Conejos, un regalo de burla y cariño.

3.8K 732 290
                                    

¡ Gracias a Okami-Tsukiyomi por la ayuda !

Lan Xichen quería matar a su tío político, pero su tío Qiren lo mataría primero a él antes de si quiera, pensar en asesinar al Wen. Un par de conejos, uno blanco y uno negro. Según su tío político, eran para que WanJi no sintiera más remordimiento hacia Xichen.

Lan Xichen colaboró con el regalo, pero su tío político los había mandado antes de tiempo.

Al menos WanJi ya no le decía que lo odiaba.

Es más, se veía feliz. Sus ojitos brillaban mucho teniendo a ambos conejitos frente a él.

Los llamó BunJi y BunXian, al parecer eran una pareja...

Una pareja...

Pareja...

Ahora que lo pensaba, su tío político le había dejado una nota con el dueño de la tienda.

"Uno de ellos es hembra, su temporada de reproducción se acerca, cuídalos bien >u • "

Esto era un regalo de broma, una mala broma por cierto, desde que lo vió teniendo una cita con el póster no ha parado de molestarlo.

Cuando su tío Qiren le preguntó cómo le iba con el póster, ya había sido el colmo. Sentía ganas de llorar nada más de pensar de que su tía, quien estaba en quién sabe dónde, se enterara.

Si bien esa mujer odiaba a su cuñado, sólo había algo que los hacía convivir sin pelear, y era el humor negro, además del cariño que le tenían a Lan Qiren, claro.

Ahora había una pareja de conejos con altas probabilidades de aparearse en su hogar, lo peor del caso, es que por cuestiones como el cuidado de ambos animales no podían ser delegadas a WanJi.

Pues era muy pequeño para cuidar de ellos y no sabía mucho de ellos.

Aunque Xichen tampoco, el dueño de la tienda le aconsejó bien, por suerte.

. . .

Con el permiso de WanJi, por fin pudo tener a ambos conejos en su habitación. En la mañana su hermanito le ayudaría a limpiarles su jaulita y alimentarlos.

Los acomodó bien, y se durmió pensando que sería una noche tranquila, pues no mostraban señal de querer aparearse.

. . .

Escucho chillidos a las tres de la mañana, y en cuanto volteó, observó a ambos conejos teniendo "papapa".

El conejo blanco estaba sobre el negro, que era el que chillaba; trató de ignorarlos y seguir durmiendo, pero fue en vano.

Con el pasar de los minutos los chilllidos aumentaban aún más, aunando otro martirio nocturno a Lan Xichen.

. . .

Casi no durmió por el ruido que hacían los conejos, al menos tendrían bebés. Cuando le dijo a WanJi que sus conejos tendrían bebés, este no contuvo su ilusión.

¡Que difícil es ser hermano mayor!Where stories live. Discover now