adelante y atrás en un intento de relajarlos un poco no consigo mucho miro que todo está ordenado y guardado en su sitio para después salir y cerrar con llave.

Al bajar al piso de abajo me encuentro a Armando me saluda y cruza sus brazos.

- Ya sabemos quiénes son los que intentaron robarte - me tiende unos folios que ni me había dado cuenta que traía.

- Trabajan para Sebastián el mismo que desde hace un año intenta sabotearte tus negocios - apretó mi puño libre.

- Lo sabía por eso les pregunte joder sabía que me estaban engañando - asiente dándome la razón.

- Entonces, ¿Qué hacemos con ellos dos? - me dirijo a por mí chaqueta que está colgada.

- Dales su merecido - con eso salgo y hago una seña para que venga el chofer.

Estar cabreado se queda corto ahora lo único en mi tiempo de descanso es ver a Tigresa bailar consigo dejar todos los asuntos de los negocios a parte además de que quiero volver a tocarla sé que ella sintió algo con mi toque sé que está prohibido tocarlas, pero no pude resistirme el chofer me saca de mis pensamientos cuando me saluda.

- Hola buenas noches señor - le devuelvo el saludo y me abre la puerta de atrás entrando.

- Llévame al mismo sitio que ayer - mira de reojo para mi lado y asiente.

Para ya que voy tigresita a verte y para volver a sentirte.

En galería tenéis a Ainhoa, espero que os guste el capítulo 😘